Militar y esposa iban a culto cuando fueron asesinados por las maras

El militar era de Batallón Presidencial, unidad militar encargada de proteger al Presidente de la República; el sargento asesinado en el cantón San José Primero había sido condecorado con Medalla de Plata al Mérito por sus servicios en Iraq.

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Unidades élite de la Policía Nacional Civil realizaban ayer un operativo en el lugar donde mataron al sargento Mártir Vásquez. Foto EDH / Menly Cortez

Por Jorge Beltrán Luna

2019-05-02 5:30:49

Siete sargentos han sido asesinados desde febrero del 2011 hasta de abril de este año, mientras estaban de licencia, aunque en diversas circunstancias.

La última de estas víctimas fue identificada como Rubén Mártir Vásquez, de 38 años de edad, quien fue asesinado la noche del 30 de abril junto a su compañera de vida, María Vásquez Navas, cuando caminaban por una vereda desde su vivienda hacia una iglesia evangélica en la que se congregaba, en el cantón San José Primero, del municipio de San Martín.

De acuerdo con familiares, Mártir Vásquez tenía poco tiempo de haber sido trasladado del Comando de Fuerzas Especiales (CFE) al Estado Mayor Presidencial (o Batallón Presidencial), esta última es la unidad militar encargada de dar protección al Presidente de la República, al vicepresidente y otros funcionarios del Órgano Ejecutivo.

El martes anterior, el sargento y su mujer salieron como a las 4:30 de la tarde hacia la iglesia para asistir a culto de 5:00 a 6:00 p.m.

Cuando terminaba el servicio religioso, por estar ya oscuro, no regresaban por la misma vereda sino por una calle de tierra. A veces pagaban un pick up para que los fuera a dejar.

El martes, al ver que había pasado tiempo suficiente para que ambos regresaran del culto, sus familiares fueron a la iglesia. Allí les dijeron que no habían llegado.

Un grupo de hombres decidió salir a buscarlos y tomaron la vereda por donde el militar y su mujer llegaban a la iglesia.

No caminaron mucho para encontrar los dos cadáveres. Luego, aproximadamente a las 8:00 de la noche, informaron a las autoridades sobre el doble crimen.

Lugar controlado por pandillas

El cantón San José Primero tiene presencia tanto de la Mara Salvatrucha como de la Pandilla 18 Sureña. El sargento y su compañera de vida vivían en territorio controlado por esta última pandilla, pero la iglesia a la que iban está en territorio de la pandilla rival.

En el sector norte del cantón están los 18 y al sur, los MS.

El lugar donde los asesinaron está en el límite de los territorios controlados por esas dos agrupaciones criminales, según explicaron fuentes policiales que ayer en la tarde todavía realizaban un operativo en el sector con presencia de la pandilla 18.

“Allí es de tener cuidado porque anda un grupo con fusiles”, advirtió un agente policial.

Con el asesinato de Mártir Vásquez suman 11 los miembros de la Fuerza Armada que han sido asesinados por grupos de pandillas hasta abril de este año.

Siete sargentos asesinados

Desde el 2011, cuando las pandillas comenzaron a arreciar los ataques contra policías y militares, hasta abril de este año, por lo menos siete sargentos han sido asesinados por estructuras de pandillas, sobre todo por la MS-13.

El primer sargento mayor asesinado fue Fidel Ángel Molina Zabala, de 43 años, quien estaba destacado en el Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada.

Este crimen sucedió el 12 de febrero de 2011, en el caserío Valle Nuevo del cantón Las Delicias, municipio de San Juan Opico. La víctima estaba de licencia, descansando en casa de su familia cuando tres pandilleros de la MS-13, incluyendo un menor de edad, asaltaron la vivienda y lo acribillaron a balazos.

En esta iglesia se congregaban el sargento Rubén Vásquez Mártir y su compañera de vida, María Vásquez Navas, asesinados el martes en la tarde. Ella era pariente de un miembro de la PNC. Foto EDH / Menly Cortez

Los pandilleros también lesionaron de gravedad a otra persona que estaba acompañando a Molina Zabala. Ambos fueron trasladados al hospital de Santa Tecla, pero el militar falleció en el trayecto.

Asesinado en venganza

Se llamaba Pablo Cándido Vega. También era un sargento mayor. Fue asesinado en el cantón Pajales, del municipio de Panchimalco, al sur de San Salvador.

En su momento, las autoridades militares dijeron que era posible que el suboficial hubiera sido asesinado en venganza tomada por la Pandilla 18 Revolucionaria.

Poco antes del mediodía del 18 de abril de 2015, una patrulla de militares había abatido a nueve miembros de esa pandilla en el cantón Ulapa, de Zacatecoluca, departamento de La Paz.

Varios hermanos salieron a buscarlo

“Cuando vinieron a decir que (el sargento Rubén Mártir Vásquez y su mujer) no habían llegado a su casa varios hermanos comenzamos a buscarlos. Nos fuimos por la vereda que ellos usaban para venir a la iglesia. Ya estaban muertos”

Vecino del cantón San José Primero, san Martín.

El militar fue asesinado a las 8:30 de la noche de ese mismo día, mientras se encontraba descansando en su vivienda. Varios hombres encapuchados asaltaron la casa, armados de escopetas y con los rostros cubiertos, y ejecutaron al suboficial frente a su familia.

Vega estaba asignado al Comando de Apoyo de Transmisiones de la Fuerza Armada (CATFA).

Instructor de tiro acribillado

El 15 de febrero de 2016, el sargento Óscar Geovany Andrade Osorio fue emboscado por un grupo de pandilleros de la MS-13, cuando se dirigía a la 5ta. Brigada de Infantería, en San Vicente, a trabajar.

Andrade Osorio no tuvo tiempo de defenderse; no tuvo oportunidad de sacar su arma de fuego.

Este crimen fue cometido en el cantón Cutumayo Abajo, del municipio de Apastepeque, donde la víctima residía.

Asesinado al salir de discoteca

Juan Antonio Jiménez, de 46 años, sargento mayor destacado en el Regimiento de Caballería, con sede en San Juan Opico, fue asesinado la noche del 20 de octubre del 2016, luego de discutir con varios hombres dentro de una discoteca que funciona cerca del lugar conocido como Desvío a San Juan Opico.

Los sargentos víctimas de las pandillas

Óscar Geovany Andrade Osorio 

Fecha de asesinato:  El 15 de febrero de 2016 fue asesinado por varios pandilleros  de la MS-13 en el cantón Cutumayo Abajo del municipio de Apastepeque, departamento de San Vicente.

Unidad de alta: Estaba asignado a la Quinta Brigada de Infantería, en la compañía de instrucción de reclutas. Era paracaidista y francotirador. Tenía 25 años de servicio militar.

Julio Israel Peña Amaya

Fecha de asesinato:  El 15 de mayo de 2017 fue asesinado por un grupo de pandilleros de la MS-13, en el cantón Los Ejidos, municipio de Moncagua, departamento de San Miguel.

Unidad de alta: Destacamento Militar No. 4, con sede en San Francisco Gotera, departamento de Morazán. Tenía  gran experiencia militar. Era comando entre otras especialidades.

Pablo Cándido Vega

Fecha de asesinato:  Fue asesinado a balazos en su casa, el 18 de abril de 2015, en el cantón Pajales, municipio de Panchimalco, por la Pandilla 18 Revolucionaria

Unidad de alta: Estaba asignado al Comando de Apoyo de Transmisiones (CATFA). Horas antes de ser asesinado, una patrulla de soldados abatió a balazos a nueve miembros de la Pandilla 18 R en  Zacatecoluca.

Fidel Ángel Molina Zabala

Fecha de asesinato:  Lo mataron el 12 de febrero de 2011, en su casa, en caserío Valle Nuevo, cantón Las Delicias, de San Juan Opico. Lo asesinó la MS-13.

Unidad de alta:  Había sido asignado en el Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada.  Era un veterano militar. Prácticamente fue el primer sargento mayor asesinado por las pandillas.

Lázaro ALberto Lemus Rodríguez

Fecha de asesinato:  Fue privado de libertad y posteriormente asesinado, el 19 de mayo de 2018, en Ciudad Merliot. Su cadáver fue hallado en una comunidad de Santa Tecla con presencia de la MS-13.

Unidad de alta: Era auxiliar del Jefe del Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada. Antes había estado en grupos de tarea conjunta, según fuentes militares.






Asesinado en Moncagua

Aquella noche, Jiménez hacía uso de licencia, cuando dentro del establecimiento conocido como Titanic, al calor de bebidas alcohólicas, discutió con un grupo de hombres, según las investigaciones.

Luego de la discusión, el sargento mayor se retiró, acompañado de otra persona. Sin embargo, los hombres con quienes había discutido salieron de la discoteca, montaron en una moto y al darle alcance, le dispararon al militar.

Una bala que le entró en el pecho fue la que lo mató aunque no de inmediato. Murió cuando recibía asistencia médica en un establecimiento público.

Horas después, la Fuerza Armada informó en su cuenta de Twitter que había capturado a los dos responsables del homicidio. Eso es todo lo que se supo del crimen.

San Juan Opico es un municipio del departamento de La Libertad, con fuerte presencia de la MS-13.

El 15 de mayo de 2017, el sargento mayor, Julio Israel Peña Amaya, de 45 años, fue asesinado por miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13) en el cantón Los Ejidos, municipio de Moncagua, departamento de San Miguel.

Peña Amaya estaba asignado al Destacamento Militar Número 4, con sede en San Francisco Gotera, departamento de Morazán, y según información proporcionada por la PNC el día del crimen, éste fue cometido frente a una venta de bebidas alcohólicas, donde el militar estaba consumiendo.

Otro asesinado por la MS-13

El 19 de mayo del 2018, el sargento mayor Lázaro Alberto Lemus Rodríguez, de 44 años, quien era originario de Zacatecoluca, fue privado de libertad por un grupo de pandilleros de la MS-13, quienes lo asesinaron cerca de la comunidad Enmanuel, de Santa Tecla.

Lemus Rodríguez tenía 25 años de servicio en la Fuerza Armada, y se desempeñaba como colaborador del jefe del Conjunto I (Recursos Humanos) del Estado Mayor Conjunto de la Fuerza Armada (EMCFA), según fuentes militares.

La víctima se encontraba de licencia cuando fue asesinada. Autoridades militares.

Lo poco que se sabe sobre el hecho, de manera extraoficial, es que Lemus Rodríguez fue privado de libertad en el sector conocido como el Platillo, en Ciudad Merliot, aproximadamente a las 9:45 de la noche del 19 de mayo 2018

Menos de dos horas después, su cadáver fue encontrado en la comunidad La Reforma, distante pocos metros del redondel el Platillo. Al militar no le robaron nada material.