Tras conocer las denuncia de los ciudadano y las declaraciones de funcionarios publicadas en diversos medios de comunicación los días 22 y 23 de enero, el Juzgado Ambiental de San Salvador inició ayer un proceso para establecer medidas cautelares por el irregular abastecimiento y calidad del agua distribuida por ANDA en el Área Metropolitana de San Salvador.
Debido a que el juzgado considera que carece de “evidencia suficiente” sobre lo ocurrido, le ha dado 5 días hábiles al presidente de ANDA, Frederick Benítez Cardona, para presentar los planos de la planta potabilizara de Las Pavas.
También deberá presentar: registro de caudales, insumos y dosis utilizadas. El juzgado requiere además que el funcionario informe si en dicha planta se tiene un “plan de contingencia debidamente aprobado”.
Sumado a esto, Benítez Cardona deberá informar cómo y cuándo el personal de Las Pavas se dio cuenta de que el agua presentaba mal olor y sabor. Además, el Juzgado Ambiental requiere que se le presenten los análisis llevados a cabo por la autónoma para determinar la causa de la turbidez del agua.
Hace dos semanas, los usuarios denunciaron el color y el mal olor del agua que estaban recibiendo. Ante las denuncias, el presidente de ANDA dijo en un programa de entrevista televisivo que el agua era apta para el consumo humano.
Lo mismo aseguró la ministra de Salud. Pero esta semana, el presidente de la República, Nayib Bukele, les llamó la atención por no atender de inmediato las quejas y denuncias de los usuarios.
Bukele aseguró que el problema fue originado por algas y que había sido controlado usando sulfato de cobre en una concentración de 1 miligramo por litro.
Diputados también piden explicaciones
Los diputados convocaron para la próxima semana a los titulares de Educación, Anda y Salud para conocer de primera mano de parte de la Anda, qué análisis se han realizado al agua que suministra la autónoma para sanearla de la contaminación de “algas” y los resultados certificados por los laboratorios científicos de los estudios que den fe de la “calidad e inocuidad” del agua que está llegando a las casas.
Además, de las medidas que están implementado las instituciones involucradas para abastecer de agua limpia a los centros escolares; y que el Ministerio de Salud informe si el líquido cumple con los estándares de consumo humano establecidos por la Organización Mundial para la Salud (OMS), así como de las estadísticas de enfermedades gastrointestinales generadas a causa de la “insalubridad” del recurso hídrico.
Respuesta tardía de la crisis de agua
El pasado martes, después de más de dos semanas de que la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA) abasteció el Gran San Salvador con agua pestilente, y tras numerosas denuncias de la población afectada, el presidente Nayib Bukele abordó la problemática y admitió una respuesta tardía.
Bukele reconoció que por falta de monitoreo de calidad, los salvadoreños se vieron afectados con agua contaminada con algas. También reconoció la respuesta tardía ante la emergencia.
“Pedimos disculpas como gobierno, debimos haber actuado más rápido. No debimos haber permitido que el problema pasara tantos días sin resolverse”, dijo el mandatario.