Frente a las enfermedades, el ser humano cuenta con una defensa natural del cuerpo: el sistema inmune. Este, según describe la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, es una red compleja de células, tejidos y órganos que funcionan en equipo para hacerle frente a los gérmenes. Su labor es ayudarle al cuerpo a reconocer esos “invasores” y a mantenerlos fuera del organismo y, si no puede, encontrarlos y deshacerse de ellos.
Sin embargo si dicho sistema no funciona bien, puede ocurrir que un germen invada tu cuerpo con éxito y te enferme.
Entonces surgen las interrogantes ¿cómo puedo mejorar mi sistema inmunológico? ¿Es posible intervenir en este proceso? ¿Qué pasa si mejoro mi dieta? ¿Ayuda tomar ciertas vitaminas o preparaciones herbales? ¿Es posible hacer cambios en el estilo de vida con la esperanza de producir una respuesta inmune casi perfecta?
De acuerdo con la Universidad de Harvard la idea de aumentar la inmunidad es atractiva, pero a lo largo del tiempo la capacidad de hacerlo ha resultado difícil por varias razones.
La primera es que el sistema inmune es precisamente eso: un sistema, no una sola entidad. Por lo tanto, requiere equilibrio y armonía para un óptimo funcionamiento.
Por otro lado, los expertos de Harvard destacan que los científicos aún tienen mucho por investigar sobre las complejidades y la interconexión de la respuesta inmune. Mientras tanto, sugieren que llevar un estilo de vida saludable es una buena manera de comenzar a robustecer las defensas del cuerpo.
Desde luego, son enfáticos al afirmar que tus hábitos, buenos o malos, pueden afectar la manera en que tu sistema te protege contra gérmenes, virus y enfermedades crónicas.
Así que para reducir los riesgos y fortalecer las defensas de tu organismo, te damos algunas recomendaciones:
1. Duerme más
¿Has notado que eres más propenso a enfermarte cuando no descansas lo suficiente?
De acuerdo con la Clínica Mayo, la falta de sueño puede afectar su sistema inmunológico. De hecho, en su portal explican que de acuerdo con algunos estudios, las personas que no duermen bien o no duermen lo suficiente tienen más probabilidades de enfermarse después de exponerse a un virus, como el del resfriado común.
Por otro lado, agregan que descansar poco también puede afectar la rapidez con la que alguien se recupera en caso de enfermarse.
Aunque los investigadores no están exactamente seguros de cómo el sueño estimula el sistema inmunológico, está claro que un sueño de calidad, que puede ser de 7 a 9 horas para un adulto, es clave para gozar de una buena salud.
2. Haz ejercicio
De acuerdo con el portal healthcareinamerica.us, está demostrado que hacer ejercicio de manera regular estimula el sistema inmunológico. Según explican, esto ocurre porque la actividad física moviliza las células T, que son un tipo de glóbulo blanco que protege al cuerpo contra las infecciones.
Sin embargo, todo debe ser equilibrado, ya que un entrenamiento riguroso continuo lejos de hacer bien debilita el sistema inmunitario, dejándolo propenso a la gripe y las infecciones virales.
Lo mejor es hacer ejercicio regular y moderado, como una caminata diaria de 30 minutos. También ten en cuenta que esta actividad puede ayudarte a dormir mejor, lo cual también te beneficia.
3. Mejora tu dieta
Comer o beber demasiada azúcar afecta a las células que te defienden de las bacterias, asegura el portal medlineplus.gov. Y agrega que este efecto dura algunas horas después de tomar un par de bebidas endulzadas.
Lo mejor es comer más frutas y verduras , que son ricas en nutrientes como las vitaminas y antioxidantes, como betacaroteno y zinc. De preferencia, elige las de colores brillantes, como bayas, cítricos, kiwi, manzanas, uvas rojas, col rizada, cebolla, espinacas y zanahorias.
El ajo fresco también tiene la propiedad de combatir virus y bacterias, por lo que deberías incluirlo en tus comidas.
4. Reduce el estrés
El estrés es parte de la vida. Pero si este se prolonga por mucho tiempo, te hace más vulnerable a las enfermedades, que pueden ir desde gripes hasta dolencias graves.
Según medlineplus.gov, cuando este es crónico expone a tu cuerpo a un flujo constante de cortisol (la hormona del estrés), la cual tiene la capacidad de afectar las defensas del organismo y hacerte vulnerable a muchos males.
La sugerencia es mantener el estrés bajo control, para lo cual puedes recurrir a la practica de yoga, meditación o respiración profunda. De hecho, según algunos estudios, quienes meditan regularmente pueden tener respuestas más saludables del sistema inmunitario.
5. Mejora tu vida social
No te aisles. De acuerdo con el portal de salud webmd.com, tener buenas relaciones interpersonales es de gran beneficio para las personas.
Algunos estudios muestran que quienes se sienten conectados con amigos, ya sea unos pocos cercanos o un grupo grande, tienen una inmunidad más fuerte que las que se sienten solas.
Además, reunirse para compartir gratos momentos y reír también ayuda, ya que se reducen los niveles de cortisol y aumentan los glóbulos blancos que combaten las infecciones.
De hecho, solo anticipar un evento divertido puede tener un efecto positivo en tu sistema inmunológico. En un estudio, a los participantes se les dijo con 3 días de anticipación que iban a ver un video gracioso, con lo cual sus niveles de hormonas del estrés disminuyeron.
6. Deja el tabaco y el alcohol
Además de aumentar el riesgo de cáncer, el hábito de fumar también afecta las defensas de tu cuerpo.
De acuerdo con una publicación de EFEsalud.com, el cigarro contiene cerca de 200 sustancias químicas altamente tóxicas, las cuales al ser inhaladas debilitan el sistema inmunológico. Esto afecta incluso a fumadores pasivos y puede llegar a inflamar e irritar todas las partes del sistema respiratorio, desde el interior de la nariz hasta los pulmones. El cigarrillo, además, causa daños crónicos a los pulmones, haciendo que pierdan la flexibilidad y se vuelvan menos capaces de recibir oxígeno, lo que da lugar a otros problemas de tipo circulatorio y cardiaco.
En cuanto al alcohol, un estudio desarrollado por la Universidad Loyola de Chicago concluyó que se necesitan 20 minutos de ingesta para que comiencen los efectos que debilitan las defensas de tu cuerpo.
7. Toma un poco de sol
Salir a la luz natural ayuda a la producción de vitamina D que es esencial para el funcionamiento saludable del sistema inmune.
Una caminata rápida a la luz del sol durante 10-15 minutos asegurará que se produzca suficiente vitamina D y que tu organismo produzca suficientes anticuerpos para mantenerte sano.