Cientos de personas se congregaron en el Aeropuerto Internacional San Óscar Arnulfo Romero Galdámez para recibir al primer medallista Azul y Blanco de los pasados Juegos Panamericanos de Lima, Perú. Al son de la batucada, los gritos y los silbidos, Hernández hizo una salida de la última sección del edificio con una sonrisa de oreja a oreja.
Parte de su familia y amigos sostuvieron una pancarta donde se mostraba Roberto mordisqueando la presea dorada ganada en la tierra del ceviche y de Teófilo Cubillas. Abundaron los abrazos y los besos para Roberto, quien hasta le faltó un poco la respiración a la hora de declarar, consecuencia clara de una emoción ciertamente incontenible.
El medallista de oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 aterrizó al filo de la media noche a nuestro país con la gran satisfacción por su histórica medalla.
Fue recibido por un grupo de personas que lo esperaron para darle el mejor de los recibimientos. Ganó la medalla de oro para El Salvador en el tiro con arco compuesto en aquel inolvidable sábado 10 de agosto, después de su metal dorado llegaron los de los fisicoculturistas Paulina Zamora y Yuri Rodríguez.
¡Toda tuya papá! Gracias infinitas @BobHrdz ?? ?? pic.twitter.com/VG3lpRysL2
— ? ? ? ? ? ? (@RobbieRuud) September 3, 2019
Graduado de leyes, oro panamericano, entrenador, gerente técnico de la federación luego de pasar 3 años ad honorem dando clases a los futuros campeones, Roberto incluso hace tiempo para ver al FAS en la capital o en Santa Ana, llegó a nuestro país colgando a mucha honra su metal dorado y ubicado entre los mejores 10 del mundo en el tiro con arco. Impresionante.
“Recibí como 5 mil mensajes en Twitter que me ayudaron a sacar el extra (para ganar la medalla de oro) y también mucho trabajo mental para que la gente pudiera tener este triunfo”, explicó el campeón a su arribo a El Salvador.
¡Llegó Roberto Hernández! ??? pic.twitter.com/uCrId6MyVD
— EDH Deportes (@EDH_Deportes) September 3, 2019
Roberto habló de su increíble recibimiento en la noche del lunes. “Pensé que solo vendría mi mamá por la hora, yo sé que es tarde (11:30 p.m). Era el boleto más barato porque yo me lo pagué, tenía que ahorrar todo lo que fuera posible. Agradezco a la gente que estuvo pendiente de recibirme, no tengo palabras”, indicó.
Y también dio las dedicatorias por su oro: “Esta medalla primero se la dedico a Dios, porque gracias a Él salió todo como yo quería. Se lo dedico también al pueblo salvadoreño, yo pensaba que la gente quería la medalla de oro. Yo estaba satisfecho con lograr la medalla de plata, pero cuando vi que la gente decía ‘La de oro, la de oro, la de oro’ me comprometí mentalmente”, indicó el tirador.