Restaurantes, gimnasios, tiendas, cines y otros negocios han comenzado a cerrar parcial o totalmente con el fin de acatar las disposiciones del Gobierno para prevenir la propagación del coronavirus, pero sus ingresos se verán reducidos a medida que la situación se agrave.
Ayer se prohibieron las concentraciones de más de 50 personas.
Otras medidas dictadas por el Gobierno, como enviar a sus hogares a los empleados mayores de 60 años, mujeres embarazadas y colaboradores con enfermedades crónicas, también terminarán por impactar la economía, dijo ayer el presidente de ANEP, Luis Cardenal.
“Queremos que el impacto sea el menor posible. Por eso estamos haciendo sugerencias y críticas constructivas de cosas que se puedan mejora”, detalló.
Cardenal afirmó que como ANEP le han dado seguimiento a que las empresas asociadas cumplan con la ley y colaboren con lo que el Gobierno está solicitando.
Algunas empresas han comenzado a optar por el teletrabajo para mantener la productividad, pero otras dependen de la demanda, que se verá mermada por la petición estatal de quedarse en casa.
“Sí, tenemos que señalar que hay cosas que menciona el presidente en Twitter o en una conferencia de prensa que tienen cuestionamientos de legalidad que tienen que ser subsanados para que no tengamos problemas de cara al futuro”, destacó el empresario.
Según Cardenal, el presidente está autorizado para que se envíe a sus casas a las mujeres embarazadas y a los mayores de 60 años, pero no “tienen autoridad legal para obligar a que las empresas paguen salarios a las personas que mandan a la casa”, destacó.
“Estamos haciendo un llamado para que las personas colaboren de manera generosa y voluntaria, pero que quede claro que no es obligación de las empresas hacerlo, precisamente se declara incapacidad cuando mandan a alguien a su casa y esa incapacidad después del tercer día la debe pagar el Seguros Social y quiere trasladarle esa responsabilidad a las empresas”, destacó.
Agregó que como gremial le hacen un llamado a la empresa privada para que voluntariamente asuma de manera solidaria los costos de esa responsabilidad financiera.
Las empresas agremiadas a la Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas de El Salvador (CAMTEX) emitieron un comunicado en el que afirman que han acatado la medida de enviar a los colaboradores mayores de 60 años, mujeres en estado de embarazo, así como colaboradores con insuficiencia renal y afecciones cardíacas serias, a sus hogares, en cumplimiento con las acciones laborales anunciadas por el Gobierno.
“Como industria nos mantenemos pendientes de las medidas que se impulsan desde el Gobierno de la República y confiamos que lograremos salir adelante como país”, enfatizaron en el escrito.
La Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) tienen 10 días de estar haciendo practicas de contingencia con medidas como el teletrabajo, por ejemplo, mencionó el director ejecutivo de la gremial, Federico Hernández.
“Ya muchas empresas están haciendo esto. Aparte les dijimos que tenían que crear un mapa de riesgo dentro de las empresas”, destacó Hernández. Explicó que aún es temprano para saber qué porcentaje está trabajando bajo esta modalidad.
El ministro de Trabajo, Rolando Castro, afirmó ayer que sancionará a las empresas que no cumplan con la medida. Señaló que están verificando cada empresa y puso a disposición el teléfono de la institución para recibir denuncias.
Hernández dijo que habría que corroborar las denuncias. “Me parece muy bien que existan mecanismos de denuncia y primero hay que verificar que esas denuncias sean reales”.