El 26 de diciembre de 2019, en el caserío Planes del Ranchador, del cantón Llano Largo, municipio y departamento de Santa Ana, Erick González murió por disparos hechos por policías, quienes dijeron que fue un enfrentamiento.
Personal de la División de Laboratorio Científico (DPTC) fue a la escena. Cuando ya habían buscado evidencias según el protocolo, un subcomisionado apareció en la escena y dijo que había una pistola en un lugar donde la DPTC, incluyendo los fiscales asignados, ya habían buscado, encontrando solo un teléfono celular y unos audífonos.
Resultaba imposible no haber visto el arma de fuego. El mismo fiscal había buscado en el lugar.
Vecinos con quienes El Diario de Hoy conversó afirmaron también que Erick no andaba armado y que vieron cuando un policía colocaba un arma de fuego. En la escena solo había cinco casquillos del calibre 5.56 mm.
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Ante la negativa de miembros de la DPTC de levantar el arma como evidencia, se la pusieron a un menor de edad que fue capturado en ese mismo hecho, consignan documentos a los que El Diario de Hoy tuvo acceso. El menor recuperó su libertad a los pocos días, según vecinos de la colonia Jordán.
Además de los documentos, versiones de vecinos dicen que no hubo enfrentamiento, sino una persecución al final de la cual mataron a Erick.