Agosto cerró con 131 muertes violentas a escala nacional, la que equivale a un promedio de 4 muertes por día y que sigue la tendencia a la baja que se traía desde los últimos dos años del gobierno anterior.
Las autoridades actuales han celebrado esta reducción y la han calificado como la más baja registrada en las últimas dos décadas.
De acuerdo con las cifras de la Policía Nacional Civil, que ofrece desde 1998 y que clasifican los meses con menos homicidios por año, agosto de 2019 tuvo menos casos.
Basados en esos datos, las autoridades concluyen que ni febrero de 1998, cuando hubo 152 homicidios, se compara con la reducción cosechada en agosto pasado.
Pese al bajo registro, agosto tuvo días más violentos que otros. El 3 y el 30 de ese mes, por ejemplo, hubo 10 y 11 casos respectivamente.
Si se compara con agosto del año anterior, los días en que más homicidios hubo fueron el 11 y 19, con 17 y 16 casos respectivamente.
Entre tanto, los días 2, 18, 20, 21 y 29 de agosto solo registró un caso cada uno. El promedio de muertes violentas en agosto fue de 4.23 por debajo de julio y junio, según las cifras reportadas por las autoridades.
El presidente Nayib Bukele no dudó en señalar en Twitter que agosto ha sido el mes con menos homicidios. Fue secundado por el ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, y por el director de la Policía, Mauricio Arriaza Chicas.
“En tres meses de Gobierno del presidente Nayib Bukele hemos avanzado mucho. Cerramos agosto con unas cifras históricas en la baja de homicidios. Hemos progresado más que en las últimas décadas y estamos seguros que vamos por el camino correcto. Y esto a penas empieza”, afirmó el ministro de Rivas en su cuenta de Twitter.
Por su parte, Arriaza Chicas también calificó esta reducción de “histórica”, lo que, según él, no es obra de la casualidad sino de las medidas puestas en marcha en el plan Control Territorial. “Se ha logrado la histórica reducción de los homicidios en este mes de agosto”, apuntó.
La disminución se ha mantenido este año. Según cifras de la Policía, el último semestre del gobierno de Sánchez Cerén, se registró del 1 de enero al 31 de mayo 1,342 homicidios. Esto equivalía a un promedio de 8.9 por día, menos de los 12 registrados en 2017, por ejemplo.
El gobierno actual ha seguido por ese camino, según lo revelan las cifras oficiales que ha reportado.
Las autoridades atribuyen esa disminución a la puesta en marcha del plan Control Territorial desde el 20 de junio con prioridad en 22 municipios con los más altos índices de criminalidad, entre ellos las 14 cabeceras departamentales.
También lo atribuye a la declaratoria de emergencia en los 28 penales del país con prioridad donde están alojadas pandilleros; al bloqueo total de la señal de celular, con lo que se ha reducido toda comunicación de los jefes de pandillas encerrados con sus cómplices en el exterior para la comisión de delitos como homicidios y extorsión.
El comisionado Arriaza Chicas también ha ponderado que la disminución de asesinatos se debe a más 11,000 capturas en menos de cien días de esta administración. Además, a la incorporación de más de 1,000 soldados adicionales en tareas de seguridad pública en San Vicente, Chalatenango, Zacatecoluca, San Francisco Gotera y Sensuntepeque desde el 30 de julio.
La Fuerza Armada ha desplegados 7,300 efectivos en municipios con altos índices de criminalidad como Santa Ana, San Miguel, Apopa, Ciudad Delgado, Mejicanos, Soyapango, Ayutuxtepeque, Colón, Santa Tecla y San Salvador. Otros 1,000 soldados son entrenados para ser desplegados en Acajutla, Puerto de La Libertad y Santa Rosa de Lima.