Salvadoreño desafía las profundidades y logra primer récord en buceo libre al descender 25 metros en el Atlántico
La apnea submarina es una actividad extrema que implica descender a aguas profundas sin respirar. El buzo Marco Guirola se convirtió en el primer salvadoreño en competir a nivel mundial.
Esta actividad extrema se ha popularizado alrededor del mundo y ha llegado, incluso, a tener sus propias competencias mundiales. Una de ellas se desarrolló hace un mes en Roatán, Honduras, donde el salvadoreño Marco Guirola selló el primer récord de El Salvador.
Guirola descendió 25 metros en las aguas cristalinas del océano Atlántico, en la modalidad peso constante con dos aletas e inmersión libre y con solo una bocanada de aire que duró 1:47 minutos. Tiempo que quedó registrado para siempre en las estadísticas de la Conferencia Mundial de Actividades Submarinas (CMAS).
En el silencio de la profundidad del mar, con el único ruido de sus pensamientos y el latido de su corazón, Guirola tenía claro que, aunque no ganara la competencia, su inmersión ya era una victoria personal, pues de ser un “hobbie” recién adoptado pasó a concursar.
La historia de este hombre de espíritu libre y su pasión por el “freediving” inició en 2018, cuando en Florida recibió un curso de descenso sin respiración en una piscina.
“Me interesé porque toda la vida me ha gustado salir de mi zona de confort. Como gran lección de viejo, cuando uno sale de su zona de confort fácilmente te encontrás con joyas y cosas inesperadas”, expresó Guirola, meditando en su vida llena de adrenalina.
Aunque este buzo salvadoreño se adaptó rápido a la disciplina, su aprendizaje no es nada sencillo. Solo el hecho de dejar de respirar bajo el agua ya es algo que pone en aprietos a cualquiera, según Guirola. Y él lo ha logrado un tiempo máximo de 4:30 minutos.