Fusalmo: 18 años de brindar conocimientos en sana convivencia

La Fundación Salvador del Mundo (Fusalmo), con pensamiento salesiano, nació para dar un espacio a la juventud del país para que tuviera un lugar donde practicar deportes; con el tiempo, añadieron a su labor el aporte de conocimientos que vienen a complementar los estudios que los menores realizan en las escuelas.

La competencia organizada por First Global Challenge reúne a jóvenes de todo el mundo. Los salvadoreños necesitan 15,000 para boletos aéreos y 2,500 para alojamientos. Video: Jonathan Tobias.

Por Violeta Rivas

2019-09-28 8:50:08

La Fundación Salvador del Mundo (Fusalmo), que nació en agosto del 2001, realiza una labor humanitaria al brindarle a niños y jóvenes del país un espacio para el deporte, la sana convivencia, además de educación con estudios que vienen a complementar lo que los menores reciben en los centros educativos.

El padre Alfonso Evertsz, presidente de Fusalmo, explicó que fueron empresarios del país los que impulsaron el proyecto de los polideportivos, el cual inició en la plaza España, en Soyapango; el apoyo fue tanto económico como en las gestiones para que se hiciera realidad.

El principal objetivo era beneficiar a los estudiantes de los centros escolares públicos, de las tres zonas del país con mayor población, en donde hubiera niños y jóvenes en riesgo y como prevenir de la violencia. Con esas características, los municipios seleccionado fueron: Soyapango, Santa Ana y San Miguel.

El sacerdote expone que el proyecto comenzó en el 2001, las gestiones iniciaron en el 2003 y se concretizó en el 2005.

“Desde el 2005 hemos estado a todo vapor con el trabajo con los niños y con los jóvenes en Fusalmo, que entre las tres sedes, de barato, vienen 5,000 semanalmente. Acá (complejo España) en dos turnos (diurno y vespertino) vienen unos 300 alumnos cada día, aunque la cantidad cambia dependiendo de los centros escolares que asisten”, dijo el sacerdote.

Añadió que la idea inició de un proyecto similar que existe en España, y bajo la iniciativa del Gobierno salvadoreño de ese momento, que se interesó en los polideportivos con objetivo educativo, comenzaron a realizarlo.

En Soyapango, los días de semana asisten más de 1,500 niños y jóvenes a las clases, en dos turnos.

El proyectos está compuesto de cuatro ejes educativos que son deporte, computación, valores y el trabajo de prevención de violencia.

La jornada diaria en los complejos comienza desde la llegada de los buses, en los que se transportan los estudiantes, quienes se dirigen a los salones de clases, donde reciben computación, robótica, cultura de paz, como complemento a sus estudios en los centros escolares; o a las canchas donde los maestros les dan orientación y luego practican las diferentes ramas deportivas, entre estas basquetbol.

“La cultura de paz, que es interactuar entre ellos, es tan significativa porque cuando comenzamos los estudiantes de entre una escuela y otra no se podían ver, estaba esa cultura de ‘somos enemigos’;, después, en el trayecto del va y viene los chicos entendieron que por qué iban a poner fronteras. Ahora los polideportivos se han convertido en una especie de oasis”, expresó el padre Evertsz.

El religioso manifestó que los estudiantes encuentran otro ambiente en los polideportivos, los jóvenes han manifestado que existe un contraste entre sus lugares de residencia con las instalaciones de Fusalmo, donde encuentran un lugar amplio y ventilado en donde pueden correr, gritar, saltar, compartir y hacer deporte, “es como oxigenar su corazón”, opinó el sacerdote.

Una de las materias que reciben los alumnos es robótica.

Juan Carlos Guerrero, gerente de Tecnología e Innovación de Fusalmo, expuso que la entidad es una apuesta para mejorar el aprendizaje de los estudiantes de los sectores donde se encuentra la fundación, principalmente las habilidades del siglo XXI, como la colaboración, el trabajo en equipo, las relaciones interpersonales, resolución de problemas y pensamiento crítico con un enfoque llamado Steam, donde impulsan la tecnología, ingeniería, arte y matemáticas.

“Estos laboratorios, donde los jóvenes reciben las clases, son conocidos como Steam Plus Lab. Plus porque nosotros, como institución salesiana, lo que buscamos es desarrollar los valores humanos en la niñez y juventud que son atendidos acá, son alrededor de 10 escuelas de Soyapango que vienen acá, y en horario sabatino también vienen jóvenes de las comunidades que pertenecen a los clubes tecnológicos de la fundación”, dijo el docente.

De los 10 centros escolares públicos es un aproximado de 1,500 menores, entre 10 y 18 años, los que asisten a recibir las distintas clases en dos turnos, desde las 7:30 a.m. hasta las 11:30 a.m., de lunes a viernes; y por la tarde de 1:30 p.m. a 4:45 p.m., donde atienden a menores desde los 5 años hasta 20 años.

Los alumnos aprenden, en la aulas Steam Plus Lab, a desarrollar software, robótica, diseño gráfico, trabajo en equipo, resolución de problemas, ciencias, refuerzo para matemáticas, arte, ingeniería e inventiva, donde realizan experimentos donde pueden poner en práctica su creatividad.

Un factor determinante en los centros de Fusalmo, dijo el padre Evertsz, es el apoyo de los docentes de los centros escolares a donde asisten los alumnos de Fusalmo, ya que ven a la fundación como un aliado, donde los mismos profesores han recibido capacitación en informática en sus instalaciones.

“Para nosotros, los salesianos, todo lo que hacemos es en función de los jóvenes. Los salesianos tenemos el mayor número de obras acá porque El Salvador es muy proactivo, y sobretodo, los bienhechores con los que contamos siempre han dado un sí a nuestro qué hacer educativo, por una parte; y por otra, el condimento salesiano es el deporte y la música. Con el tiempo fuimos descubriendo que el motor o la ruta para tener éxito con ellos (niños y jóvenes) es captar cuáles son sus necesidades”, declaró el sacerdote.

Los alumnos reciben clases complementarias a sus estudios, y aprender a convivir con estudiantes de otros centros escolares.

Agregó que cada año visualizan cuáles son las necesidades de los estudiantes y tratan de solventarlas, por ejemplo los jóvenes que terminan su noveno grado, Fusalmo tiene como labor el prepararlos para el mundo laboral.

En cuanto a las necesidades de la entidad, el padre Evertsz comentó que esperan poder pasar a utilizar paneles solares, ya que el consumo de energía eléctrica es alto y la fundación no tiene ingresos de parte del Gobierno, sino solo a través de prestaciones de servicios que realizan las gerencias, participando en licitaciones, de ahí es donde reciben ingresos económicos para poder solventar las necesidades anuales.

“Si alguna persona quiere colaborar, pues bienvenido, e incluso pueden venir y ver el trabajo que se realiza y apoyar en lo que puedan”, dijo el padre Evertsz.

Estudiantes de Fusalmo necesitan ayuda para competencia de robótica que se realizará en Dubái

Por segundo año consecutivo Fusalmo ha sido invitada a la competencia mundial organizada por First Globlal Challenge, institución que impulsa la robótica a nivel mundial, y este año esperan poder viajar a Dubái con una delegación de cinco estudiantes para poder participar.

“Requerimos financiamiento para el alojamiento y para los vuelos, una parte lo han entregado los organizadores, pero estamos en la búsqueda de donantes, porque necesitamos $15,000 para los vuelos y $2,500 para alojamiento”, dijo Juan Carlos Guerrero, gerente de Tecnología e Innovación de Fusalmo. La actividad será del 21 al 28 de octubre.