Karen Sofía tiene 17 años de edad, Kimberly Adriana y Jennifer Victoria, son adolescentes de 13 años. Daniel Alexander es un niño de nueve años; mientras que Brenda Margarita anda en los 12 años de edad. El factor común entre ellos es que además de ser menores de edad, son parte de las 1,099 personas extraviadas en los cuatro meses de este año, según cifras de la Fiscalía General.
Los números revelados por la Fiscalía con respecto a las personas desaparecidas demuestran que superan a la cantidad de asesinadas registrada en los primeros cuatro meses de este año, según cifras de la Fiscalía.
Esas cifras detallan que las 1,099 personas desaparecieron entre enero y abril de este año.
El dato anterior es superior con respecto al número de homicidios registrados. En cuatro meses de 2019 se registraron 1,036 personas asesinadas.
De 17 casos de menores desaparecidos divulgados este año por la Fiscalía en la cuenta de Twitter “Alerta, ángel desaparecido”, solo dos han sido localizados; mientras que del resto todavía se encuentran desaparecidos o al menos no se dice si ya fue localizado.
Sus fotografías aparecen en la referida cuenta para que sus familiares tengan alguna esperanza de que alguien pueda ayudar a localizarlos.
Foto EDH / Archivo
Cuatro de estos jóvenes tienen 16 años, otros tres andan en los 17 al igual que tres más que tienen 15 años. Tres jóvenes más tienen 13 años. Hay un niño de nueve años. De los 17 desaparecidos, diez son mujeres y siete varones.
Además cuatro casos de esas desapariciones fueron registradas en Mejicanos y tres en San Salvador. En Guazapa y Ahuachapán desaparecieron dos menores en cada uno de esos municipios. El resto de casos ocurrieron en los municipios de Ciudad Delgado, Apopa, Ayutuxtepeque, San Miguel, Nejapa y Atiquizaya.
A diario se puede observar la divulgación de fotografías de jóvenes desaparecidos en las cuentas de oficiales de Twitter de la Fiscalía General o de particulares.
Más desaparecidos que asesinados
Al desglosar las cifras de la Fiscalía General con relación a los dos hechos delictivos, se tiene que en enero hubo 289 asesinatos, pero 295 personas desaparecieron.
Al mes siguiente, febrero, fueron registrados 206 homicidios y 237 desaparecidos. En marzo, la brecha entre homicidios y desaparecidos se amplió aún más.
Como muestra, 238 personas fueron asesinadas en los 31 días de ese mes, pero las autoridades recibieron las denuncias en ese lapso que 286 personas habían desaparecido.
Solo en abril pasado, la cantidad de personas asesinadas superó a la de las desaparecidas.
Las cifras de la Fiscalía detallan que en los 30 días de abril, la violencia criminal acabó con la vida de 303 personas, mientras 281 desaparecieron en el mismo período.
Solo 250 personas desaparecidas han sido halladas con vida
Aunque las autoridades policiales no revelaron la cifra de los desaparecidos que se les ha reportado en 2019, el vocero oficial de la corporación, inspector jefe Elvis Cisneros, aseguró que 250 personas que estaban extraviadas fueron encontradas con vida en el primer trimestre de este año.
Eso refleja que, en promedio, de cada diez personas desaparecidas, tres son halladas con vida, según los registros de la Policía.
Al igual que en los homicidios, la mayoría de las víctimas que desaparece anda entre 15 y 30 años de edad, según fuentes policiales.
De enero a abril
Personas desaparecidas entre enero y abril de este año, según cifras de la Fiscalía General. La Policía informó que solo 250 personas que estaban extraviadas fueron encontradas con vida en el primer trimestre de este año.
Primeros cuatro meses del año
Personas asesinadas en los primeros cuatro meses de este año, según los registros de la Fiscalía. El promedio alcanza los 9 homicidios por día en el año. Entre las víctimas hay 116 mujeres, 46 menos que el año pasado.
Explicaron las fuentes, que las pandillas son las responsables de la mayor parte de las desapariciones de personas porque es una práctica de esos grupos delictivos de raptar a sus víctimas para asesinarlas y luego enterrar sus cadáveres.
Algunas de esas fuentes policiales señalan que un buen número de jóvenes desaparecidos eran miembros o se relacionaban con esos grupos criminales.
Estos grupos raptan a sus víctimas por distintas razones, después las torturan y las asesinan, para que luego sus cadáveres sean enterrados en fosas comunes en zonas donde estos grupos delictivos tienen fuerte presencia.
Cuando sepultan a sus víctimas, los pandilleros pretenden esconder los cuerpos para evitar que los involucren en esos asesinatos y no ser acusados en los tribunales de justicia, explicó un investigador de la Policía.
La Policía destaca tres casos resueltos de desaparecidos
El inspector policial Cisneros reveló que tres casos de personas desaparecidas fueron resueltos de manera inmediata por la Policía.
Sin embargo, los casos corresponden a dos personas adultas mayores que perdieron la memoria y de tres mujeres que huyeron juntas de su casa porque eran víctimas de violencia intrafamiliar.
En este último caso registrado en Ahuachapán, se trataba de una mujer adulta y dos menores.
Su familia las reportó como desaparecidas porque no las encontraron cuando llegaron a la casa, por lo que denunciaron a la Policía y esta de inmediato comenzó su búsqueda, explicó Cisneros.
Horas después, estas personas fueron encontradas en la casa de otro familiar y aseguraron que se habían escapado porque eran maltratadas de manera reiterada.
En el caso de los adultos mayores extraviados, Cisneros explicó que uno de los casos es el de un señor de 70 años de edad, quien acompañó a su hermano a una agencia bancaria, pero que perdió la memoria y se fue de allí sin avisarle a su hermano. Este acude a la Policía para dar aviso de su desaparición.
“Se localiza (la persona) con vida, sana y salva, únicamente había tenido una desorientación, medio le comprendió que iba hacer una transacción bancaria y él pensó que se había ido, por lo que pierde la noción de dónde se encontraba y gracias a Dios fue localizado con vida cuando se estaba buscando”, dijo Cisneros.
Se refirió a otro hecho que se produjo en San Vicente. En este caso se extraviaron una mujer y una niña.
Cisneros dijo que el otro caso trata de una anciana que padecía de problemas mentales y ella sacó a la menor de la casa y se fue sin decir hacia dónde iban. Se perdieron, pero la Policía las encontró en otra casa.
“Muchas de estas personas y en muchísimos casos hay menores que son abusados por sus padres, hay personas que padecen de drogadicción o de alcoholismo, se pierden de dos a tres días de la vista de sus familiares, quienes ponen la denuncia de desaparecidos”, dijo Cisneros.
Agregó que estos tres casos pretenden demostrar de que no todas las personas reportadas como desaparecida es encontrada muerta o asesinada.
Las autoridades de la Policía han reiterado anteriormente que los familiares no reportan el hallazgo de sus desaparecidos con vida.