Fallece monseñor León Kalenga, ex nuncio apostólico en El Salvador

El embajador del Vaticano en Argentina era tratado en Roma, por una enfermedad. Fue Nuncio Apostólico en El Salvador durante cinco años y durante ese tiempo tuvo un papel importante en la beatificación y canonización de San Óscar Romero.

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Foto EDH / Archivo

Por Violeta Rivas

2019-06-13 4:30:47

Monseñor León Kalenga Badikebele falleció, ayer, en Roma, a los 62 años de edad, informó monseñor Rafael Urrutia, canciller de la Iglesia Católica de El Salvador, a través de un comunicado al clero, publicado en redes sociales del Arzobispado en San Salvador.

Kalenga tenía el cargo de embajador del Vaticano en Argentina, a partir de junio del 2018, luego de finalizar su periodo como Nuncio Apostólico en El Salvador, cargo que tuvo desde el 2013.

El religioso falleció en la clínica Pío XI, de Roma, donde a mediados de mayo fue intervenido sin éxito, para revertir un cuadro grave que atravesaba por una enfermedad.

Monseñor Rafael Urrutia manifestó en su comunicado que por instrucciones del arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, informaba sobre el deceso de Kalenga e invitaba a todas las comunidades parroquiales a ofrecer misas y oraciones por su eterno descanso.

“Pidamos a Dios que Jesús, el Buen Pastor, lo conduzca sobre sus hombros hasta la casa del Padre, y que desde allá interceda junto a San Óscar Romero por la paz del mundo y por la fidelidad de la iglesia que tanto amó”, se expone en el comunicado de monseñor Urrutia.

Por medio de una llamada telefónica monseñor Urrutia dijo, a El Diario de Hoy, que monseñor Kalenga jugó un papel preponderante en el proceso de beatificación y de canonización de San Óscar Romero.

“Sobre todo en la etapa final de ambos (beatificación y canonización), él estuvo muy activo animando, orientando, aclarando pero sobre todo intentando que se diese la canonización por a quien él no solo sentía como un hermano en el episcopado, sino también un santo, un mártir que dio la vida por este pueblo”, dijo monseñor Urrutia.

El canciller de la Iglesia Católica dijo, en su misiva, que la pascua que ha vivido monseñor Kalenga sea para todos una invitación a la conversión, a agradecer a Dios por su vida y su servicio a la iglesia, particularmente a la de El Salvador, y a la Beatificación y Canonización de San Óscar Romero.

La Nunciatura Apostólica de Buenos Aires, en Argentina, publicó un comunicado en el que manifestaba que monseñor Kalenga tuvo la oración del Santo Padre, los señores Nuncios Apostólicos convocados en Roma para reunirse con el Papa Francisco, familiares, seres queridos y, además, recibió los sacramentos de la iglesia como preparación para el encuentro con el Padre Celestial.

“Rogamos al Pueblo de Dios que peregrina en Argentina, al que monseñor León ha servido con entrega generosa y profundo amor de pastor, encomendar a la Virgen Santísima de Luján el alma del querido Señor Nuncio para que lo acompañe al encuentro con el Padre Celestial”, expone el documento.

Foto EDH / Archivo

Su vida y trayectoria

Monseñor Kalenga nació en 1956 en la República Democrática del Congo, en la ciudad de Kamina. Fue ordenado sacerdote el 5 de septiembre de 1982 y admitido en la Diócesis congoleña de Leubo.

Ingresó en el año 1988 en la Academia Pontificia Eclesiástica de Roma, donde se graduó en Derecho Canónico e ingresó al servicio diplomático de la Santa Sede el 27 de febrero de 1990.

Posteriormente fue enviado como funcionario a las nunciaturas apostólicas de Haití, Guatemala, Zambia, Brasil, Egipto, Zimbabue y Japón.

El 1 de marzo de 2008 fue designado Nuncio Apostólico en Ghana. El 22 de febrero de 2013 fue trasladado a la nunciatura en El Salvador y el 13 de abril del mismo año en Belice, con residencia en El Salvador.

Fue nombrado Nuncio Apostólico en la Argentina por el Papa Francisco el 17 de marzo de 2018 y llegó a la Argentina el 21 de junio de 2018.

Al recibir el nombramiento para servir en Argentina, luego de cinco años en El Salvador, Kalenga manifestó su alegría al dejar una nación con un cardenal (Gregorio Rosa Chávez) y un santo (Óscar Arnulfo Romero).