La Sala de lo Constitucional emitió ayer sentencia en firme en contra del ex magistrado del Tribunal Supremo Electoral, Ulises Rivas, por considerar que la elección del exfuncionario fue en “contravención al principio de independencia judicial” y a “la obligación de los funcionarios de servir al Estado y no a una fracción política determinada” de acuerdo a la Constitución.
Según el fallo judicial todo lo anterior se resolvió “debido a que la Asamblea Legislativa omitió documentar y justificar la ausencia de vínculos político – partidarios del referido profesional con el partido político FMLN”.
“Me siento honrado y orgulloso de ser de pensamiento de izquierda y aunque emitieran una resolución ordenando que me fusilen nunca dejaría de ser un hombre progresista. Nunca renunciaré a mis derechos civiles y políticos ni a mis amistades solo porque tres magistrados propietarios y un suplente continúen aplicando un criterio violatorio de derechos fundamentales, el cual en otros países de mejor evolución jurídica ya fue tratado, nunca fue aceptado y ya está superado. La independencia e imparcialidad de los funcionarios que ejercen jurisdicción no se debe juzgar por su ‘simpatía’ política. Es por su trabajo y forma de resolver los conflictos sometidos a su competencia jurisdiccional”, argumentó Rivas a El Diario de Hoy.
Cuando la anterior Sala de lo Constitucional ordenó a Rivas separarse del cargo de magistrado del TSE, este acusó a los cuatro exmagistrados de la Sala que emitieron la resolución: Belarmino Jaime, Florentín Meléndez, Rodolfo González y Sidney Blanco de seguir lineamientos para “fraguar un fraude electoral” en las elecciones para alcaldes y diputados de 2018.
La demanda interpuesta contra Rivas que generó la resolución en su contra y posteriormente la sentencia definitiva de la Sala, fue por su participación y apoyo a la entonces fórmula presidencial del FMLN de Salvador Sánchez Cerén y Óscar Ortiz, quienes ganaron en 2014.
Pese a eso, Rivas no ocultó su simpatía con los entonces candidatos y manifestó en reiteradas ocasiones que es un derecho que le asiste; sin embargo, Rivas no fue electo a propuesta de los partidos como es el procedimiento actual, sino que salió de las ternas que la Corte Suprema de Justicia envió a la Asamblea Legislativa.
La sentencia final de la Sala dice que si bien son ellos los primeros que deben verificar la “vinculación no partidaria, es la Asamblea quien debe controlar de forma definitiva la terna de nominados” para magistrados del TSE por la CSJ.