El Real Madrid cambió el chip

Después del lamentable partido ante el Rayo Vallecano, los merengues ganaron ayer 3-2 al Villarreal, que se complica con la permanencia

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El centrocampista del Real Madrid Brahim Díaz (i), ante el defensa del Villarreal ??lvaro González (d), durante el partido de LaLiga que se disputó en el estadio Santiago Bernabéu, en Madrid. / Foto Por EFE/Rodrigo Jiménez

Por Agencia EFE / Wilfredo Hernández

2019-05-06 4:00:46

Dos goles del hispano-dominicano Mariano Díaz cambiaron ayer la imagen del Real Madrid, como pidió Zinedine Zidane, ante un Villarreal que tendrá que esperar hasta el final para sellar su permanencia.

El madridismo no está para poblar las gradas de su estadio. La decepción de un curso repleto de sufrimiento propició la entrada más pobre de toda la temporada.

Dos errores calcados marcaron el inicio. Extraño ver excesos de confianza en jugadores de la experiencia de Cazorla y Casemiro. A los dos les robaron la cartera en la zona de castigo para el medio centro.

Era el minuto 2 cuando la presión de Brahim dejó a Mariano la oportunidad deseada y definió con delicadeza a la red. El 1-1 llegó cuando el balón le cayó a Gerard Moreno, que firmó un zurdazo a la escuadra, inalcanzable para un Courtois.

El Real Madrid jugó con un ritmo mayor. Robó y corrió. Fue directo. Pudo aumentar su ventaja con otra ocasión de Mariano y un disparo cruzado de Lucas Vázquez en jugadas que nacieron de un Kroos que dominó desde la medular. Pero le llegó el castigo del empate de un Gerard que había avisado tras un córner con un disparo a la grada que no rebajó su confianza.

El delantero del Real Madrid, Mariano (R) compite con el portero del Villarreal, Andrés Fernández se acerca durante el partido de la liga española entre el Real Madrid CF y el Villarreal CF en el estadio Santiago Bernabeu el 5 de mayo de 2019. AFP / Javier Soriano

El Villarreal buscaba un punto que le acercase a la permanencia. Está a un paso aún por culpa de su inestabilidad defensiva. Le generan peligro con poco. Los acercamientos del Real Madrid siempre acabaron en llegadas ante Andrés Fernández, salvado por un poste en un derechazo precioso desde la frontal de Carvajal y firme ante disparos de Brahim, Kroos y Marcelo.

Vallejo marcó su primer gol de blanco, al 40’, y se llevó una alegría en una temporada casi sin minutos.

El guión se repitió en el segundo acto. Nuevamente Carvajal puso el tanto en bandeja a Mariano, quien definió de derecha.

Los intentos de Samu se sucedieron para devolver la vida a un partido que rebajó su interés hasta la irrupción del esperado Vinicius.

También le esperan grandes duelos a Brahim, que jugó con personalidad y dejó un regate eléctrico de tacón, en una acción que habría sido un gol para enmarcar si no llega a ser por una parada de balonmano con un pie de Andrés.

Parecía muerto el partido cuando en el 94’ llegó un gran disparo de Jaume Costa tras una asistencia de Gerard que puso emoción a los últimos segundos.