Cementerios cobran entre $6 y $900 por entierro de víctimas de COVID-19

Apopa, Soyapango y San Salvador tienen precios altos para inhumaciones como efecto de la pandemia. Las funerarias privadas también cobran más si manejan un muerto por esa causa.

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El incremento en los costos por servicios funerarios no solo es en los cementerios municipales si no también por parte de las funerarias. Foto EDH/ EFE

Por Jaime López

2020-07-25 5:09:36

Morirse en tiempos de COVID-19 no solo causa dolor a las familias sino un alto costo económico para resguardar sus restos en un cementerio salvadoreño, sobre todo en la zona metropolitana de San Salvador donde los precios más altos oscilan entre los $445 y $900.

En un sondeo con algunas alcaldías, a través de las oficinas de prensa, para verificar el costo de este servicio, la que más bajo cobra es Colón ($6), específicamente en el cantón Lourdes, La Libertad; seguido de Santa Ana donde ronda los $14; mientras que el que más cobra es el cementerio municipal de Apopa, donde alcanza los $900.

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Las consultas se hicieron a las comunas de Apopa, Santa Ana, Santa Tecla, Mejicanos, Ciudad Delgado, Ilopango, y Santo Tomás. En la alcaldía de San Salvador no contestaron. En este caso fueron funerarias las que refirieron el costo.

Ilopango es un caso aparte, allí dijeron que no cobran por enterramientos, aunque no precisaron si hay una diferencia cuando aplica nichos a perpetuidad. Lo que sí explicaron es que dejan a opción de los dolientes si donan a los sepultureros.

Algunas alcaldías consultadas alegan que han elevado sus costos de enterramientos porque debido a la pandemia se están quedando sin espacio, casos como el de Soyapango dijeron haber pasado de 60 servicios a 280 por mes.

Y es que la pandemia ha causado el colapso de otros cementerios como el de Ilopango, tanto que han buscado ya un terreno para edificar un nuevo camposanto, según ha dicho el alcalde Adán Perdomo.

En el caso de Soyapango, las nuevas tarifas también obedecen a que ha invertido en un nuevo cementerio y en equipo especial para los sepultureros como parte del protocolo de prevención.

Aparte de las alcaldías, también las empresas funerarias han elevado costos en esta pandemia, algunas de ellas que fueron consultadas alegan que es por la inversión en equipo de protección para su personal. Cobran de $4,000 a $5,000.

Y si ser enterrado es más caro en estos tiempos, no porque los parientes pagan grandes sumas de dinero eso significa enterrar a su familiar en tumbas individuales. En el caso de Apopa, un ciudadano que recientemente enterró a su esposa, denunció que en el mismo nicho por el que pagó $900 introdujeron a un muerto por COVID.

Otros ciudadanos han denunciado que en otros cementerios en cada fosa inhuman cinco, seis y hasta nueve cadáveres.

Queda poco espacio

A todo eso se suma que no todos los municipios disponen sus cementerios para inhumaciones por coronavirus. En la zona metropolitana son pocos los cementerios que cuentan con espacio para estos casos, tal es el caso de San Salvador, Soyapango y Apopa, pero esto tiene su costo.

En San Salvador, la alcaldía ha destinado La Bermeja para todos los que llegan bajo protocolo COVID-19; en Soyapango es el Parque Jardín y, en Apopa, es el General.

Tras incrementar el número de fallecidos por el virus o sospechosos de haber muerto por esa causa, el alcalde capitalino, Ernesto Muyshondt, recientemente afirmó al Canal 6 que a diario hacen 20 entierros bajo protocolo COVID, que llevan más de 700 entierros de casos sospechosos de esa enfermedad, que se preparan con 1,400 nuevas tumbas y un equipo de incineración para los próximos cuatro meses.

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Muyshondt no ha dicho la cantidad real de espacio que tendría La Bermeja para la atención de estos casos, sin embargo ha dicho que negociaría la compra de un 25 % de los camposantos privados para atender la demanda ciudadana.

Según algunas funerarias consultadas, los costos por entierro en La Bermeja oscilan entre los $400 y $500 en tumbas colectivas y solo pueden ir a tumbas individuales si pagan nichos o bóvedas.
Soyapango cuenta con el cementerio Jardín, ubicado en urbanización Sierra Morena y que ha destinado para los muertos por coronavirus, tiene capacidad para 7,000 tumbas, pero puede duplicarse.

Los costos de enterramiento en el cementerio Jardín por persona es de $445, una suma que los parientes pueden pagar en un solo pago o en 12 cuotas de $37.14 por mes, afirmó el gerente Marcos Servellón.

El alcalde de Soyapango, Juan Pablo Álvarez, ha manifestado que en caso de que las familias no puedan pagar esa suma de dinero, pueden abocarse a la alcaldía y ahí son sometidos a un estudio socioeconómico y exonerarlos del pago.

En el caso de Apopa, donde al inicio de la pandemia fue a los cementerios que más captó muertos por COVID, el costo del servicio funerario oscila entre $500 y $800; en el primero es por alquiler durante siete años y el otro es a perpetuidad.

La alcaldía se limitó a decir que esas tarifas, al igual que todos los servicios municipales están regulados por una ordenanza.