“Estamos dispuestos a ceder (en el voto electrónico) siempre que se incluya el voto para alcaldes y se le dé a la diáspora el mismo trato que a los salvadoreños que viven en el país. No sean cínicos y sinvergüenzas con el adefesio jurídico que han aprobado”, arremetió el presidente Nayib Bukele la noche del jueves en conferencia de prensa en Casa Presidencial para anunciar el veto a la reforma electoral que aprobaron los diputados a la ley vigente de voto en el exterior.
El 14 de enero de 2020 el vicepresidente de la República, Félix Ulloa, llevó a la Asamblea un anteproyecto de ley totalmente nuevo para implementar el voto para salvadoreños en el exterior para alcaldes y diputados de la Asamblea y Parlamento Centroamericano (Parlacen) implementando la modalidad de voto electrónico.
Por hoy, el sistema que usa el Tribunal Supremo Electoral (TSE), para que los compatriotas elijan al presidente y al vicepresidente de la República es por correo postal. Un mecanismo que el presidente Bukele tilda de engorroso y que no motiva a la diáspora a ejercer el sufragio.
Según Bukele el voto electrónico es la solución más fácil y segura de que los hermanos lejanos puedan hacer uso de su derecho al sufragio, sin embargo reiteró que los diputados están poniendo obstáculos para que sea prácticamente imposible para los salvadoreños votar en el exterior.
“Hagan un decreto que cumpla con la sentencia de la Sala de lo Constitucional respecto al voto en el exterior y yo se los devolveré sancionado”, afirmó Bukele.
Con respecto al sistema electrónico hay incertidumbre entre los legisladores. La preocupación de los diputados es que el país no está preparado financieramente para ejecutar ese mecanismo, también aducen que no se garantiza la seguridad del voto. Hay mucha desconfianza.
De hecho en otros países en los cuales se implementa han retrocedido por la falta de seguridad y a demandas de inconstitucionalidad. (Ver más en nota aparte).
De acuerdo a declaraciones del magistrado del TSE, Julio Olivo, de aplicar el voto electrónico sólo para el exterior, esto costaría $90 millones ponerlo en marcha.
A la fecha, el Tribunal Electoral ha dispuesto $20 millones como estimado para el voto en el exterior. Pero ese monto no fue calculado con la reforma que aprobó la Asamblea del voto para diputados. Con es agregado, según Olivo, el costo subiría a unos $40 millones.
El fallo de la Sala de lo Constitucional ordenó en 2016 a la Asamblea legislar para facilitar el voto de los salvadoreños en el extranjero para alcaldes y diputados, el como hacerlo es una atribución del Legislativo.