La cuarentena domiciliar impuesta en El Salvador ha obligado al párroco de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción, padre Oseas Borja, y al mago Mario Sierra, ambos de Ahuachapán, a hacer uso de la tecnología para llevar momentos de comunión con Dios y alegría, respectivamente; aunque reconocen que lo más difícil es no tener el acercamiento con la población, algo que es indispensable en sus áreas.
El párroco, junto a otros sacerdotes, realizan transmisiones en Facebook para emitir misas y el Santo Rosario; y Sierra, a través de Instagram, entretiene a las personas, e incluso invita a magos de otros países.
Ambos están a favor de las medidas impuestas por las autoridades para evitar la propagación de la pandemia del coronavirus.
“Es una situación que nos afecta a todos; se siente bien extraño no contar con nuestros feligreses, no tenerlos en nuestro templo parroquial, que no vengan a la eucaristía los domingos nos afecta bastante. Se siente extraño celebrar las misas sin ningún público. Lo que hemos estado haciendo es tratando de no dejar a nuestra gente sola, tratando de comunicarnos con ellos y han respondido muy bien”, expresó el sacerdote.
El templo se encuentra cerrado ya que reconoció que muchas personas, principalmente adultos mayores, llegan debido a su fe; además, en su página de la red social, donde aparecen como Parroquia Nuestra Señora de la Asunción, colocan mensajes para darle aliento a la población ante la situación que actualmente se vive a nivel mundial.
El padre señaló que el uso de la tecnología está favoreciendo el acercamiento con la población ante la situación actual, aunque reconoció que uno de los aspectos negativos son las noticias falsas que circulan, principalmente, en las redes sociales.
Mientras que Sierra contó que, como al resto de artistas, se le cancelaron varios eventos que tenía programados; pero reflexiona que “viene algo mejor” a pesar de que no están teniendo ingresos económicos.
El ahuachapaneco aprendió magia por sus propios medios, incluso buscando tutoriales en Internet, porque en el país no existe una escuela de magia.
Por la situación de emergencia, actualmente brinda clases online a seis jóvenes de escasos recursos que son beneficiados por la entidad Magos Sin Frontera, a la que Sierra pertenece.
El grupo normalmente recibe las clases en el Centro Juvenil El Salvador Corea, ubicado en la colonia El Nopal, de la cabecera departamental.
“Lo que más me ha afectado a mí es poder hacer sonreír a las personas porque no se puede salir, entonces desde casa es más difícil, por ahí va la cosa, no poder mostrar algo que realmente nosotros, los que nos dedicamos a regalar sonrisas, lo podamos estar haciendo”, expresó el ahuachapaneco.
Pese a esa limitante, muchas personas que se conectan a sus transmisiones envían mensajes de asombro ante la magia que él y sus invitados realizan.