Bukele habla de “enemigos internos y externos” ante la Fuerza Armada

Defensores de derechos humanos y abogados cuestionaron las declaraciones.

El presidente Nayib Bukele elogió a la Fuerza Armada, este 7 de mayo en la celebración del Día del Soldado, y le agradeció por "salvar a nuestra patria de los enemigos externos e internos"

Por Karla Arévalo

2021-05-08 8:14:42

Tras recibir críticas de organizaciones nacionales e internacionales, y de gobiernos en el mundo por la destitución de magistrados y del fiscal general, en el Día del Soldado, Nayib Bukele agradeció al ejército salvadoreño por proteger al país de los “enemigos internos y externos”.

La expresión no ha sido bien vista en el entorno de abogados y defensores de derechos humanos. “¿Acaso es una instrucción para volver objetivo de inteligencia militar a las voces críticas del Gobierno?”, criticó el exprocurador de Derechos Humanos, David Morales.

“Como Comandante General, y en nombre del pueblo salvadoreño que represento como presidente, quiero reiterar nuestro agradecimiento por ayudar a salvar a nuestra patria de los enemigos externos e internos”, dijo Bukele durante el evento en el que se conmemoró el 197º aniversario de la fundación de la Fuerza Armada.

Te puede interesar: ¿Qué perdieron los ciudadanos y el país a partir del 1 de mayo?

Aunque el evento fue grabado en video, la cuenta de Twitter de Casa Presidencial también compartió algunas frases del mandatario. Una de ellas decía: “Los ataques ahora no son externos, ahora son internos, de una minoría que tiene envidia…”. Horas después esta frase fue eliminada de la red social.

En su discurso, Bukele no aclaró quiénes eran esos enemigos ni las razones por las que los llama así.

El padre José María Tojeira, director del Instituto de Derechos Humanos de la UCA (IDHUCA), reaccionó ante las declaraciones del mandatario y dijo que opinar diferente no convierte en “enemigos” a quienes así piensan. “En democracia la crítica no convierte a nadie en enemigo interno. Las diferencias no deben obstruir ni el diálogo constructivo ni la amistad social”.

Bukele ha estado en la mira de la comunidad internacional tras los hechos ocurridos el 1 de mayo, cuando una Asamblea unísona a los lineamientos del Ejecutivo, destituyó a cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional y el Fiscal General.

Lee también: Cortes iberoamericanas rechazan destituciones de magistrados de Sala

Por su parte el abogado del IDHUCA, Manuel Escalante, considera que “si los funcionarios de arriba se sienten intocables, los de abajo van tomando esa misma actitud. Pensemos en los policías en las calles con los jóvenes o la gente que está en ventanilla atendiendo. Ahí estamos perdiendo seguridad jurídica y, segundo, perdemos garantica judicial”.

No es la primera vez que Bukele exalta a la Fuerza Armada en sus discursos. Incluso la utilizó para invadir la Asamblea Legislativa el 9 de febrero de 2020.

Gobiernos vigilantes
En la comunidad internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de los Estados Americanos (OEA) y los gobiernos de Estados Unidos, Alemania, Canadá e incluso la Unión Europea han sido solo algunos de los que se pronunciaron ante lo que llamaron un “rompimiento del orden democrático” en El Salvador.

Pero Bukele les respondió: “Estamos limpiando nuestra casa. Y eso no es de su incumbencia”.

Bukele invitó luego, a una reunión a Casa Presidencial a los embajadores y jefes de misiones diplomáticas, encuentro al que no se presentó ningún representante del gobierno estadounidense, y les aclaró que la forma de gobierno que había iniciado iba a continuar, pues el país “necesitaba esos cambios”.

También: Magistrado Avilés: “Tenía una renuncia redactada para mí y me dijo la firmara porque era lo que más convenía”
Pero la condena internacional no para, y el tono ha ido subiendo cada vez más. Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos, dijo que su gobierno “debía responder” ante el hecho.

Mientras en el país, más de 30 organizaciones que velan por el Estado de Derecho han condenado la forma en que el gobierno destituyó a los magistrados. Ven en ello un gobierno autocrático y el riesgo de que este limite libertades ciudadanas.