He perdido el 40% de la cosecha y si se viene otro temporal, me voy a pique”, comentó don Ricardo Sánchez, un agricultor que cultiva frijol en la zona de Jucuapa, Usulután.
Sus 22 años como agricultor le permiten calcular que en los cinco días continuos de lluvia perdió al menos el 40% de la manzana y media de frijol que había sembrado.
“Nos ha golpeado la helación y eso ha provocado la pudrición del frijol. Se maduró muy rápido, tenemos frijol en etapa de ejote y los que están floreando y se pudrió todo”, contó.
Como él, cientos de agricultores de todas las zonas del país, pero principalmente del occidente y la zona paracentral, donde se siembra más de la mitad de la producción nacional de frijol, han sido afectados por la última onda tropical.
Según las gremiales de agricultores el principal cultivo afectado fue el de frijol, esto es porque el maíz y el sorgo, en la mayoría de zonas ya estaban cosechados y porque el 75% del total de la producción de frijol de cada año se siembra entre agosto y septiembre.
De acuerdo a Luis Treminio, presidente de la Asociación Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), la regiones más afectadas son la conocida por ellos como zona I- que abarca los departamentos de Ahuachapán, Santa Ana y Sonsonate, donde se perdieron al menos 64,139 manzanas cosechadas.
En segundo lugar, la región II- Chalatenango, La Libertad, San Salvador y Cuscatlán, con 65,080 manzanas de frijol inundadas.
Para la cosecha de este año lo proyectado era 2.5 millones de quintales de frijol, sin embargo, los agricultores calculan que se perdió al menos el 11% de la cosecha estimada, lo que representa 183,060 quintales.
“El recalentamiento fue el principal problema. Cuando llueve demasiado el frijol se madura más rápido y empieza a botar vainas y hojas y lo vuelve propenso al hongo, los agricultores le llaman Virosi que pudre el frijol”, explicó Treminio.
Según el presidente de Campo por el momento no hay afectación directa hacia el consumidor ya que el frijol perdido es el que se consumirá en el año 2020 e inclusive se puede volver a sembrar a la salida del invierno y se recupera el que se perdió.
“Esperamos que no haya alza en los granos, en maíz o frijol, para los consumidores. Desabastecimiento no habrá este año, esperamos que no haya el otro año. Esta cosecha es la que abastece el otro año y ese es el temor porque los distribuidores compraron barato en época normal y como hay emergencia, de eso se agarran para vender caro después”, añadió Mateo Rendón, presidente de la Mesa Rural Agropecuaria.
Sin embargo, ambas gremiales están expectantes del invierno. Si sigue lloviendo si entrarían en crisis, advirtieron.
También maíz y café
Aunque el cultivo más afectado es el frijol, Rendón agregó que en la zona oriental del país, sí hubo afectación de maíz, debido a que ahí comienza tarde la siembra postrera (la de invierno).
“Tenemos afectación de maíz, en la parte costera, hablando solo del sur San Miguel hasta el sur de Ahuachapán, maíz de postrera y de verano, unos estaban a metro o metro y medio de altura y se ahogaron, también se inundaron milpas dobladas. Calculamos que unas 10,000 manzanas de maíz se han perdido solo en la zona sur costera del país, esto es 50,000 quintales, unos $650,000 en pérdidas”, dijo Rendón.
También añadió que sobre todo en La Paz y en la zona oriental se ha inundado los pastizales y eso ha provocado hongos en los cascos del ganado, lo que los ha postrado y enfermado.
Por su parte, Omar Flores, presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal) señaló que hasta ahora la afectación en el café se estima que ronda un 5 % del total de la cosecha del año (905,110 quintales de café en promedio).
La Asociación Cafetalera de El Salvador, emitió un comunicado donde señala que el exceso de humedad por las lluvias dañó el café maduro y rajó el grano, lo que provocará su caída.
Esto último propicia condiciones para que se desarrolle el hongo de la roya. “Estimamos que habrá una propagación de la enfermedad de la roya, pronto se comenzará a ver los efectos de esta situación”, cita la gremial.
Solo en 2013 esta enfermedad del café hizo que bajara la producción de 1,730,000,00 quintales cosecha 2013-2014, a 700,025,00 quintales.
Además según el comunicado, también les preocupa el crecimiento de maleza alrededor de los cafetales que podría afectar el crecimiento del grano.
Flores aseguró que aún están haciendo evaluación de las condiciones de las plantas en las zonas cafeteras, por lo que no hay una cuantificación monetaria de las pérdidas.
Gobierno está evaluando daños
Rigoberto Soto, viceministro de Agricultura, reconoció, previo a un evento con azucareros, que los cinco días de intensas lluvias dañaron varios cultivos, pero que todavía están evaluando las zonas y cultivos afectados para tomar acciones.
“Yo creo que debemos esperar. No podemos adelantar juicios. El Ministerio de Agricultura y Ganadería ha enviado a todos sus agrónomos extensionistas a verificar los daños que a nivel nacional pudieron haber sido ocasionados”, explicó el viceministro.
De acuerdo al funcionario, los primeros reportes les indican que la zona occidental ha sido la menos dañada y están a la espera de más datos para emitir cifras más concretas.
El viceministro coincidió con las gremiales de agricultores respecto a que el cultivo de frijol podría ser el más afectado.
“En el caso del maíz, estaba ya por salir la segunda cosecha. Inclusive el cultivo de frijol, pero como sabemos que se siembra en (ladera), no ha sido muy perjudicado”, dijo.
“Esperaríamos tener cifras en los próximos días, después de haber salido de estas precipitaciones”, aclaró el funcionario.
El viceministro insistió que el viernes próximo “por la mañana o por la tarde” estarían comunicando, de manera oficial, las cifras de afectación de cultivos que provocó este último temporal.
“El ciclo agrícola estaba por terminar. Decir que vamos a dar semillas nuevamente para poder sustituir las pérdidas sería engañarnos a nosotros mismos porque usted ve cómo está el clima actualmente, totalmente soleado y sin nubes, y el invierto en unos 15 días estaría ya por salir”, explicó.
Sin embargo, el presidente de la gremial de Campo señaló que en la última siembra de frijol, que se realiza en noviembre, solo se cultiva un 5% del total de la cosecha por año, pero si el gobierno les entrega más semilla, podrían sembrar un 10%, para recuperar lo perdido.
Tanto Treminio como Rendón coincidieron en demandar apoyo del Ministerio de Agricultura para sanear el ganado y los cultivos de frijol y evitar así más pérdidas para los agricultores.
“Queremos que se mejore el invierno, que ya no exista otro temporal, y que Agricultura distribuya fungicidas para evitar el hongo, si sigue lloviendo, el hongo puede regarse en todo el cultivo y provocar más pérdidas”, advirtió Treminio.