Japón financió mejoras para un centro escolar de La Paz

La obra contribuye a la educación de 264 alumnos de la Lotificación San Francisco.

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Por César Jiménez

2020-01-25 9:20:10

LA PAZ. La embajada japonesa, por medio del Programa de Asistencia Financiera no Reembolsable para Proyectos Comunitarios de Seguridad Humana (APCS), aportó $135,975 para el mejoramiento de la infraestructura del Centro Escolar Juan Pablo Rodríguez Alfaro, ubicado en el municipio El Rosario del departamento de La Paz.

Antes los estudiantes de la institución recibían clases en aulas provisionales que no reunían las condiciones para el proceso de aprendizaje porque estaban hechas con láminas, madera y el piso era de tierra.

Con el aporte nipón se construyeron cuatro aulas, la dirección, cocina-bodega, módulos de servicios sanitarios, entre obras.

El director de la escuela, Walter Guzmán, expresó que la incitativa por el mejoramiento de la infraestructura del centro escolar nació en 2015 por parte de la Asociación de Desarrollo Comunal (Adesco) Lotificación San Francisco, El Pedregal.

Desde ese año, la Adesco desarrolló la documentación requerida para aplicar a la financiación del proyecto con la embajada de Japón y en 2017 fueron elegidos para la inversión en infraestructura. En 2018 se realizó el convenio junto con el Ministerio de Educación, la comunidad y la embajada nipona para ejecutar la construcción.

Guzmán indicó que la inauguración se retrasó porque, entre los requisitos del convenio, el Ministerio de Educación no había entregado el mobiliario y fue hasta junio de 2019 que se les asignaron los fondos para cubrir esta parte.

Además, la ceremonia se había programado para el 21 de octubre, pero no se llevó acabo por la suspensión de clases por la pasada emergencia nacional debido a las lluvias, retomándola para el inicio escolar 2020.

Los estudiantes, padres de familia y habitantes de la Lotificación San Francisco, expresaron su agradecimiento al pueblo japonés por el apoyo brindado para el mejoramiento de las instalaciones.

“Hemos tenido un aumento en las matricula de estudiantes (para este año), debido a que los estudiantes se sienten motivados y alegres de venir a una escuela bonita en su infraestructura, para impartir las clases, desarrollo, desplazamiento”, expresó el director.

Un centro escolar en crecimiento

El director recordó que la institución inició como una escuela municipal en 2009, ofreciendo educación parvularia hasta sexto grado.

A partir de esto se inició los trámites para cumplir con los requisitos que pide el Ministerio de Educación y ser parte del sector público, obteniendo la acreditación en 2013.

“En 2014 fuimos ingresados en los beneficios de los paquetes escolares, alimentación escolar y todos los programas sociales en cuanto a educación”, aseguró Guzmán.

Ahora la institución imparte clases de parvularia hasta octavo grado.

Dentro de las proyecciones del centro escolar, en febrero de este año iniciaran las jornadas de estudios extendidos para los alumnos de séptimo y octavo grado, impartirán talleres vocaciones en electricidad para los estudiantes de 1:00 a 4:00 de la tarde y para siguiente año proyectan incorporar el noveno grado a sus servicios educativos.

Salir adelante para ayudar

La consejera de la embajada de Japón, Masuda Cheiko, felicitó a los habitantes de la Lotificación San Francisco por el esfuerzo que realizaron para la construcción de la institución y enfatizó la importancia de contar con una infraestructura adecuada para realizar los procesos de aprendizaje y enseñanza.

Cheiko comentó que para seguir el camino del desarrollo y conseguir éxitos individuales o grupales, es importante forjar la educación ya que es un trabajo en conjunto de alumnos, docentes y la comunidad.

“(Alumnos) La educación que ustedes están recibiendo aquí es esencial y básica para el desarrollo personal y que así puedan forjar su futuro”, dijo la consejera.

Añadió que espera que los niños y jóvenes se concentren en los estudios y puedan realizar sus sueños y contribuyan en la búsqueda de soluciones para los problemas de su comunidad.

Japón promueve el concepto “seguridad humana” porque insta a proteger el derecho de la gente a llevar una vida feliz y digna, libre de temor y miseria, a través del desarrollo de sus capacidades.