El dinero que recibió El Salvador en concepto de remesas familiares alcanzó los $5,099 millones hasta el onceavo mes del año, indicó el Banco Central de Reserva (BCR) en un comunicado oficial.
De acuerdo con los datos, comparado con el mismo periodo de 2018, el flujo de remesas tuvo un incremento de 4.8 % equivalente a $234.3 millones.
Del total, los dólares provenientes de Estados Unidos representaron el 95 % del total de las remesas hasta noviembre. Sumaron $4,482.2 millones y significaron un crecimiento de 5.2 % respecto al año anterior.
Mientras Canadá, con $46.2 millones (5.3 % más) fue el segundo país con el mayor monto de envío de remesas familiares; aquellas provenientes de México y España, con un 27 % en ambos casos, fueron en las que se observaron mayores tasas de crecimiento.
El BCR detalló que solo en noviembre, los hermanos lejanos enviaron $457.6 millones en remesas familiares y el sistema financiero registró 1.7 millones de operaciones bajo este concepto.
La mayoría de las remesas (el 57.8 %, unos $2,945 millones) fueron liquidadas en empresas no bancarias como federaciones, instituciones de ahorro y crédito; mientras que otra buena parte, que representó el 40.1 % equivalente a $2,043 millones, fueron pagadas a través de bancos.
Asimismo, el 72.7 % de las remesas fue cobrado a través de ventanilla; el 25.1 % abonado a una cuenta bancaria; un 1.7 % se recibió en efectivo y un 0.4 % a través de recargas a móviles desde el exterior (considerándose como remesas en especie).
¿Hacia dónde y cuánto envían? El comunicado del Banco Central destaca que las remesas enviadas a través de empresas de transferencias de remesas o bancos promediaron unos $264.2 por operación al mes de noviembre. Una cifra similar a la del año anterior.
Chalatenango, con $353.3, fue el departamento con la remesa media por operación más alta. El BCR considera que esto se debe a que existen pocos establecimientos para el cobro.
Por su parte, San Salvador fue la zona en la que la remesa media fue más baja, con solo $232.9 por operación y “probablemente por la abundancia de pagadores que provoca que los envíos se vuelvan más pequeños y más frecuentes”, señaló la institución en su boletín.
Por otro lado, con un 36.6 %, la zona central del país recibió la mayor proporción del total de remesas.
Esta porción fue equivalente a $1,864.5 millones. La zona oriental fue la segunda con el mayor número de remesas recibidas, con el 32.1 % de ellas, equivalentes a $1,636.9 millones.
Las zonas occidental y paracental, en tanto, respectivamente, recibieron el 16.8 % y 12.1 % de las remesas totales.
En su reporte oficial, el BCR también considera las clasificaciones de las remesas familiares. Ahí detalla, por ejemplo, que las remesas corrientes son aquellas que periódicamente envían los hermanos lejanos para el sostenimiento de sus familiares, ocasiones especiales como celebraciones, gastos médicos o ahorro para quienes reciben. Así, las remesas familiares corrientes sumaron $5,079 millones.
Pero también existen las remesas familiares de capital, aquellas que requieren el traspaso de un activo e incluyen las mejoras o compras de inmuebles. Bajo esta segmentación se recibieron $20.3 millones entre enero y noviembre.