Policía y Fuerza Armada en silencio por caso de triple homicidio en Cojutepeque

Ambas instituciones han callado ante el caso en el que un policía, un subinspector y un subteniente se mataron a balazos el pasado jueves.

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Lugar donde la madrugada del pasado jueves, un subteniente del Ejército, un subinspector y un agente policial se agarraron a balazos. Los tres murieron. Sucedió en la colonia Las Colinas, en Cojutepeque. Foto EDH / Archivo

Por Jorge Beltrán Luna @Jbeltranluna_

2020-12-25 9:00:08

La cúpula de la Policía Nacional Civil (PNC) como de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) han guardado silencio sobre el caso en que dos elementos policiales y un militar murieron luego de atacarse a balazos.

El subinspector Julio César Olivo Ortiz y el agente Miguel Antonio Hernández Mejía, murieron en la madrugada del jueves anterior, minutos después de resultar gravemente heridos tras ser atacados a balazos por el subteniente del Ejército, José Miguel Fuentes de la Cruz, destacado en la Sexta Brigada de Infantería, quien murió en el mismo instante, cuando los dos elementos policiales respondieron al ataque.

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El hecho sucedió aproximadamente a la 1:15 a.m. del 24 de diciembre, en la entrada a las instalaciones del Departamento de Investigaciones de la delegación policial de Cojutepeque, situada en la colonia Las Colinas, donde los dos elementos policiales estaban destacados como investigadores, según fuentes de este periódico.

Este viernes, El Diario de Hoy gestionó la versión institucional tanto de la PNC como de la FAES, sin obtener respuesta.

Los informes policiales preliminares indicaban que a la 1:25 del jueves, el subinspector y el agente policial estaban estacionando su vehículo frente a la sección de investigaciones de Cojutepeque, cuando un sujeto que les daba seguimiento en el vehículo placas P872-560, marca Nissan, se bajó del mismo y se dirigió a los dos elementos policiales originándose un intercambio de disparos.

El atacante quedó muerto en la escena, fuera del auto que conducía, mientras que el oficial y el agente fueron trasladados al hospital de Cojutepeque, donde falleció Olivo Ortiz. Por la gravedad de las lesiones, el agente Hernández Mejía fue trasladado al Hospital Médico Quirúrgico, del Seguro Social en San Salvador.

Lo anterior es lo que dijeron los informes policiales.

Pero versiones extraoficiales indicaron que el policía Hernández Mejía y el subinspector Olivo Ortiz llegaron a toda velocidad a la entrada de las instalaciones de la Sección de Investigaciones de Cojutepeque. El agente se bajó a levantar la pluma mientras el subinspector se quedó en su auto, con el motor en marcha.

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A los pocos segundos apareció el auto del atacante quien comenzó a dispararles a los elementos policiales que respondieron de igual forma al ataque, matando al oficial en el acto.

Otra vez el alcohol

Fuentes oficiales aseguraron a El Diario de Hoy que el hecho está muy confuso pero que se baraja la posibilidad de que en esa tragedia estuvo de por medio la ingesta de bebidas alcohólicas.

Preliminarmente se sabe que tanto el subinspector, el agente policial y el subteniente estuvieron departiendo en un establecimiento de la ciudad de San Vicente.

Sin embargo, no se sabe qué fue lo que provocó la ira del oficial militar para que se desencadenara la reacción a tal punto de perseguir a los policías, quienes buscaron refugiarse en la instalación policial.

El subteniente Fuentes de la Cruz tenía poco más de dos años de haber ascendido a ese grado, según consta en el Acuerdo Ejecutivo en el Ramo de Defensa, del 28 de noviembre de 2018.

Fuentes de la Cruz era originario y residente en Cojutepeque, en tanto que el subinspector Olivo Ortiz era originario de Nahulingo, departamento de Sonsonate y tenía muchos años de pertenecer a la subdirección de investigaciones.

El policía Hernández Mejía era originario de Santo Domingo, San Vicente y tenía más de 20 años como investigador de la PNC.