Luego de las declaraciones que diera el diputado Guillermo Gallegos sobre que es momento de reformar la Constitución de la República y permitir una reelección presidencial, abogados constitucionalistas opinan que en el contexto en el que está el país, donde el Ejecutivo tiene tomados los tres poderes podría suceder, pero haciendo uso de ilegalidades.
“Establecer una reelección presidencial significa el rompimiento total de la Constitución y sobre todo del sistema político en El Salvador, y no es comparable en ninguna forma el sistema político salvadoreño con una altísima tradición de dictadores y líderes autoritarios, querernos comparar con democracias consolidadas como la de Estados Unidos”, dice Enrique Anaya, abogado constitucionalista.
Añade que la prohibición de la reelección presidencial es una cláusula pétrea de la Constitución, y modificarla significaría establecer un nuevo régimen político, ya que no hay ninguna forma legal, “legítimamente jurídica para reformar esa cláusula”, imposible a través de una Constituyente también, porque la Constitución salvadoreña no contempla la convocatoria a una Asamblea Constituyente. Expone que tampoco puede hacerse a través de un referéndum.
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“Legítimamente, jurídicamente es una aberración querer convocar una Constituyente, querer hacer un referéndum, o inclusive llegó a decir el diputado (Gallegos) que podían hacerlo a través de una sentencia de la Sala, como se hizo en Honduras”, expresa Anaya.
El abogado Francisco Bertrand Galindo, explica que con un gobierno que controla los tres Órganos del Estado fundamentales todo es posible, “no es que sea lo correcto, porque técnicamente no es correcto hacer una interpretación de la Constitución donde hay cuatro artículos que claramente se refieren a la no continuidad del presidente en su cargo”, indica.
Expone que según la lógica del poder, “si tengo todo el poder, lo pueden hacer”, ya que así sucedió en Honduras y en Nicaragua.
El constitucionalista opina que podrían hacerlo a través de una Constituyente, por medio de una nueva Constitución donde se permita la reelección, pero la Constituyente no está permitida por la Constitución actual, y de realizarlo sería inconstitucional.
“La clave acá es la no independencia del Órgano Judicial, porque teniendo el control de los tres Órganos del Estado cualquiera de las cosas que dice el señor Gallegos la pueden hacer, va a estar mala, va a ser inconstitucional, pero si se tiene todo el poder y no hay forma de discutir legalmente las decisiones pues lo hacen”, dice Galindo.
La abogada Marcela Galeas señala que antes de querer reformar la Constitución hay que cumplirla, lo cual no se ve reflejado en la realidad del país, ni por parte de los diputados de la Asamblea Legislativa, ni por los funcionarios de primer y segundo grado.
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“La Constitución de 1983 es bastante completa en cuanto a las garantías constitucionales para cada uno de los ciudadanos, así como en el sistema republicano que se colige dentro de ella, entonces no veo porqué habría de reformarse, y si se reforma estarían poniendo en peligro la República y el sistema democrático que tenemos, o que teníamos en el país, porque hemos visto que existe un estado de derecho débil y una democracia herida lastimosamente”, dice la abogada.
Añade que jurídicamente es inviable una Constituyente debido a que no cuentan con las facultades para convocarla, ni para realizar un referéndum, según la Constitución, en la forma en la que está redactada, “no tiene cabida recordemos que existe una sentencia de la Sala de los Constitucional que dice que no puede haber una reelección inmediata, y de realizarse una Constituyente con la finalidad de reelegir el presidente actual, sería una clara violación a la misma Constitución y a la jurisprudencia”, señala Galeas.
El abogado René Hernández Valiente opina que el querer usar la Constituyente, el referéndum y a la Sala para permitir la reelección es a su juicio son tres conceptos equivocados, muy interesados, parcializados porque una Constituyente no se puede convocar porque la Constitución de El Salvador es rígida, donde se pueden hacer reformas, menos en las cláusulas pétreas.
“Un referéndum, no está contemplado en nuestra Constitución, entonces es mentira, entonces está falseando Gallegos, y en cuanto a la sentencia de la Sala, como ya tienen una Sala, ya es de ellos, creen que ellos que podría interpretar que se admite una reelección, al igual que hicieron en Nicaragua y en Venezuela, tampoco una sentencia de la Sala podría cambiar la alternabilidad, que es pétrea. Gallegos no es que esté perdido, está fantaseando, falseando y engañando”, dice Hernández Valiente.