Revisar el salario asignado al personal de agentes policiales con respecto a la jornada laboral establecida por medio de los distintos turnos a fin de procurar que el salario y la jornada laboral sean dignos y correspondan al valor del trabajo que realizan y que sea compatible con la vida familiar. Esa es una de las recomendaciones que surgen de un estudio realizado por la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas sobre las condiciones en que trabajan los policías salvadoreños.
Invertir en el equipo y herramientas para proteger de peligros y de riesgos al personal policial como chalecos antibalas, lentes de protección, casco y body cams entre otros, también sugiere la universidad a través de un informe elaborado por el Instituto de Derechos Humanos (Idhuca).
El estudio reveló una serie de deficiencias que no permite que los policías puedan desempeñar su labor de la mejor manera.
Más de 900 policías fueron consultados a través de una encuesta sobre las condiciones en las que ejercen sus labores de seguridad pública. El 58 por ciento de los encuestados fueron hombres y el otro 42 por ciento fueron mujeres.
Entre las deficiencias que reveló el estudio se destaca que los policías luchan contra la inseguridad habitacional, ya sea por los pocos recursos económicos y por los riesgos a los que se enfrentan con sus familias en los sitios donde residen. El 50 por ciento de los policías entrevistados aseguró que alquilaban la casa o vivían en la vivienda de algún familiar.
Con respecto al salario mensual y sobresueldos, el 49 por ciento de los policías encuestados aseguró que ganan el salario base mensual de un agente que tiene menos de cuatro años de servicio ($424 al mes). Lo anterior contrasta con el 12 por ciento de los agentes encuestados que tiene menos de cuatro años de haber ingresado a la corporación policial.
El escalafón salarial de la Policía establece que cada cuatro años el personal policial tendrá un aumento del seis por ciento del último salario devengado.
En la encuesta, el 85.5 por ciento de los agentes de la escala básica encuestados aseguraron que ellos no reciben sobresueldos, que es la cantidad de dinero extra al salario que se le entrega al policía como incentivo al trabajo realizado. Lo contrario sucede con los oficiales de los niveles ejecutivo y superior.
El 85 por ciento de los policías del nivel ejecutivo aseguró que reciben sobresueldo y el 100 por ciento de los oficiales del nivel superior también dijeron que reciben ese incentivo económico.
Otras deficiencias
La mayoría de los encuestados aseguró que no se les suministra equipo de protección como, por ejemplo, el uso de body cams, que es una herramienta esencial (cámara portátil) que tiene una doble función: le sirve a la Policía para demostrar cómo actuó en un procedimiento policial y poder desvirtuar posibles acusaciones. También le sirve como prueba de la población para demostrar una posible mala actuación policial en una intervención.
Otras de las deficiencias halladas por el estudio es que la corporación policial ofrece 25 prestaciones laborales a los policías, pero la mayoría de estos solo conoce el 20 por ciento de las misma, porque no existe una campaña de difusión por parte de las autoridades.
Además se constató que las condiciones de infraestructura, espacios de descanso, y flota vehicular son insuficientes. Los inmuebles que funcionan como delegaciones y puestos policiales no cumplen con las condiciones y los requisitos de ley para el desarrollo de las tareas de seguridad pública.
A eso se suma, según los consultados, que la mayoría de la flota vehicular con la cuenta la corporación policial se encuentra en mal estado o inservible.
El secretario general del Movimiento de los Trabajadores de la Policía (MTP), Marvin Reyes, aseguró que el estudio coincide con todo lo que siempre han denunciado. “Las bases están sometidas a una situación de abandono desde hace muchos años”, dijo Reyes.
Agregó que las recomendaciones formuladas en el estudio se tienen que tomar en cuenta “para corregirse lo que se tiene que corregir, debe de trascender para que el policía tenga una vida digna”.
El estudio de la UCA sugiere por tanto mejorar o reparar la infraestructura, el mobiliario de oficina, equipo informático y la flota vehicular, ya que son recursos esenciales para que la Policía cumpla de manera eficiente, diligente y eficaz con sus funciones.
También destaca la necesidad de promover la carrera policial entre la población femenina, con el propósito de aumentar y nivelar el número de mujeres policías con relación a los hombres. Adoptar las medidas necesarias para prevenir, sancionar y erradicar la violencia en contra de la mujer en la corporación policial.
También reveló otro dato importante y es que el número de psicólogos resulta insuficiente para poder atender las necesidades de salud mental del personal policial.