Otro de los testigos identificado como Lancelot, presentado por la Fiscalía General en el juicio en el caso conocido como operación Cuscatlán, incriminó a un distribuidor de tomates de la zona Oriental como una de las personas que lavaba dinero a la mara Salvatrucha (MS).
El testigo aseguró que Buenaventura Gómez Hernández se dedicaba a lavar el dinero de la referida organización pandilleril en su negocio de venta de tomates situada en el centro de San Miguel. Eso ocurrió entre los años 2011 y 2015.
Lancelot aseguró que él le llevaba de $50 mil a $100 mil semanales a Gómez Hernández para que éste lo “invirtiera” en su negocio.
El procesado tenía la obligación de devolverles la misma cantidad de dinero que le entregaban y en otras ocasiones les entregaba una cantidad mayor, según el testigo.
Aseguró que acudieron a Gómez Hernández para que les lavara el dinero porque era de “confianza de la mara”, ya que era el padrastro del cabecilla de la MS en San Miguel, Óscar Geovani Santos Medrano, apodado El Vendaval.
El testigo Lancelot reveló que la estructura de la MS en San Miguel, a la que ellos denominaban Normandies Locos Salvatruchos, obtenía de $400 mil a $500 mil mensuales producto de las extorsiones y la venta de drogas.
Carlos Arturo Espinoza, abogado defensor de Gómez Hernández, dijo que el testimonio de Lancelot no aportó información que pueda involucrar a su defendido en los hechos delictivos que lo involucra.
“No hubo información que pueda ser corroborada de ninguna otra forma que no sea por el dicho de él mismo, son afirmaciones que no tienen sustento probatorio”, dijo Espinoza, quien dijo estar confiado de que el juez emitirá una sentencia favorable a su defendido porque no hay pruebas en su contra.
Espinoza sostuvo que la declaración de Lancelot es contradictoria porque lo señala de lavar dinero de la pandilla, pero la Fiscalía General lo acusa de organizaciones terroristas.
Para mañana está previsto que inicien los alegatos finales de los fiscales del caso y de los defensores de los 425 pandilleros y colaboradores de la MS que son procesados por organizaciones terroristas, homicidio agravado, conspiración y proposición para el delito de homicidio y tráfico ilegal de armas de fuego.
Uno de los fiscales aseguró que en el juicio se pudo probar que los 425 procesados son integrantes de la mara Salvatrucha y que esta última es una organización terrorista.
Sostuvo que pedirán al juzgado antimafia de Sentencia que sean declarados culpables y que les imponga la pena máxima de prisión que corresponde al delito de organizaciones terroristas.