De barrer y trapear en la radio, a representante de El Salvador en Congreso Internacional de la Voz

El locutor Rubén Chiguila fue el único salvadoreño que participó en el evento realizado en la Ciudad de México, el cual reunió a los mejores talentos de la locución y el doblaje a nivel latinoamericano.

descripción de la imagen
El joven salvadoreño de 30 años es locutor de Radio María en la actualidad. Foto EDH / Cortesía Rubén Chiguila

Por Rosemarié Mixco

2019-10-28 8:30:12

El único. Rubén Chiguila, de 30 años, fue el único salvadoreño presente en el “Voice Masters. Congreso Internacional de la Voz 2019”, realizado en la Ciudad de México del 18 al 20 de octubre.

El evento reunió a locutores y actores de doblaje de 21 países con grandes talentos de la industria latinoamericana.
“Gracias a Dios me tocó representar a mi país… Me decían: ‘¡Salvadoreño, buenísimo! Hay talento’. Fue muy gratificante”, afirmó el joven productor y locutor de Radio María, que comenzó sus andanzas por la locución hace ya 14 años.

Su aventura con los micrófonos inició en su natal Ahuachapán, en donde laboró en cinco radios antes de probar suerte en dos canales de televisión santanecos.

“Fue a los 16 años que comencé a luchar por mi sueño”, recordó el licenciado en Educación Social por la Universidad Panamericana. Pero desde que cursaba tercer grado, a los 10 años, tenía muy claro que “cuando grande” sería locutor.

El compatriota extendiendo la bandera de El Salvador en México. Foto EDH / Cortesía Rubén Chiguila

“La maestra nos preguntó que queríamos ser cuando grandes en la vida, yo levanté la mano y dije que quería ser locutor, y a todos les dio risa”, rememoró el también dj.

Ese deseo por locutar y programar música lo empujó a probar suerte en una emisora que funcionaba cerca de la casa donde creció junto a su madre y su hermano. Consciente de su enorme entusiasmo, su progenitora conversó con el director de la radio y Rubén logró una oportunidad para aprender.

“Pero cuando llegué me dijeron: ‘La escoba y el trapeador serán tus mejores amigos’. Y pasé seis meses haciendo la limpieza”, confesó Chiguila. Además de ser el responsable de la limpieza, se convirtió en el joven de los mandados.

Durante ese tiempo, nunca tuvo la oportunidad de practicar en la cabina, pero su sueño de locutar lo animó a seguir adelante. A semanas de estar a punto de “tirar la toalla”, llegó la propuesta más esperada.

“Uno de los locutores se retiró y en ese momento el director me preguntó si quería aprender. Yo le dije: ‘Obvio, para eso estoy aquí’”.

La respectiva selfi con los colegas, en el congreso. Foto EDH / Cortesía Rubén Chiguila

Durante ocho meses, el ahuachapaneco alternó sus agotadores turnos de práctica con sus clases de bachillerato, hasta que las autoridades del centro escolar citaron a su madre. “La llamaron para decirle que me dormía al fondo del salón”, manifestó.

Su mamá tuvo que obligarlo a escoger entre trabajar o estudiar, y con tristeza Chiguila decidió seguir sus estudios académicos.

Después de graduarse, las oportunidades de trabajo llegaron una a una hasta que se trasladó a SanSalvador para estudiar locución. Para pagar sus cursos tuvo que vender sus consolas de videojuego, pero valió la pena.

En 2019, no solo representó al país en el evento internacional, sino que logró llamar la atención con su talento y obtuvo propuestas para doblar en México y EE. UU.

Ahora, entre sus proyectos a mediano y largo plazo está viajar a México para seguir su carrera de actor de doblaje, profesión que llegó a su vida a través de YouTube, en donde conoció el trabajo realizado por el salvadoreño Otto Salamanca, en cuya academia ganó una beca de estudio.

El joven locutor con el artista colombiano Ricardo Figueroa, voz oficial de TNT para Latinoamérica. Foto EDH / Cortesía Rubén Chiguila

También tiene en el horizonte probar suerte en los EE. UU., junto a un amigo productor. Y, si Dios se lo permite, sueña con abrir una academia y un estudio en su tierra natal, El Salvador.