Solo el 14.8 % de las pólizas de seguro son para vivienda en El Salvador

Los seguros de residencia son un producto poco buscado por los salvadoreños, esto pese a vivir en un país vulnerable a desastres naturales. De 1.5 millones de seguros contratados en el país solo 22,000 son para vivienda e incendio.

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Foto EDH/Archivo.

Por Tania Urías

2019-11-04 10:20:55

“Daños por deslizamiento, derrumbe o desplome de terreno” se llama la cobertura con la que las compañías aseguradoras pueden responder en caso de que una persona pierda su vivienda o esta se declare inhabitable, como le ocurrió a varias familias el pasado 16 de octubre en la colonia Santa Lucía en Ilopango.

Seis de las casas están inhabitables y 195 familias en total han sido desalojadas a espera de investigaciones y soluciones.

Pero aunque como ellos, muchas familias habitan en zonas vulnerables, pocas son las que contratan una póliza que asegure sus viviendas.

Según Ernesto Herrera, presidente de la Asociación Salvadoreña de Productores de Seguros, Aspros, el seguro de residencias e incendios es el cuarto con más demanda de ocho que se ofrecen en el país y representa aproximadamente unas 22,000 pólizas, pero ese número solo significa el 14.8 % del total del mercado de seguros, que ya de por sí es bajo en el país (1.5 millones de pólizas que representan el 26% del total de la población que paga un seguro privado).

Además, no todas las pólizas de seguro incluyen coberturas por derrumbe. De hecho, según Ernesto Herrera, la mayoría suman lo que se denomina “cobertura a riesgos nombrados”, es decir, una lista de posibles riesgos a los que una vivienda puede estar sometida.

La cantidad de riesgos que cada banco oferta en las pólizas que adjunta a la hipoteca están sujetas a las políticas de cada institución financiera, advierte Herrera.

La cobertura de vivienda, que en el ramo se llama Incendios y Líneas Aliadas o Daños, representa el 14.8% del total del mercado seguros.

Esta incluye seguros para viviendas y empresas y cubre principalmente incendios y desastres naturales y sobre estos, los riesgos que representa, por ejemplo la caída de un árbol producto de lluvias intensas o de una paredón por un terremoto.

Ante un desastre y un reclamo, las compañías aseguradoras además de evaluar si el asegurado tiene la cobertura también investigan el hecho, para determinar si -por ejemplo- el desplome de tierra fue por aguas lluvias, por aguas servidas (negras) o por terremoto. Esto se traduce en la respuesta que dará la aseguradora y el deducible que pagaría el afectado.

El licenciado Herrera advierte que si las pólizas que tienen las familias que aún pagan sus casas, no contempla esta cobertura, las compañías aseguradoras podrían no responder.

Lo mismo ocurriría para aquellas que ya terminaron de pagar sus propiedades y no tenían ningún tipo de seguro en sus viviendas.

Las pólizas más comunes que los salvadoreños contratan son los de Vida, con el 24.4%. Es el de más demanda, y esto, dice Herrera, tiene que ver con que las empresas, como prestación suelen pagar este tipo de póliza a sus empleados. Lo mismo ocurre con las financieras, que lo exigen para emitir un crédito.

Salud, Accidentes y Enfermedades con el 19% y Autos con el 15.2 % son los otros más demandados.

 

El salvavidas de su propiedad

El seguro de incendios y líneas aliadas o daños, como también suele llamarse, registró $23.37 millones en primas al primer trimestre de 2019, $3 millones más que en el mismo periodo de 2018, según datos de Asociación Salvadoreña de Empresas de Seguros (ASES).

Sin embargo, aunque el rubro sigue creciendo, todavía el porcentaje de penetración es bajo.
Y es que según Herrera, la gente todavía le resta importancia a la necesidad de asegurar sus propiedades, y no solo eso, la mayoría desconoce el tipo de póliza con la que cuenta.

“Por obligación el banco lo amarra a una póliza, pero la gente no pregunta ni se informa sobre esta”, dice el presidente de Aspros.

Uno de los primeros aspectos que debe conocer es que hay dos tipos de coberturas: la de riesgo nombrado (lista de posibles peligros) que es la que las instituciones financieras le otorgan y la de “todo riesgo”.

Esta última, como su nombre lo indica le incluye cualquier tipo de peligro al que su propiedad pueda estar expuesta.

Para tener una idea, la póliza de riesgo nombrado puede tener de una a 10 coberturas promedio; la de todo riesgo llega a cubrir hasta 39 aspectos, desde incendio- lo más común- hasta pago a ingenieros, si su casa sufre un daño y ha que reconstruirla, por ejemplo.

“Lo más importante es que usted como consumidor determine el tipo de coberturas que necesita, de acuerdo a dónde está ublicada la casa, porque si vive en la montaña, si toma incendio por maleza o si vive el mar, inundación de agua fluvial (río u océano), pero en la capital, eso no le sirve”, explica el presidente de Aspros.

“Las compañías tienen un paquete ya fijo, pero siempre hay que saber qué incluye, si se compra a nivel personal y si es la del banco, por lo general incluye coberturas básicas que deben conocerse para saber si son las que más se adaptan a sus necesidades y propiedad”, agregó el presidente de Aspros.

El ejecutivo explicó que si usted ya tiene una hipoteca, puede pedir que le den una copia de su póliza para evaluar si lo que está cubierto le conviene o no y decidir cambiarlo.

Cada institución financiera o incluso del Fondo Social para la Vivienda (FSV) tienen sus propias políticas y quizá el consumidor deba negociar el tipo de cambios que quieren hacer con su póliza o incluso si decide renunciar a esta y tomarla por separado.

¿Cuánto paga en promedio? El costo por un seguro de vivienda tiene que ver con la ubicación y costo de la casa, entre otros aspectos, pero, por ejemplo, una casa de $50,000 podría pagar unos $132.80 por año, por lo general en cinco cuotas de 28 dólares. Cada entidad determina el monto y las cuotas.

Pasos a seguir al tomar un seguro de casa

1- Si usted hace un préstamo hipotecario es obligatorio tomar un seguro de vivienda. Usted puede solicitarle a la institución financiera que le muestre lo que su seguro cubrirá.

2- De igual forma, si tramita un préstamo con el Fondo Social para la Vivienda FSV, también le incluirá un seguro. En ambos casos son seguros masivos y ya ambas instituciones la Banca y el FSV tienen compañías aseguradoras contratadas.

3-Lea la póliza y asegúrese de entender todas las coberturas que contiene, si hay alguna que no le parezca y no la necesita, puede eliminarla o sustituirla por otra, lo que puede implicar más pago mensual.

4-Si la cobertura que le ofrecen- la mayoría son riesgos nombrados- no le conviene, usted puede optar por pagar por aparte su seguro de daños o incendios, como se le conoce a este tipo de póliza, pero le puede implicar un cargo adicional al banco, consulte siempre.

5-Si hay términos que no entiende, el banco o la compañía aseguradora debe explicárselos, no firme hasta que no esté claro de lo que contendrá su póliza.

Unas 195 familias han resultado afectadas por una cárcava en la colonia Santa Lucía en Ilopango . Foto EDH/Archivo.

Las diez coberturas que un seguro residencial debe tener

Incendio o explosión de cualquier tipo. Es uno de los siniestros más frecuentes y por lo general puede implicar pérdida total de la casa.

Terremotos, temblores o erupción volcánica.
Que puedan provocar daño parcial o total en la vivienda.

Robo de bienes. En esta cobertura es clave incluir bienes que se consideren de alto valor como obras de arte.

Daños por deslizamiento, derrumbe o desplome de terreno.A la hora de que se contemple esta cobertura lea bien condiciones.

Huracanes y ciclones. Si a la casa le cae un árbol o una pared (aunque no suele haber huracanes en el país, se toma en cuenta lluvia extrema).

Deuda o muerte accidental del titular.
Está contemplada en la mayoría de pólizas, permite que la deuda se pague si el titular muere.

Actos de terrorismo. Aunque el país no está ya en guerra, debido al nivel de violencia es recomendable esta cobertura.

Daños por desprendimiento de tierra o arrastre de lodo. Por un temblor o exceso de lluvia, ejemplo: la colonia Las Colinas en 2001.

Actos vandálicos o disturbios.
Si en una marcha o desórdenes en la calle le dañan su propiedad.Alquiler temporal. Si su casa sufre un daño que lo obliga a dejarla, la aseguradora podrá darle un monto para alquilar hasta que la repare.