Minga, la abuelita que murió en tiroteo entre un policía y un vigilante en Sonsonate

La mujer murió al ser impactada por una bala durante un tiroteo entre un policía y un vigilante. Estos, según fuentes policiales, estaban emborrachándose cuando comenzaron a discutir.

Dominga Reyes murió a causa de un bala cuando dos personas dentro de un bar de Sonsonate discutían a disparos. Según información preliminar, los hombres peleaban por una mujer.

Por Jorge Beltrán Luna

2019-09-09 10:00:17

A pesar de sus 83 años era bien activa. Vivía en una champa de lámina, sin compañía humana, sólo con un par de gatos. La anciana sobrevivía de la recolección de envases plásticos y de lo que algunos buenos parroquianos le regalaban.

Hasta hace aproximadamente un año, Dominga Reyes también vendía cocos en el sector conocido como el Mercadito El Ángel, en la ciudad y departamento de Sonsonate, el mismo lugar donde murió.

La casa de Dominga, en la lotificación San Antonio, siempre de Sonsonate, ayer lucía con las puertas cerradas. Sólo los gatos permanecían en un espacio que hacía las veces de patio, donde las abundantes pichingas de plástico también confirman la forma de ganarse el sustento que tenía la anciana.

Dominga fue sepultada el lunes en el cementerio público de Nahulingo, de donde la víctima era originaria, según comentaron algunos vecinos de la anciana.

Sus vecinos la recordaron cómo era aquella anciana, tal vez la más longeva de toda la lotificación San Antonio, un vecindario de calles angostas y encharcadas.

Durante el sepelio, varias vecinas recordaron lo cariñosa que era con sus gatos, a tal grado de que les daba de comer con cuchara.

La anciana fue sepultada el lunes en el cementerio de Nahulingo. Foto EDH / Jessica Orellana

Otros la recordaron como aquella viejita que miraban caminar con paso firme todos los días por las calles de la lotificación y que pocas veces la vieron doblegarse ante una enfermedad.

Algunos, incluso, recordaron que no hace muchos días, cuando la vieron, hicieron la broma que era más posible que ellos (con muchos años menos que la anciana) se murieran antes que ella.

Pero no fue así. El pleito entre dos borrachos acabó con la vida de la anciana.

La balacera

Minga se quedó con la costumbre de ir a sentarse a una de las aceras cerca del Mercadito El Ángel, donde por un tiempo vendió cocos.

Algunos transeúntes le regalaban dinero o cualquier cosa que ella pudiera aprovechar, aseguran quienes la conocieron.

Fue en ese mismo lugar donde el sábado anterior la encontró la muerte. Estaba sentada en la acera cuando de repente comenzaron a escucharse balazos.

Dos hombres salieron de la cervecería Happy Beers, tirándose balazos. Minga estaba casi enfrente de ese establecimiento.

A Minga los vecinos la recuerdan como alguien que pocas veces se doblegaba ante una enfermedad. Foto Cortesía

Una o dos de esas balas alcanzaron el cuerpo de Minga quien alcanzó a ponerse de pie y caminar unos cinco metros. Luego su frágil cuerpo cayó ensangrentado. Murió casi de inmediato.

En la calle quedó otro cuerpo tendido. Era uno de los protagonistas de la balacera. De acuerdo con fuentes policiales este era un vigilante privado.

El otro protagonista resultó ser un agente de la Policía Nacional Civil, destacado en la subdelegación de Nahuizalco, Sonsonate.

Este fue identificado como Emiliano Antonio S. C., con orden numérico institucional (ONI) 10498, quien resultó con una herida en el tórax y dos más a la altura de las axilas.

De acuerdo con testigos del tiroteo, uno de los dos protagonistas corrió hacia donde estaba la anciana y por eso el otro disparó en esa dirección. Por lo menos una de esas balas impactó en Dominga. Otra más cayó en la puerta de un negocio.

El policía fue trasladado al Instituto Salvadoreño del Seguro Social de Sonsonate mientras que su arma de equipo fue recuperada en la escena del crimen, aseguraron las fuentes policiales.

Ambos, según las primeras indagaciones, estaban dentro de la cervecería, donde comenzaron a discutir por una mujer, lo cual derivó en la balacera que también le costó la vida a Dominga Reyes.

De momento se desconoce la condición de salud del agente policial y tampoco hay una posición oficial sobre el suceso.

Tampoco se sabe si el policía involucrado en el tiroteo será procesado judicialmente por la muerte de la anciana.

Entre los vecinos de la Lotificación San Antonio ayer hubo mucho lamento e indignación: dos hombres borrachos, que aparentemente discutían por una mujer, acabaron con la vida de su vecina.

Foto EDH / Jessica Orellana