¿Son seguros los edulcorantes artificiales?

Endulzar, uno de los placeres de la vida, es sinónimo de engordar. Por eso, el mercado ofrece muchas alternativas con menos calorías para sustituir el azúcar de siempre: los edulcorantes artificiales, pero… ¿Tienen acaso un lado amargo?

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Foto Por Shutterstock

Por Mireya Amaya / EFE

2019-07-06 8:30:31

Unos dicen que enloquecen el organismo y otros que son ideales para perder kilos. Lo cierto es que los edulcorantes se han posicionado en el vocabulario cotidiano y, ante tantas conjeturas, lo más saludable es conocerlos.

Lo primero y muy importante, de acuerdo con el nutricionista español Juan Revenga, es aclarar que “un edulcorante es, por definición, cualquier cosa que aporta dulzor. El azúcar de mesa también lo es”.

El problema con el término, según el experto, se debe a que “la población general asume que se trata de un aditivo que aporta dulzor sin calorías o con un menor grado de estas”. Esos, los que la teoría dice que son aliados para adelgazar, son los edulcorantes artificiales.

La Clínica Mayo los define como los sustitutos sintéticos del azúcar, pero explica que pueden derivar de sustancias naturales, como hierbas o el azúcar mismo. Estos también se conocen como endulzantes intensos porque son mucho más dulces.

La institución agrega que pueden ser alternativas atractivas al uso de azúcar porque prácticamente no añaden calorías a la dieta, además de que para endulzar solo se necesitan cantidades pequeñas.

Variedades y usos

EFE Salud explica que la lista de edulcorantes artificiales existente la encabezan los acalóricos, entre los que están la famosa sacarina, el primer edulcorante utilizado de forma masiva desde los años 80; el aspartamo, la sucralosa, el acesulfamo-k, el ciclamato, la taumatina, la stevia y la neohesperidina.

En ese gran grupo, apunta Revenga, están los polialcoholes o polioles, “que estarían de forma natural en algunos vegetales”. Estas sustancias, que se usan en chicles y caramelos, son: sorbitol, manitol, isomalt, maltitol, lactitol y xilitol.

También son usados ampliamente en alimentos procesados como refrescos, mezclas de bebidas, productos horneados, postres, alimentos enlatados, mermeladas y jaleas, así como en productos lácteos.

Además, son populares para el uso doméstico e incluso hay algunos que se pueden utilizar para hornear o cocinar.

Posibles beneficios para la salud

Según la Clínica Mayo, estos productos ofrecen algunas ventajas como el hecho de que no contribuyen a la formación de caries.

Por otro lado, con su uso también se benefician aquellas personas que deben controlar su peso, ya que prácticamente no tienen calorías.

En contraste, una cucharadita de azúcar tiene alrededor de 16 calorías. Así que una lata de refresco de cola endulzada con 10 cucharaditas de azúcar añadida tiene alrededor de 160 calorías.

En este sentido, si una persona está tratando de perder peso o prevenir el aumento del mismo, los productos endulzados con estos productos podrían ser una buena opción, “aunque su efectividad para la pérdida de peso a largo plazo no es clara”, indican.

Por otro lado, los edulcorantes artificiales no son carbohidratos, por lo que son de gran beneficio en casos de diabetes, ya que no elevan los niveles de azúcar en la sangre.

¿Provocan cáncer?

Las interrogantes acerca de la relación entre los edulcorantes artificiales y el cáncer surgieron allá por 1970, cuando estudios iniciales mostraron que el uso de ciclamato en combinación con la sacarina causó cáncer de vejiga en animales de laboratorio.

Sin embargo, posteriormente se hicieron estudios de carcinogenia para determinar si en efecto esas sustancias podrían causar cáncer; pero los resultados no arrojaron evidencias claras que indicaran una relación con el desarrollo de ese mal en seres humanos.

Según el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos y otras agencias de salud, lo mismo ha ocurrido con los estudios de otros edulcorantes aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).

Por otro lado, numerosos estudios confirman que los edulcorantes artificiales generalmente son seguros en cantidades limitadas, incluso para mujeres embarazadas.

Edulcorantes naturales

Tienen un aporte de índice glucémico, es decir, que elevan la glucosa en la sangre, dependiendo del consumo. Aportan un mayor número de calorías. La sacarosa, que es el azúcar de mesa; la fructosa, que está en la fruta, y la lactosa, en la leche. También la glucosa y la maltosa.Estos son muy saludables y se pueden consumir sin problema, midiendo bien las cantidades.