Una vez se terminen las cuarentenas, el Estado de Emergencia y el gobierno de el banderillazo, sectores como el textil están preparados para volver a echar a andar la maquinaria en las maquilas y en toda la cadena de operaciones.
Patricia Figueroa, directora ejecutiva de Camtex (Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas de El Salvador), explica que tienen listo su protoloco sanitario para que los trabajadores puedan laborar sin ponerse en riesgo de contagio, el cual ya fue aprobado por el Ministerio de Trabajo.
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“Buscamos apoyar la disminución de contagios, resguardar la salud de los colaboradores y estar listos para la reapertura paulatina de las compañías”, indica Figueroa.
El protocolo del sector textil contempla más de 14 medidas, además de las acciones adicionales que cada compañía tomará al interior de las industrias, por lo que solo están a la espera de que el Ejecutivo les indique en qué fecha reabren.
El Ministro de Trabajo, Rolando Castro, dijo el pasado 1 de mayo que al terminar esta cuarentena se iría reabriendo la economía de forma gradual a partir del 17 de mayo.
Luego el presidente de ANEP, Javier Simán, afirmó que había un acuerdo con el gobierno de reabrir a partir del 19 de mayo. Sin embargo, el presidente Nayib Bukele declaró en cadena nacional el 5 de mayo que la reapertura dependerá de que baje la curva de contagios.
Hasta antes del nuevo decreto 22, en la industria textil estaban operando entre el 15% y 20% de las empresas, respetando las medidas implementadas por el gobierno y el protocolo ya aprobado, explica Figueroa.
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“Las empresas que han estado laborando son aquellas que se han reconvertido para fabricar insumos médicos, que están sirviendo para los médicos y enfermeras que enfrentan la pandemia en el país y Estados Unidos”, afirma la directiva.
Además explica que la cantidad de empleados en las fábricas es limitado, ya que deben cumplir con la medida de distanciamiento entre los trabajadores.
El riesgo de no reabrir pronto
Camtex, una gremial que representa a más de 110 maquilas y empresas socias, ha advertido que debido al cierre de muchas empresas dentro de la industria podrían perderse más de 25,000 puestos de trabajo en un plazo de tres meses.
Además, el sector ha perdido $300 millones en concepto de órdenes canceladas o no completadas en el rubro de exportaciones, en relación al promedio mensual 2019.
Figueroa ha remarcado que el país y el sector deben estar preparado para cuando pase la cuarentena, porque “una vez en el mundo se comiencen a levantar las restricciones económicas y las empresas vuelvan a operar, si El Salvador no está listo para responder a esta demanda, nuestros competidores regionales tendrán una mayor parte del mercado de Estados Unidos”.