El fallo condenatorio en contra de tres policías y una comerciante le servirá al abogado, José Rolando Aparicio, para solicitar que su defendido, Eugenio Mancía Ramos pueda gozar por lo menos de libertad condicional o que pueda movilizarse con un brazalete electrónico.
“Aún no ha cumplido la mitad de la pena, pero vamos a pedir la revisión de la misma para que le puedan dar medidas alternas a la detención, mientras se declara firme la sentencia de los policías y la señora”, dijo Aparicio. La intención del abogado es que Mancía ya no siga detenido injustamente.
En la condena se establece que los policías y la comerciante fueron declarados culpables del delito de fraude procesal en perjuicio de la administración pública, pero de manera subsidiaria en contra de Mancía Ramos.
Eso significa que abre la posibilidad, según Aparicio, para pedir una indemnización económica por daños y perjuicios en contra del comerciante por parte del Estado.
En ese sentido, el abogado Aparicio aseguró que por el momento no tiene definida la cifra de dinero que podría solicitar, pero no descartó de que sea una suma millonaria.
“Los policías actuaron en su carácter de agentes de la autoridad, ellos tuvieron que haber protegido a la víctima y no lo hicieron, por lo que el Estado tiene que indemnizar al señor Mancía”, dijo Aparicio.
Aseguró que en cuanto tenga el fallo por escrito, comenzará a trabajar en la petición de revisión de la pena impuesta a Mancía para que este ya no siga detenido.
Para la familia del comerciante afectado, esa situación les ha perjudicado el negocio de gallinas que tenían, porque Mancía era el responsable de la distribución en Caluco y en otros municipios. Después de su arresto, la venta de gallinas decayó, según su esposa.
“Mi esposo está condenado, mi esposo está pagando por algo que no debe, mientras ellos andan afuera y la señora anda afuera”, dijo la señora y recriminó por lo que ella considera la falta de una verdadera justicia. “¿Por qué tanta injusticia? ¿Porque la justicia ahora no es justicia, es injusticia?”, dijo la esposa en su momento.
Mancía Ramos fue arrestado por dos de los tres policías condenados en las cercanías del turicentro Shutecat, cantón Agua Caliente de Caluco, Sonsonate. El arresto fue el 18 de abril de 2017.
En su momento, Mancía Ramos fue acusado de extorsionar con 40 dólares a una víctima protegida, pero que resultó ser la comerciante, Rosalina Zepeda Sánchez, condenada a seis años de prisión.
El investigador Luis Alonso Santos, aseguró que él recibió el aviso de parte de los dos agentes de que tenían a una persona que había sido capturada al momento de recoger el dinero de la extorsión.