“Las lluvias las pasamos en un pedacito de acera que la cubre el techo de una casa. Si es necesario utilizar un baño, pedimos el favor en alguna casa o le decimos a los soldados que están en otro puesto allá por el penal. Ya la limpieza corporal se realiza en la delegación, una vez viene el relevo”, narra un agente de la PNC, quien forma parte del equipo de policías y soldados que permanece en la entrada de la colonia Vista Hermosa, en San Francisco Gotera.
Este agente y sus compañeros, así como quienes estuvieron antes en la entrada de la ciudad, llevan en estas condiciones cinco años
Deben custodiar el acceso a la colonia Vista Hermosa para tener un mejor control de quienes entran, ya que esta se sitúa en los alrededores del centro penitenciario.
Durante todo ese tiempo, la corporación policial no les ha brindado un espacio para atender sus necesidades fisiológicas básicas o para resguardarse de la lluvia o el sol.
Han sido cinco años así, hasta que la misma población goterense se organizó para construirles, al menos, una caseta de cuatro por cuatro metros, con materiales donados por los pobladores.
El cuarto no tiene servicios de energía eléctrica o agua potable. Fue necesario sacar el servicio sanitario del proyecto por falta de presupuesto.
Aún están por conseguir las ventanas y puertas de lámina para mayor seguridad de los agentes, así como un escritorio, un ventilador y tres sillas, para equipar.
En las últimas tres semanas, cinco hombres que laboran como ordenanzas en la delegación policial de Morazán están trabajando como albañiles y soldadores en la construcción de la caseta, que ha sido hecha con un 80% de materiales reciclados o donados. Cuando esté lista, ahí se resguardarán dos elementos policiales y dos de tropa.
“El pastor Misael Saenz, de la Iglesia Asambleas de Dios, nos ha donado material como bloques, arena y lámina, materiales que ellos tenían en la iglesia de otros proyectos. La comunidad ha contribuido, nos han dado una bolsa de cemento, una comercial dio los tubos, y nosotros hemos aportado para nuestro compañeros”, comentó Vargas, el inspector jefe, encargado de la subdivisión de áreas especializadas.
El terreno a donde se construye la caseta es municipal, y la Policía cuenta con el permiso de la alcaldía para la construcción.
“Ya teníamos el visto bueno del alcalde y del consejo que habían aprobado la construcción, pero a raíz de que se vino la pandemia, todos los esfuerzos se dirigieron a atender la emergencia. Después el proyecto se nos quedó porque la mano de obra sería con personal de Yo Cambio (reos en penales), pero no fue posible porque ellos pasaron a emergencia en centro penales”, comentó el jefe policial.
Según Vargas, la caseta no se construyó con el apoyo de la Dirección de la PNC “porque queríamos que esto quedara como parte de la municipalidad, si en un futuro, si es que ya no estamos acá, que la instalación la siguiera utilizando la municipalidad. Por eso no se presentó allá (a las oficinas de la Policía), no obstante, la jefatura en lo que ha podido nos han apoyado”, puntualizó.
Por su parte, el alcalde de San Francisco Gotera, Nain Ferrufino, confirmó que la comuna dio el permiso para la construcción pero hasta la fecha, dice, no ha recibido una carta por parte de la Policía que le notifique el inicio de la construcción y qué podrían aportar como municipalidad.