Desde que se habilitó la vacunación para la población mayor de 18 años, una de las metas del Gobierno era inocular a un promedio de 75,000 personas a diario. La meta se logró conseguir los primeros tres días; sin embargo, la semana pasada, la aplicación de la inoculación disminuyó entre 5,000 a 2,000 dosis diarias.
A pesar de que El Salvador es el único país en la región centroamericana que ya tiene habilitado la inmunización contra el COVID-19 para la población mayor de 18 años, buena parte de su población vulnerable a complicarse y morir por la enfermedad continúa desprotegida.
“Hemos tenido un poco de dificultad con los grupos etarios de 50 años en adelante... que son grupos vulnerables y que de alguna manera no han asistido el 100 % a la vacunación... Y eso se expresa en las letalidades que estamos observando, pero la mayor parte son adultos mayores que no tenían la vacuna”, sostuvo Francisco Alabí, ministro de Salud.
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El infectólogo Iván Solano Leiva explica que para alcanzar la población meta a vacunar, que son 4.5 millones, deben investigar por qué la cobertura de vacunación es baja y crear estrategias para flexibilizar los horarios de vacunación para la población que no puede hacer citas por sus horarios de trabajo. Debido a que actualmente la vacunación es de lunes a viernes de 8:00 de la mañana a 4:00 de la tarde.
Aunque las declaraciones del titular de Salud siguen siendo positivas ante el control del virus con la vacunación; por el momento, se desconoce cuántos de los 2,148,400 personas con enfermedades crónicas y mayores de 50 años están protegidos contra el virus.
Infectólogos como Solano Leiva, Jorge Panameño, Wilfredo Clara, entre otros especialistas, han exigido al Gobierno ser transparente con los datos de vacunación, comportamiento y muertes a causa del virus en el país, con la finalidad de medir el impacto de la vacunación.
Alabí ha detallado que el promedio de siete fallecidos a diario a causa del virus, se debe a personas no vacunadas, mientras que los médicos advierten que hay población vulnerable que no tiene acceso a la inmunización por su condición geográfica, inmovilidad y acceso a tecnología.
Solo en el área urbana, en zonas como Ilopango, población con enfermedades crónicas con problemas de movilidad física no tiene accesoa la vacunación domiciliar, debido a que en la zona conocida como San Bartolo, los promotores de salud no hacen visitas a ese lugar.
“Eso son obstáculos que deben analizar, por eso es importante conocer cuáles son las coberturas de vacunación que se han tenido en los diferentes grupos etarios. Si usted ve que la cobertura de vacunación es baja, que diga por qué; y una de las causas puede ser que no está siendo accesible a esa población, por lo tanto debe buscar estrategias que le permita hacer que las personas adultas mayores tengan acceso a las vacunas e ir a buscar a las personas no vacunadas ”, señaló Iván Solano Leiva.
El titular de Salud atribuye el alza de casos a personas no vacunadas, relajamiento de medidas de prevención de contagio y la capacidad del virus de adaptarse a diversos ambientes.
Mientras que la representante del Foro Nacional de Salud, Morena Murillo, señala que la población del interior no tiene acceso a centros de vacunación cercanos a sus residencias y tienen que movilizarse a otros municipios, por lo cual rehusan aplicarse la vacuna porque deben incurrir en gastos.
El salubrista Ricardo Lara aconseja acercar la vacunación, aprovechando las municipalidades y descentralizar la vacunación lo más posible.
“Lo ideal es que fuera bueno que se pusieran en las entradas de las iglesias, en los centros comerciales. El Gobierno tiene una oportunidad en sus manos y la debe a provechar, llevar las vacunas a nivel municipal, utilizando las alcaldías o los establecimientos de salud. Con eso garantiza que ha acercado la vacuna a nivel municipal”, sugirió.
Por ejemplo, en Sonsonate la opcion de vacunación accesible según el sitio de vacunación es el Hospital El Salvador, describió.
Wilfredo Clara, reconocido epidemiólogo a nivel internacional, declaró a través de un espacio en Twitter que se deben hacer encuestas rápido para identificar grupos poblacionales que se rehusan a ser vacunados y dinamizar la estrategia de inmunización y descentralizar.
“Algunas de esas personas no pueden porque tiene problemas para movilizarse, mientras que para el grupo (renuentes)se ajustan los mensajes de comunicación de riesgo y la descentralización es clave, es decir acercar la vacunación”,argumentó Clara.
Mientras que Iván Solano Leiva destaca que hay que investigar y hacer campañas de vacunación en la población que no quiere vacunarse, para alcanzar la inmunidad colectiva. “ Tratar de encontrar porque está pasando y hacer estrategias que le permitan vencer esos problemas, por eso es que yo digo que no es tanto el número absoluto de vacunas que nos interesa que ellos nos digan. Sino que nos digan los porcentajes de vacunación de los diferentes grupos etarios...(tomar) las medidas de promoción en salud para estimular a muchos que se vayan a vacunar o establecer estrategias con las empresas que les permitan a sus empleados que demuestren que van a ir a vacunarse”, aconseja Solano Leiva.
Por su parte, el ministro de Salud, Francisco Alabí, justifica que el recién aprobado decreto Ejecutivo número 90, específica que la vacunación es de interés nacional y que los empleados ya no tiene excusa para no vacunarse. Y señaló que el único grupo de personas que tiene problemas para vacunarse son los trabajadores de las máquilas porque sus horarios les impide ir a un centro de vacunación.
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Alabí detalló que no pueden dar una estadística del porcentaje de población vacunada por rangos de edad porque debido a la rápidez con que se implementó la medida no ha permitido hacer un recuento, pero señaló que son los jóvenes y la pobalción entre 30 a 40 años son los que tienen mayor afluencia.
“Podemos buscar la alternativa más fácil para ganar la batalla al Covid, (que) no es estar haciendo pruebas de PCR y secuenciaciones de RNA viral, solo para saber si existe la variante Delta. La situación más fácil para ganarle la batalla al Covid es irse a vacunar. Secuenciar un RNA viral para ver si las adaptaciones del virus demuestra que la variante se encuentra en el territorio se tarda semanas”.
El pasado jueves, Alabí sostuvo que aunque no tienen evidencia sobre la circulación de la variante Delta en el país y restó importancia a la exigencia de los médicos que solicitan que se haga vigilancia de secuenciación del virus.
Mientras que la Organización Mundial de la Salud ha hecho un llamado a los gobiernos a que desarrollen vigilancia de la circulación de variantes de preocupación para tomar las medidas de prevención de contagios pertinentes.
“No existe detectada la variante Delta. Ahora eso no quiere decir que no pudiese estar, esto quiere decir que en el momento no existe evidencia que compruebe que eso está acá. Puede quedar en el hecho del supuesto”, subrayó Alabí.
El titular de Salud descartó la ampliación y que se habiliten los vacunatorios para la aplicación de vacuna los fines de semana, y sostiene que hay un buen ritmo de inoculación.