René Gómez, capitán del Sonsonate, dice que los problemas económicos los dejan de lado cuando entran a la cancha, aunque es la base para sostener a sus familias. Hace una semana los golearon en casa y ayer los venció Águila en el Barraza, por eso perdieron la segunda posición que ahora ocupa el FAS.
La deuda que tiene la directiva con el plantel no es una excusa para este Sonsonate que ha sido sorpresa en el torneo Apertura: “La verdad que no, eso es muy aparte, cuando estamos en la cancha se nos olvida todo eso, claro que es muy importante porque tenemos que sustentar a nuestros hijos, pero eso no viene al caso, tenemos culpa nosotros los jugadores porque hemos caído en un bache y primero Dios nos levantemos sacando un buen resultado en Chalatenango”.
Los cocoteros nunca pudieron aprovechar que tuvieron más de una hora un jugador más en la cancha tras la expulsión de Mártir Contreras. Los emplumados supieron vivir así y dieron cuenta de un cuadro cocotero que hace una semana se fue en medio de insultos de su afición, por la paliza que les impuso el 11 Deportivo.
“Íbamos arriba en el marcador y ya para el primer tiempo ellos hicieron una buena jugada, nos dormimos, pero es responsabilidad de todos”, dijo el capitán de los occidentales sobre el gol de Andrés Quejada. “Si hubiéramos terminado 1-0 (el primer tiempo) quizás a ellos les hubiera costado levantarse en el segundo tiempo, pero lograron darle vuelta”.
“Quedan dos finales en las que tenemos que sacar puntos sí o sí para poder estar ahí metidos”, agregó Gómez, quien considera que este es un bache del cual espera salir a tiempo porque ayer dejaron ir la oportunidad de amarrar la clasificación a la postemoorada que iniciará en 12 días.
Sonsonate visita al Chalate entre semana y cierra la fase regular contra los fantasmas del Independiente en el estadio Ana Mercedes Campos. Los norteños son rivales directos en la pelea por la clasificación.