Comerciante fue asesinado dentro de su casa en Aguilares minutos después de regresar de un culto evangélico

La esposa de la víctima dice que el 911 llegó media hora después de su llamada de auxilio, en la que insistió para que le mandaran una ambulancia.

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Los restos del comerciante serán sepultados este viernes por la tarde en el cementerio de Aguilares, según familiares de la víctima. Fotos EDH / óscar iraheta

Por Jorge Beltrán Luna

2019-09-12 9:45:27

Un comerciante de teléfonos celulares y accesorios para computadoras fue asesinado el miércoles anterior dentro de su propia casa. Al parecer, el o los asesinos se introdujeron a la vivienda mientras la víctima y su esposa asistían a una iglesia evangélica.

La víctima fue identificada como Douglas Vladimir Flamenco Perdomo, de 48 años. El crimen fue cometido aproximadamente a las 8:30 de la noche, en la colonia San Rafael, en la periferia norte de la ciudad de Aguilares, según informes policiales.

Flamenco Perdomo era muy conocido en Aguilares, de donde era originario y donde también desde hace muchos años atendía junto a su esposa, un negocio de telefonía celular.

Además de administrar su negocio Megacel, Flamenco Perdomo también dirigía una iglesia de nombre Sendas Antiguas, en el mismo municipio de Aguilares, según explicó su esposa, ayer durante la velación.

Douglas Vladimir Flamenco Perdomo, de 48 años, fue asesinado dentro de su casa minutos después de que regresara junto a su esposa de un culto en una iglesia evangélica. Foto Cortesía

No llegaron a auxiliarlo

De acuerdo con Lisseth, la esposa de Flamenco Perdomo, el crimen fue cometido minutos después de que al finalizar un culto evangélico, ambos regresaran a su casa.

La doliente recuerda que llegaron, estacionaron el auto y luego su esposo le pidió que le pelara unas naranjas, lo cual hizo y después se metió al baño.

Segundos después, ella recuerda que escuchó una detonación, seguida de un grito de su esposo.

Cuando salió del baño, el hombre estaba tendido en el piso, sangrando de la boca y la nariz. Asegura que no vio a nadie salir de a casa, aunque una puerta que da a la calle estaba abierta y escuchó ladrar a los perros, varios de la raza Chihuahua, inmediatamente después de la detonación.

El teléfono de la víctima, un Samsung S10 Plus, estaba cerca de él, lo tomó y marcó el 911 pidiendo auxilio.

La mujer recuerda que insistió en que le mandaran una ambulancia porque su marido estaba herido.

Sin embargo, la Policía llegó aproximadamente media hora después de que ella los llamara pidiendo auxilio. “Tal vez si lo hubiéramos llevado a un hospital hubiera sobrevivido”, comentó.

La viuda asegura que su esposo no habló nada, ella lo puso de lado en un intento de evitar que se asfixiara con su propia sangre y luego trató de resucitarlo aplicando respiración boca a boca, pero fue en vano el intento.

Antes que la policía, llegaron unos familiares pero cuando éstos llegaron, ya había muerto.

No descarta que haya sido por extorsión

Lisseth no descarta que el asesinato de su esposo esté vinculado a la extorsión, como se ha manejado en redes sociales.

Lo que sí es casi seguro es que no fue por robarle, pues el o los asesinos no se llevaron el teléfono celular que recién había comprado en un reconocido almacén y que le había costado más de mil dólares. El aparato se lo llevaron los policías, como parte de las evidencias halladas en la escena del crimen.

La familiar del comerciante recuerda que el martes anterior, durante un culto evangélico, su esposo se puso a llorar mucho. Ella le preguntó si le pasaba algo, pero le respondió que no le ocurría nada.

Luego, el miércoles, durante el día, lo vio como pensativo y triste. Le volvió a preguntar si le preocupaba algo, pero tampoco le quiso decir nada.

Lisseth asegura que su esposo no le comentó haber recibido alguna amenaza o que tuviera algún temor, aunque es posible que no lo hiciera para no preocuparla.

La viuda también afirma que su esposo nunca había tenido problemas de ningún tipo.

El único que recuerda fue que el año pasado, en julio, sufrieron un asalto en el negocio; el monto de lo robado fue de 70 mil dólares, pero aunque se denunció el caso, las autoridades no capturaron a nadie, por lo cual también descarta que el asesinato esté relacionado con ese caso. Flamenco Perdomo será sepultado hoy en la tarde en Aguilares.

Douglas Flamenco era comerciante y pastor de una iglesia en Aguilares. Fue asesinado en su casa situada en el mismo municipio. Foto EDH / Óscar Iraheta