En malas condiciones se encuentra la calle de tierra que funciona como conexión entre los municipios de Moncagua y Quelepa, en San Miguel, que es utilizada como ruta alterna para los automovilistas que buscan evitar el tráfico que se ocasiona sobre la carretera Panamericana por la construcción del Periférico Gerardo Barrios en San Miguel.
Si bien toma menos de 20 minutos recorrer el trayecto Moncagua- Quelepa e ingresar a la ciudad de San Miguel por esa vía, los propietarios de vehículos pequeños se arriesgan a dañarlos porque la lluvia y el tráfico vehicular han dañado algunos tramos de la arteria.
El miércoles, personal de la alcaldía de Moncagua llegó a reparar una bóveda en cantón Salamar, debido a que la ruptura de dos tuberías de cemento provocó el hundimiento en un tramo y dejó a un carril la calle.
“Como esta en una calle alterna a la construcción del periférico le notifiqué a la empresa Eccon y ellos llegaron a remover un derrumbe, pero el daño del puente no lo hicieron y dado la importancia que tiene por hoy la calle decidimos ir a reparar, ya se tiene paso habilitado”, explicó el alcalde Sergio Solózarno.
El alcalde de Quelepa, Marvin Bernal Silva, confirmó que el tráfico por la vía ha aumentado mucho.
“La calle Quelepa- Moncagua es intermunicipal, en cambio la calle antigua a Quelepa-San Miguel es ruta Fovial. En la primera en 2019 se reparó un tramo con material selecto pero ya se dañó, y en el sector de la calle antigua hace dos años mediante un convenio con Fovial-MOP y alcaldía se logró pavimentar un buen tramo, pero existen áreas de empedrado fraguado que necesitan de una capa de asfalto” comentó el edil.
Según el alcalde Silva, el convenio que su comuna tenía firmado con el Ministerio de Obras Públicas (MOP) terminó en febrero de 2019, “luego hubo cambio de gobierno y a partir de esa fecha no hemos logrado firmar uno nuevo”, dijo.
Ante la falta de convenio, las municipalidades que cuentan con rutas alternas, ante la construcción del periférico Gerardo Barrios, no tienen una herramienta legal que les permita solicitar la reparación de dichas rutas.
Solórzano confirmó el apoyo que como comuna esperan de la empresa que construye el periférico y del MOP: “la calle alterna quedamos, desde que aprobaron los planos, que el mantenimiento el toca al Eccon, MOP y Fovial durante la construcción”, insistió.
Gladis Girón, de 63 años, reside en el barrio San Antonio, de Quelepa, y asegura que el paso vehicular ha aumentado drásticamente al punto de generar congestionamiento vial. “La calle ya tenía algunos hoyos pero con el tráfico se ha dañado más, las autoridades de la alcaldía transitan por acá y ellos ya saben cómo está la calle”, explicó.