SANTA ANA. Los habitantes de la Ciudad Morena tendrán que esperar más tiempo para que el Concejo Municipal logre consesuar un proyecto con el cual se puedan cambiar 10,159 lámparas, con las que se pueda iluminar la zona urbana, suburbana, comunidades y cantones.
La mayor parte de esa lámparas ya cumplieron su vida útil. Según la alcaldesa, Milena Calderón, cerca de 3,000 focos no sirven, más de 1,000 están encendidas todo el tiempo y otras están intermitentes, lo que hace que el servicio de iluminación sea deficiente.
El proyecto para el cambio de luminarias se llevó a votación el lunes de esta semana durante la reunión del Concejo, pero no logró una mayoría calificada de regidores, lo que implica que el municipio continuará con lámpara en mal estado.
“Lamento que ayer (lunes) la Democracia Cristiana, GANA y el FMLN no quisieron acompañar el proyecto de iluminar Santa Ana, cuando ese proyecto lo que traía era, no solo iluminar la ciudad, cantones y lotificaciones, sino también evitar la delincuencia”, dijo la alcaldesa Milena de Escalón durante una entrevista de televisión.
Según De Escalón, la ciudad y su periferia necesitan que su sistema de iluminación sea innovador y eso pasa por cambiar la tecnología desfasada que tienen actualmente, por luminarias tipo LED.
El proyecto contemplaba no solo el cambio de las más de 10,000 lámparas, también incluía el mantenimiento por 10 años de parte de la empresa con la que se iba hacer el contrato.
La alcaldesa aseguró que para cambiar el sistema actual no se haría ningún préstamo, como muchos han hecho creer, sino que se pagaría con el ahorro de energía que se lograría con las luminarias LED.
Uno de los concejales del FMLN, Luis Corvera, dijo que ellos cuestionaron el diseño del proyecto porque el monto de la carpeta técnica fue de más de $35,000.
“Nosotros comenzamos a investigar precios de mercado de lámparas y encontramos que habían otras más baratas. Nosotros empezamos a sugerir que al proyecto se le hicieran modificaciones porque era demasiado elevado”, aseguró Corvera.
Otro punto que cuestionó el regidor del FMLN es que el proyecto se vendió como que iba a cubrir la zona suburbana y rural, lo cual “no es cierto”, insistió.
“No cubre cantones ni colonias alejadas. En resumen, el proyecto andaba por 13 millones de dólares; pero con las consultas que hicimos con técnicos nos dijeron que el precio andaba demasiado elevado”, expresó el regidor.
La alcaldesa cuestionó los argumentos de algunos de los regidores, señalando que el proyecto se hizo hace un año y fue elaborado por un especialista en luminarias.
Según Milena de Escalón, los concejales que representan los distintos partidos, a excepción de ARENA, quieren que sea la comuna la que instale las lámparas.
“Cómo es posible que un partido político diga ‘no quiero hacer esto’, porque unos quieren comprar las lámparas y otros irlas a poner con el mismo alambre viejo, no va a durar ni un año.
Eso dijeron, que nosotros compremos las lámpara y nosotros las pongamos. Yo creo que esa visión obsoleta tiene que cambiar en los políticos”, opinó.
Pero el concejal del FMLN respondió que ellos están de acuerdo con iluminar el municipio, “porque Santa Ana se lo merece”, pero se debe hacer con el consenso de todos los partidos.
Según Corvera, otro de los cuestionamientos que hace la mayor parte de regidores es que la garantía de mantenimiento es de 10 años, pero cuando el contrato termine tendrán que hacer otro proyecto similar y un nuevo gasto.
Agregó que, dentro del proyecto, se había contemplado cerca de 1 millón de dólares, “pero la trampa podría estar en ‘que si va haber ahorro, para qué le ponen mantenimiento, si no necesita’”, cuestionó.
Su argumento lo basa en que en la administración del ex alcalde Alfredo Peñate (2012-2015) se mandaron a poner cerca de 200 lámpara LED en la Avenida Independencia y Calle Libertad, las cuales costaron $160 cada una. “Esas lámparas todavía ahí están y no han necesitado mantenimiento porque tienen garantía de vida útil de, por lo menos, 10 años”, aseguró.
El problema de la alcaldesa, dice Corvera, es que no escucha a ningún concejal y no deja que se le hagan observaciones.