Santa Ana no sólo celebrará el día principal de sus fiestas patronales el próximo 26 de julio, sino que también se convertirá en dicha ocasión en la Capital de la República de El Salvador.
La declaratoria, que comprende sólo ese día, fue aprobada por la Asamblea Legislativa en la sesión plenaria del jueves pasado, en ocasión de que la ciudad estará conmemorando 450 años de llevar dicho nombre en honor a su patrona, Señora Santa Ana.
La declaratoria incluye el desarrollo de una sesión solemne. Mientras que las autoridades eclesiásticas han programado la realización de varias actividades para el mismo día.
Entre ellas está las Mañanitas que será a las 5:00 de la mañana; a las 6:00 y 8:00 habrá Santa Misa; mientras que la misa patronal será a las 10:00 de la mañana y estará presidida por el obispo de la Diócesis de Santa Ana, monseñor Miguel Morán; y concelebrada por los obispos de la Conferencia Episcopal de El Salvador.
A las 3:30 será la solemne procesión con la imagen de la patrona que recorrerá las calles y avenidas de la ciudad.
“Será un privilegio que la ciudad se convierta en Capital por un día ya que tiene una riqueza cultural, histórica y es una de las principales ciudades del país”, expresó un santaneco, Carlos Vásquez, al ser consultado sobre la distinción.
De acuerdo con el dictamen legislativo, Santa Ana, que también le da el nombre al departamento, fue fundada como ciudad entre los siglos V o VI por los mayas para luego ser ocupada por los nahuas, quienes le dieron el nombre de Sihuatehuacán, que significa “lugar de sacerdotisas”.
Debido a su antigüedad posee una historia arqueológica con registros que datan desde el período preclásico.
La Asamblea Legislativa consignó que el nombre de Santa Ana tiene su origen porque el 26 de julio de 1569 llegó a Sihuatehuacán el obispo guatemalteco Bernardino Villalpando para fundar una diócesis y su respectiva parroquia.
“Con su llegada se construye una ermita o parroquia provisional dedicada a Señora Santa Ana en el mismo lugar donde años más tarde se construiría la actual Catedral, consagrando la población a dicha patrona. A partir de entonces el nombre del poblado sería Santa Ana”, indicó la Asamblea.
Santa Ana cuenta con una arquitectura antigua que la hace representativa a nivel nacional, entre ella el Teatro, Catedral y el Palacio Municipal.