A sus 22 años, Israel Eduardo Vidal, un joven originario del municipio de Metapán, en Santa Ana, le apuesta fuerte a convertirse en director de cine, algo para lo que, según explicó, se viene preparando desde hace cinco años de forma autodidacta.
En julio pasado Vidal se graduó de la Escuela de Comunicaciones Mónica Herrera, como el mejor licenciado en Comunicaciones Integradas de Marketing con especialización en Management.
El metapaneco explicó que, considerando que en el país no hay ninguna academia formal que brinde la posibilidad de desarrollarse en diversas ramas del arte, incluyendo cine, vio en la carrera de Comunicaciones Integradas de Marketing, que ofrece la Escuela Mónica Herrera, una alternativa para explotar su potencial creativo en varias áreas.
“Soy una persona que me gusta hacer de todo y hago todo, y esta universidad me daba la oportunidad de dar todo y amar todo”, dijo.
Cuando Israel Vidal, quien es hijo de dos emprendedores de la zona occidental del país, tenía 8 años sufrió una complicación de salud que le afectó la movilidad, pero durante la entrevista precisó de forma categórica que eso no ha sido piedra de tropiezo, y por el contrario, tuvo una infancia y adolescencia plenas, llenas de logros académicos, desde su paso por varios colegios de la zona occidental como el San José, Madre El Salvador y Bautista de Santa Ana. Es de este último de donde se graduó como bachiller opción general, siempre con altas calificaciones.
Según recordó, en su época escolar creó proyectos en donde se fomentaba la protección del medio ambiente y era de los que alzaba su voz ante situaciones injustas.
“A los 11 años fue que decidí que quería hacer cine. Al inicio quería ser astronauta, pero hubo un momento en que me dije no me gusta estar solo, no me gusta la soledad, entonces lo de ser astronauta no va a funcionar”, comentó el joven.
Algo que lo hizo también caer en la cuenta de que lo suyo era dedicarse al cine es que desde sus primeros años le gustaba jugar con sus primos a la interpretación de roles, y él era el que les indicaba qué decir, qué hacer, hacia donde moverse, sin tener la idea de que hacía el papel de director de cine.
Su convicción sobre lo que quería ser cuando fuera grande se reforzó cuando en una ocasión tuvo que escribir una historia para una tarea de inglés, y otra de Lenguaje.
Multifacético
De ahí en adelante, a la par de sus estudios regulares, Israel Vidal se decantó por adquirir todos los conocimientos y habilidades posibles que le servirán para su propósito.
Ha logrado dominar la fotografía, el diseño de interiores, dirección de arte, diseño de vestuario, escritura de música, diseño de productos, desarrollo de marcas, desarrollo de ilustraciones, vídeo y edición.
“Yo de verdad me he estado preparando para poder desenvolverme en el rol (de director de cine)”, citó.
De acuerdo con las palabras de Israel Vidal, hasta la fecha es el diseñador más joven que se ha presentado en la plataforma de moda Kaleidoscopio.
Hace dos años, en la Escuela Mónica Herrera, creó junto al director de carrera, un festival de audiovisuales para dar a conocer trabajos que se hacen en este campo.
El primer año en que el festival se llevó a cabo fungió como “proyect manager” (responsable del proyecto) y como tal estuvo a cargo de desarrollar la marca, creación de agenda, de concepto, logística, entre otros. En la segunda edición solo guió al equipo.
Este metapaneco afirmó que tiene varios amigos que hacen cine en el país, a quienes admira mucho.
“Yo digo (que) el cine en El Salvador está dando unos pasos de bebé. Ahí vamos y pienso que todos los que queremos hacer cine acá somos gente valiente que toma la cámara y decide salir a las calles a crear.
Cuando creamos el festival de audiovisual ese era el punto, celebrar ese valor, ese coraje, esa voluntad de experimentar y crear”, manifestó.
Del mundo del cine se dice admirador de grandes directores como Francois Truffat, Mario Brenta, Pawe Pawlikowski, y Jean- Luc Godard, Ingmar Bergman, entre otros.
Israel Vidal, quien se declara a favor del amor, del feminismo y de todo lo que tenga que ver con la igualdad, manifestó que actualmente está enfocado en preparar un documental de corte personal al que ha titulado “Vacas de Noche”, para lo cual recorrió potreros que están en las afueras de su querido Metapán.
El cortometraje “es una reflexión sobre aferrarnos a recuerdos. Se llama así porque las vacas por las noches extrañan a su grupo, a su cría y empiezan a balar, hacen un sonido bastante melancólico, para mí recordar es melancólico”, dijo.
Para su filmación se ha valido de una cámara fotográfica, y ha tenido el apoyo de dos amigos y dos de sus primos, por lo que considera se trata de un trabajo muy especial.
“Yo siempre dije que más adelante cuando sea director de cine quiero sentirme orgulloso de mi primera pieza, y que mejor que haberla hecho con gente que quiero”, expresó.
Con el dedo sobre el renglón
Israel está en busca de cupo para asistir a un prestigioso centro de estudios superiores de Estados Unidos que tenga la carrera de Cine. Es así como tiene en la mira el American Film Institute, el California Institute of Art y La Chapman University.
Sin embargo, para lograr ser aceptado en cualquiera de esos centros de estudio tiene que filmar y presentar un cortometraje de 10 minutos y de calidad.
Aunque el joven tiene conocimientos y experiencia sobre los distintos aspectos de la filmación, reconoce que en este momento necesita contar con un equipo de grabación profesional y el apoyo de especialistas en cada área.
“Ya tengo ideas, tengo dos guiones, pero ando buscando productora, organizaciones que quieran sumar y apoyarme con recurso”, agregó, tras comentar que no cuenta con cámara de grabación profesional.
Señaló que las personas que quieran apoyarlo en la producción del cortometraje pueden comunicarse con él a su dirección de correo electrónico israelvidalsv@gmail.com o también en su cuenta de Instagram Theisraelvidal.
Además, cuenta con una página web en la que habla de él y muestra otras facetas de su producción, entre ellas ilustraciones sobre distintos temas y personajes que ha creado.
El salvadoreño reconoce y está agradecido con Dios porque ha podido avanzar poco a poco en distintos ámbitos de su vida gracias a que tuvo una red de apoyo constituida por sus padres y hermano menor, y sostiene que es importante que todas las personas cuenten con este tipo de acompañamiento, sin importar género, estatus económico, orientación sexual, estado físico o cualquier otra diferencia.
“Esa red de apoyo empieza con la tolerancia, la aceptación y el amor, y aquí reivindico lo que dije al inicio (de la entrevista), siempre voy a estar a favor del amor”, puntualizó.
Vidal, quien fue paciente de Funter, dijo que en la sociedad hay una tendencia a encasillar, estigmatizar, a las personas con discapacidad física, entre otros, pero a estas alturas se deben superar las brechas.
“Acá se habla de las famosas cuotas (en los empleos), una cuota de personas con discapacidad física, una cuota de mujeres. Eso es de ayer. Cuando empecemos a superar esas brechas todo va a ser por capacidad y visión de que podemos, porque todos podemos”, subrayó.
El joven considera que además de cambiar la visión sobre las personas con discapacidad se debe hacer un esfuerzo por generar, en los centros educativos públicos y privados, las condiciones de infraestructura para favorecer a las personas con problemas de movilidad.
“Yo tuve la suerte de estudiar en un centro educativo en donde no habían rampas para mi silla, (pero) ellos las hicieron por mí y estoy sumamente agradecido y siento que es un ejemplo que se debería seguir, porque hay muchos niños allá afuera, y lo digo por casos que conozco, que a veces no van a la escuela porque la infraestructura no está adecuada para ellos”, acotó.