A cada médico se le hicieron dos preguntas, las cuales se detallan a continuación:
1. ¿Cómo han contrarrestado la discriminación que ejerce la población hacia los profesionales de salud, motivados por el temor al contagio?
2. Desde su perspectiva frente a la pandemia ¿por qué es importante cuidar al personal que trabaja en los hospitales desde el que limpia hasta el médico especialista?
Doctor Rodrigo Molina
Anestesiólogo y médico de cuidados críticos.
Vive desde hace 10 años en Madrid, España
Respuesta a pregunta 1
Afortunadamente no he sufrido directamente discriminación; sí que lo he sufrido desde el punto de vista global, por pintadas que hemos encontrado, algunas notas anónimas que llegamos a leer, manifestación a través de redes sociales que nos llegan y por situaciones de compañeros médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería, o allegados que sí han sufrido un ataque mucho más directo.
Aquí , cuando esto empezó, la población se sensibilizó bastante y nació una iniciativa que todos los días a las 8:00 de la tarde se aplaude a los sanitarios y a todos los empleadores de servicios básicos que están contribuyendo para mantener a flote el país. Es un bálsamo escuchar esos aplausos. Los primeros días se nos erizaba la piel.
En Madrid vivimos muchos en apartamentos y hemos encontrado notas anónimas dándonos advertencia que no usemos los elevadores, que seamos conscientes. Nosotros estamos conscientes de que como sanitarios y tratando a tantos pacientes con coronavirus somos vectores y podemos ser una fuente de contagio para nuestras propias familias, todas las personas que viven en la comunidad; y es algo bastante difícil, una situación que se vive con una culpa muy grande sobre todo las primeras semanas. Hemos tenido otro tipo de soporte social con los servicios de psiquiatría de los hospitales, iniciativas de psiquiatras privados, de psicólogos y otros profesionales de la salud mental que nos han ayudado a llevar esto un poco mejor, para hacer una especie de catarsis o descarga de los problemas que vamos teniendo, no solo con el trauma que tiene que ver con atender a nuestros pacientes sino con la discriminación.
El saber que la mayor parte de la población es consciente del esfuerzo que se hace es algo que ayuda mucho. Se han abierto muchas apps de gente voluntaria que preparan alimentación u otro tipo de enseres, para que los que estamos trabajando podamos acudir, esto por si no tenemos tiempo de prepararnos ni siquiera nuestras propias comidas. Es una iniciativa muy altruista, muy bonita y llena mucho saber que la gente está ahí ofreciendo un plato de comida caliente para aquel que está 24 o 36 horas en un hospital exponiéndose y puede ser objeto de esta discriminación.
En el fondo sabemos que mucha de la discriminación puede estar motivada por el miedo y por eso intentamos ser más fuertes, fijarnos en la parte buena, el apoyo de nuestras familias y el de las iniciativas altruistas y que sin duda son un motor para día a día ir a hacer estas jornadas tan largas de trabajo.
Respuesta a pregunta 2
Creo que es importantísimo concienciar a los gobiernos centrales, en este caso al de El Salvador, a las organizaciones y a quienes llevan los centros privados, de que todos los que estamos ahí somos los engranajes para hacer funcionar esto, desde el que está limpiando porque es necesario desinfectar los huequitos y las habitaciones en donde se van colocando a estos pacientes, para que luego llegue otro con coronavirus o ingrese otro con otras enfermedades.
He visto iniciativas ya en El Salvador, aquí pasó también, que los hoteles brindaban la posibilidad de alojamiento para los sanitarios que estábamos en los hospitales, que no queríamos volver a casa por temor a contagiar a nuestras familias, y se ha hecho también servicios de medios de transporte para movilizar a la gente desde estos hoteles hasta su fuente de trabajo.
Si esto al final es lo más parecido que hay a una guerra biológica pues a los soldados que están en la primera línea hay que cuidarles, porque son los que van a estar al pie del cañón en todo momento, desde el que está tratando al enfermo hasta el que está preparando la comida en la cocina del hospital y que es lo que nos mantiene a lo largo de esos turnos que son psicológicamente muy cargados, con la capacidad de generar muchísimos traumas.
Es también importante concientizar a la gente, en este caso no a la población, sino al gobierno central y a las instituciones que pueden favorecer medios para que estas personas puedan llegar a su trabajo, en un medio de transporte en el que saben que si se van a subir no van a correr peligro por una discriminación de alguien que esté pensando que son un vector que les va a contagiar y pueda poner en peligro su integridad física.
En El Salvador esperemos primeramente Dios que esto no sea tan fuerte o tan intenso como ha sido aquí en España, o en otros países de Europa, Asia o Estados Unidos, pero si va a ser un periodo diferente que nos va a cambiar muchísimo la vida y sin duda hay que estar preparado para que los que van a enfrentar en primera línea a este enemigo biológico puedan tener la garantía, porque si no va a ser mucho más difícil.
Dr. José Gonzalo Batres – Baires
Médico intensivista,
en Alemania Ejerce en Múnich.
Respuesta a pregunta 1
En ningún momento de la pandemia ha existido discriminación al personal de salud. No conozco de ningún caso que se compare a lo que recientemente se escuchó del personal de enfermería en Los Planes de Renderos; ser expulsados del propio lugar de residencia.
Es inaceptable. En Alemania las autoridades y ciudadanía en general han insistido en la importancia del personal de salud en todas las áreas, a tal grado que desde el inicio de la crisis el gobierno federal de Baviera ha asumido los gastos de comida durante las horas de trabajo de todo el personal de salud.
Sumado a esto (acá) la empresa privada ha realizado diferentes promociones de apoyo a nosotros, por ejemplo hay una panadería muy conocida por acá que ofrece todos los días café, Brezel y una dona gratuitos a cualquier persona que presente su credencial de médico, paramédico, enfermera, etc. Las estaciones de servicio han regalado cupones de gasolina o consumo exclusivamente a profesionales de enfermería. En fin, el apoyo es unánime, a tal punto que ya se anunció una reforma en la tarifa salarial después de la crisis para todas las profesiones de salud.