Los cercos sanitarios que han impuesto algunas alcaldías para contener la propagación del COVID-19 están dificultando la tarea de los distribuidores que llevan productos de primera necesidad a todos los rincones del país.
La Asociación de Distribuidores de El Salvador (ADES), expresó su preocupación por los inconvenientes que esto ha generado a lo largo de la pasada semana en muchos municipios del país.
Desde la llegada de la pandemia a nuestro país, la gremial de distribuidores pidió trabajar en forma coordinada con las instituciones del Gobierno Central y municipales para mantener abastecido el mercado local, ya que eso transmite tranquilidad a las familias y evita acaparamientos e incertidumbre.
La gremial aclaró que respalda todas aquellas acciones que permitan contener el virus y evitar fallecimientos por la COVID-19. Sin embargo, desde que se establecieron los cercos sanitarios se tienen reglas diferentes en los 262 municipios del país, afirmó , presidente saliente de ADES, José Mayorga-Rivas.
Son más de 3,000 camiones los que a diario transportan productos como: granos básicos (arroz, maíz, frijoles, azúcar), jugos, agua, galletas, snacks, y medicinas, hacia los diferentes canales de venta en todo el país.
Los distribuidores, añadió, son los que trabajan para garantizar el abastecimiento de todos los puntos de venta, no solo de las cadenas de supermercados y tiendas de conveniencia, sino también de más de 80,000 pequeñas tiendas que existen en todo el país.
“Esas pequeñas tiendas son las que facilita que los salvadoreños no salgan lejos de casa y se expongan al virus”, dijo Mayorga-Rivas.
Es por ello, añadió, que se debe garantizarse el ingreso de los distribuidores a los diferentes municipios, sin restricciones arbitrarias, y asegurar el abastecimiento de productos, pues eso permite que las familias encuentren los productos en una sola salida.
“Sabemos que la población necesita abastecerse y que nuestros productos son esenciales para su tranquilidad. En ese sentido respaldamos las gestiones de la Fiscalía General de la República orientadas a mantener el respeto de la ley y a evitar la adopción de decisiones que restrinjan y compliquen la cadena de abastecimiento”, reiteró.
Cabe destacar que el atraso que enfrentan los transportista en cada cerco sanitario, impide que la ruta se complete como lo habían prevista, y además, que ellos regresen temprano a casa.
“Ellos salen temprano a hacer la distribución, pero llegan a un cerco sanitario y deben de esperan por varias horas que los policías resuelvan si los dejan pasar o no”, dijo.
La gremial recomienda que se establezca un protocolo general, que pueda ser coordinado por la Corporación de Municipalidades de la República de El Salvador (Comures).
El Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, José Apolonio Tobar, aseguró que desde que inició la cuarentena se ha solicitado que se garantice la cadena de suministros, es decir, que los vehículos que distribuyen productos alimenticios puedan circular sin restricciones.
El funcionario dijo que en nuestro país muchas familias compran a diario sus alimentos, es decir, hay un buen porcentaje que no tiene la capacidad económica para adquirir los productos para una semana, dos semanas o un mes.
“Esa es la razón que en la atención al derecho humano a la alimentación es necesario que todas las medidas que vayan encaminadas a atender la emergencia nacional debe garantizar la cadena de suministros”, comentó.
Sostiene que si se continúa con ese tipo de restricciones, la población podría comenzar a tener hambre y en un efecto mayor a la pandemia.
Para que se garantice el derecho a la alimentación se necesita el libre tránsito de las empresas que se dedican a la distribución de productos alimenticios.