La jornada 28 de la Bundesliga comenzó este martes con el clásico alemán como el plato fuerte. “Der Klassiker” como es llamado el duelo entre el Bayern Múnich y el Borussia Dortmund terminó en victoria bávara por 0-1 en el desierto Signal Iduna Park, del cual salió más fortalecido rumbo a conquistar su octavo título de la liga alemana.
El partido tenía en la previa un conjunto de duelos importantes, entre los que destacaba el que protagonizarían Erling Haaland, la nueva promesa del fútbol mundial y Robert Lewandowski, la experiencia y calidad del Bayern, aunque ambos no anotaron, el duelo fue parejo, porque tuvieron claras oportunidades a gol.
Y precisamente fue sobre 33 segundos, cuando Haaland estuvo a punto de anotar, al finalizar una excelente jugada que inició él en la media cancha, mandando balón al área, pero fue cortado por el portero y en el contrarremate le pegó el noruego y se fue bajo las piernas de Neuer, pero la salvó Boateng en la línea de gol.
3 ? triunfos consecutivos en #DerKlassiker
6? de los últimos 7? en la #Bundesliga pic.twitter.com/T0I1GVFd1F— FC Bayern München Español (@FCBayernES) May 26, 2020
El dinamismo de los primeros minutos continuó con un remate de Julian Brandt a los 3 minutos, pero lo logró capturar el renovado portero del Bayern, Manuel Neuer. A los 18′, el polaco Lucasz Piszczek salvó otro remate en la línea, cuando Serge Gnabry había disparado en el área chica.
En el complemento del primer tiempo, el Borussia tenía mejor manejo del balón y trataban de llegar con más constancia por la banda derecha, donde se manejaba el canadiense Alphonso Davies, pero no tenía claridad para dar el último pase en el área, mientras el Bayern tomó impulso en el tramo final del primer tiempo, donde incluso sacó el gol de la victoria.
Al minuto 40, Leon Goretzka sacó un violento remate de fuera del área, que hizo un esfuerzo espectacular del portero Roman Burki la rechazó a un lado. Tres minutos después, Joshua Kimmich se sacó una jugada de la chistera, cuando logró sacar un remate punteado desde fuera del área, tras una gran combinación entre Thomas Muller, Kingsley Coman y él, quien logró el espacio justo para levantar el globito al portero y conseguir su tercer gol en la temporada.