En cuatro meses y medio, el Seguro Social pagó $ 29,547.77 en incapacidades por parotiditis o paperas, ya que 492 personas estuvieron inhabilitadas laboralmente a causa de la enfermedad, la cual requiere reposo de 5 a 7 días, dependiendo de la gravedad del paciente, informó la autónoma.
De acuerdo con los recientes reportes epidemiológicos, los caso se han concentrado en la población de 20 a 39 años, pese a que la paperas se considera una enfermedad que ocurre en la etapa de la niñez.
A causa del comportamiento de la enfermedad, el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) aplicó 2,777 vacunas, a personas que tuvieron contacto con los pacientes y a personas de las dependencia médica de la institución.
Las paperas es una enfermedad altamente contagiosa y la forma de controlarla es la vacunación.
El infectólogo Jorge Panameño recomendó verificar a la población menor de cinco años, que no tiene la vacuna para poder inmunizarlos. En las clínicas del Ministerio de Salud y del ISSS la vacuna es gratis.
El médico también explicó que cuando las personas tienen entre 15 y 18 años de edad, la inmunidad que les brindó las vacunas que recibieron en la infancia comienza a disminuir.
A raíz de ello, las personas de 15 hasta los 60 años de edad deberían recibir un refuerzo de vacunación, aconsejó el infectólogo.
Añadió que el refuerzo de inmunización contra el sarampión, rubéola y paperas debe aplicarse en dos dosis, cada una separada por 28 días para que haya una protección duradera para esta población.
Pero en la población de 61 años a más debería tener una sola dosis de refuerzo.
El infectólogo advirtió que se debe inmunizar en estas edades para proteger a todos aquella población que no se puede vacunar contra estas enfermedades que son muy contagiosas y que causan gravedad en las embarazadas, mujeres que están dando de lactar, niños menores de un año de edad, personas con problemas de sus defensas, personas trasplantados, personas que tiene tratamiento de quimioterapia por enfermedades malignas, personas que toman inmunosupresores o esteroides, personas que padecen Lupus y enfermedades reumatológicas, debido a que el virus puede debilitar su sistema inmune.
Quienes tuvieron paperas quedan inmunes y no necesitan vacunarse.
“Es importante en hacer énfasis en quien ya padeció la enfermedad tiene inmunidad permanente. Obvio que es una enfermedad que ha estado ausente en nuestro medio por décadas, pero quien ya la padeció está protegido”, aseguró el infectólogo.
Recomendaciones para prevenir las paperas
La infección de parotiditis o paperas se transmite por la vía aérea. La persona infectada puede trasmitir la enfermedad desde un día antes de que presente síntomas, los cuales son muy parecidos a los de un resfriado común.
Las recomendaciones de prevención son: si va toser o estornudar, cubrirse la boca; lavarse manos; las personas con catarros evitar lugares donde haya aglomeraciones de personas.
Según Panameño, las paperas es una situación complicada, que se logró controlar con la vacunación.
El especialista explicó que la enfermedad suele durar de siete a diez días, “es una enfermedad que pocas veces se complica y es recomendable el reposo. Y sobre todo los hombres deben ser muy cuidadosos porque existe la posibilidad de las complicaciones de la enfermedad, que puede provocar inflamación en los testículos, causando infertilidad”.
El Ministerio de Salud registro 541 hombres y 347 mujeres con paperas, es decir que 888 casos a nivel nacional, en lo que va del año.
El Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), en su boletín epidemiológico reportó que desde febrero hasta el 15 de junio atendió 525 pacientes con paperas. El año anterior para la misma fecha solo contabilizó 17.
En la semana que corresponde del 9 al 15 de junio en los centros de atención del ISSS atendieron 21 casos, “observando una disminución de 20 casos con respecto a la semana anterior que reportó 41”, informó el ISSS.
La parotiditis, según la Organización Mundial de la Salud, es una enfermedad viral que se caracteriza por fiebre, hinchazón y dolor a la palpación de una o varias glándulas salivales, por lo regular la parótida, y a veces las glándulas debajo de la boca o las submaxilares.
Los signos ante los que se debe estar alerta son fiebre, malestar como síntomas catarrales, dolor en el cuerpo, pero particularmente abajo de la orejas e inflamación de una o ambas glándulas.
