SAN MIGUEL. Las visitas de empleados realizando mediciones en la carretera Panamericana y el anuncio del Gobierno que antes del 8 de septiembre podría iniciar la construcción del baipás de San Miguel, está ocasionando que muchos lugareños “coman ansias” ante esa obra.
El Gobierno se ha puesto como meta que antes de cumplir sus primero 100 días de trabajo haya iniciado la construcción de baipás de San Miguel; una obra con una inversión de $122,579,075 provenientes de un préstamo del gobierno de Japón.
Por ello el proceso de licitación se efectúa a través de los procedimientos de conformidad con las Normas para Adquisiciones Financiadas por Préstamos AOD del Japón aplicables, según el Convenio de Préstamo; de acuerdo a información en la página web del Ministerio de Obras Públicas (MOP).
Recientemente el gobierno lanzó por segunda vez la licitación del Paquete 1 y nombró al proyecto Periférico Gerardo Barrios.
En noviembre del año pasado, el MOP lanzó la licitación LPINT No. 02/2018 para la construcción del Paquete I. El 11 de febrero de este año presentaron ofertas cinco empresas preclasificadas, pero el proceso se declaró desierto el 9 de mayo pasado.
Hace tres años, José Santos Urrutia vio que construían una bodega cerca de su casa, ubicada en cantón Valle Alegre, de Moncagua; lo cual le motivó a abrir un comedor, al cual puso uno de sus apellidos. Le ha ido bien y ahora hay cinco personas trabajando con él.
Hace algunas semanas, tras la visita de un ingeniero, el futuro de su negocio le pareció confuso, pues el profesional le advirtió que tendrían que vender parte de su terreno ya que necesitaban el área para poder ampliar a cuatro carriles la carretera Panamericana, como parte del proyecto del baipás.
“Al medir los 15 metros del centro de la carretera hacia acá se nos va donde está el molino y el comedor (…) Este es mi recurso y de otras personas que trabajan aquí, si construyen no me podría quedar acá, pero estamos conformes esperando lo que pase”, dijo Santos Urrutia.
A mediados de junio, los vecinos de Santos Urrutia recibieron cheques por el pago de derecho de vía.
“Creo que esta entre 58 a 59 dólares el metro cuadrado. El pago es justo, la gente esperaba mucho menos, ya la semana pasada pagaron y tienen tres meses para reubicarse (…) Hoy si creo que lo van a iniciar (…) ya tienen como 3 años de estar vuelta y vuelta”, comentó el migueleño.
En la zona de la carretera Panamericana, en el sector del desvió a Moncagua, donde iniciará la construcción hay varios negocios, que aprovechan el tráfico que pasa ahí para ofrecer sus productos o servicios.
Reina Hernández es propietaria de comedor desde hace más de 40 años, pero ahora deberá ceder la mitad del inmueble para que pase la carretera. “Se me va la mitad de la casa, pero podemos continuar con el negocio porque tengo espacio hacia adentro, yo acá me he criado vendiendo, me dan ganas de llorar, pero esperamos que sea un bien, para mejorar”, expresa con tono de optimismo.
En el tramo que corresponde al cantón San José de Quelepa, sobre el hombro de la calle se observan diferentes tipos de muebles de madera, desde una simple silla hasta una cama o un ropero. Luego hay ventas de dulces típicos y algunos bocadillos.
La familia de Nohemy Castillo llegó a vivir al lugar hace 12 años y en los últimos 8 años decidieron incursionar en la venta de muebles de madera, además ofrecen a los automovilistas agua helada y sodas; para protegerse del sol decidieron construir una “champa” a la orilla de la carretera.
A inicios del año pasado, el dueño del terreno donde vive Nohemy recibió a empleados de una compañía contratada por el MOP quienes le aconsejaron abstenerse de hacer arreglos a las propiedades, ya que esas modificaciones no entrarían en el valuó. “Teníamos una champa en la calle pero la lluvia la derribó. No se construyó más porque habían dicho que no querían nada, pero me dan ganas de hacer una media agua porque no se aguanta el sol”, dice Nohemy.
La principal inquietud de la familia Castillo es conocer la fecha exacta en que se iniciará la ampliación de la carretera Panamericana.
“Nos gustaría saber cuándo van a iniciar porque acá vivimos y acá tenemos el negocio” dijo Nohemy.
El proyecto abarca 22.27 kilómetros de longitud e inicia en la Carretera Panamericana, en el desvío a Moncagua y finaliza en el sector conocido como El Papalón, en San Miguel.
