Salvadoreños se benefician si participan en Censo 2020 en Estados Unidos

El conteo de la población ha comenzado, todos los habitantes de los estados continentales deberán completar el formulario electrónico a partir de marzo, la Oficina del Censo dispondrá de un ejército sobre el terreno para contar a los que no completen el cuestionario en línea, pero persiste preocupación por inmigrantes en situación irregular que eviten ser contados.

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Rocío Treminio, alcaldesa de Brentwood, pidió a los connacionles participar del censo 2020.

Por Tomás Guevara

2020-02-08 5:30:27

El obligatorio conteo de la población de Estados Unidos cada 10 años ha comenzado con el Censo 2020 que por primera vez se realizará en formato digital para todos los habitantes del territorio y de otras regiones que pertenecen a la Unión Americana en otras latitudes.

Uno de los retos para este conteo que desarrolla la Oficina del Censo, una instancia del Departamento de Comercio, es lograr que los inmigrantes participen y de ahí los llamados a grupos específicos como los centroamericanos que forman buena parte del pastel demográfico en el Área Metropolitana de Washington, para poner un ejemplo.

Algunos condados y ciudades de Maryland o Virginia, como Montgomery o Prince William, respectivamente, proyectan que en sus jurisdicciones puede haber más del 20 por ciento de inmigrantes, la gran mayoría salvadoreños, pero esos datos no podrán confirmarse hasta no tener el resultado del Censo de este año.

Con esos datos, las autoridades locales también han puesto todo a su disposición para lograr que la población hispana participe, uno de los obstáculos sigue siendo el temor a que la información que proporcione la familia sea compartida por las autoridades federales. La Oficina del Censo asegura que eso no pasará ya que la ley lo prohíbe.

La alcaldesa de la ciudad de Brentwood, la salvadoreña Rocío Treminio, comentó a El Diario de Hoy después de un evento para impulsar la participación, que hasta cierto punto es comprensivo el temor de las personas, al ver a escala nacional las políticas federales contra inmigrantes, pero asegura que en este caso su compromiso es asegurar a cada familia que lo mejor que puede hacer es participar y que hay numerosos recursos para completar el formulario.

Treminio también explica que si la población inmigrante no participa en el conteo, los datos finales reflejarán menos población de la real, y por ende los fondos federales para escuelas, carreteras y otros servicios serían menores. Al no participar se castiga a sí mismo, es el mensaje que quiere dejar claro.

“El mensaje es que es mucho más fácil responderlo y enviarlo de manera electrónica, a esperar que vengan a su puerta a tomarle la información en persona. De todas maneras estamos aquí, salimos a diario a trabajar, a comprar, así que participar en el Censo es una responsabilidad”, agrega la alcaldesa Treminio.

Otra salvadoreña en cargo de elección popular es Cecilia Benítez, quien es concejal en la ciudad Mt Rainier también en Maryland, un centro urbano vecino de Washington DC donde los connacionales e inmigrantes de otros países centroamericanos cubren buena parte del pastel demográfico, pero que el Censo del año 2010 no contó a cabalidad por lo que en los años recientes los fondos para atender las necesidades han sido limitados.

La concejal Benítez está entregada a la causa para que este año los hispanos de su jurisdicción y de otras localidades de Maryland respondan con información completa el Censo, ya que el principal escollo que quiso impulsar la administración de Donald Trump para aterrorizar a la población fue superada. El cuestionario no contempla la pregunte sobre el estatus legal de las personas. “La comunidad puede estar tranquila y responder sin vacilación”, reitera la compatriota.

Maryland, sin recursos

Las preocupaciones de las organizaciones y líderes de la comunidad están puestos en sitios de densa población centroamericana que el año 2010 evitó responder el cuestionario que llegó por correo postal con matasello de retorno a la Oficina del Censo. Los cálculos del condado de Prince George’s, al que pertenecen zonas como Langley Park, estiman que más del 50 por ciento no participó en el conteo de hace una década.

La delegada en la junta de gobierno de ese condado por el Distrito 2, Deni Taveras, calcula que Prince George’s dejó de percibir unos $363 millones de dólares en fondos federales, que bien pudieron haberse necesitado obras de infraestructura y servicios, de las que la comunidad inmigrante es demandante, como escuelas para los niños al representar uno de los grupos de mayor expansión demográfica en la región, para poner un ejemplo.

“Como estado de Maryland perdimos $1 mil millones de dólares como resultado del Censo pasado, pero de toda esa cifra la mayor concentración de esa pérdida estuvo en el Condado de Prince George’s, con más de $363 millones de dólares; donde estamos parados (Langley Park) más del 50 de la población latina no se dejó contar, eso definitivamente no debe volver a pasar”, explica la concejal Taveras.

En el condado de Montgomery, el registro escolar del año académico 2019 -2020, destacó que la población escolar de origen hispano encabeza el primer grupo étnico con el 32.4 por ciento de la población escolar, seguido de los estudiantes blancos con el 26.9 por ciento y los afroamericanos representan el 21.4 por ciento.

Esas cifras dicen mucho para la concejal de Montgomery, Nancy Navarro, quien asegura que en números reales, esos 53 mil 586 estudiantes latinos, la gran mayoría salvadoreños y de otros países centroamericanos, en las escuelas públicas del condado vecino inmediato de Washington DC, indican la proyección de los números que podrá reflejar el Censo 2020 si los latinos participan.

“Sabemos que este Censo 2020 es fundamental y es una oportunidad única de poder decir presente, nuestra comunidad latina por lo general no se cuenta de una forma adecuada y eso tiene muchas consecuencias como no atraer los fondos necesarios para poder financiar todas aquellas cosas importantes como las escuelas, carreteras y acceso a servicios de salud; todas esas cosas importantes que aseguran la calidad de vida de nuestras comunidades”, puntualizo Navarro.