El Ministerio de Salud reportó un ligero incremento en el índice larvario tanto a escala nacional como para el departamento del país, así como un alza de casos con sospecha de dengue para la última semana de agosto.
De acuerdo a datos del boletín epidemiológico para la semana 35, que abarcó del 25 al 31 de agosto, el índice larvario pasó de 12 puntos a 13 para todo el país. Mientras que en el departamento de San Salvador se elevó de 24 a 29, con respecto a lo reportado durante la semana epidemiológica 34, del 18 al 24 de agosto.
Los casos con sospecha de dengue también se elevaron ligeramente después de haber mantenido una tendencia a la baja durante las semanas anteriores.
En la última semana de agosto se reportaron 1,191 casos con sospecha de dengue, 127 casos más que en la semana anterior.
De igual forma se incrementaron los casos reportados con sospecha de chikungunya y de zika.
En el último boletín se registraban 28 casos con sospecha de chik, mientras que en la semana anterior se había atendido a 15 casos.
De zika pasó de un caso reportado en la semana epidemiológica 34 a 14 casos en la semana anterior.
Hasta el 31 de agosto, el Minsal ha atendido 16,571 casos sospechosos de dengue, lo que representa un incremento del 264% casos con respecto al año pasado.
El médico infectólogo, Iván Solano Leiva, explicó que el incremento del índice larvario es preocupante, ya que implica que hay más criaderos de zancudos en las casas de la población, y al haber más zancudos se elevan las probabilidades de que se extienda el virus del dengue, chikungunya o zika.
“Significa que también las personas no estamos haciendo lo que nos corresponde que es eliminar los criaderos de zancudos”, dijo.
El médico señaló que cuando el invierno se establezca del todo, hay probabilidades de que los casos sigan al alza. Sostuvo que el país sigue en alerta epidemiológica.
Para Solano no es conveniente que las autoridades de Salud se enfoquen en decir que hay una tendencia a la baja, ya que esto lleva a que la población baje la guardia con las acciones para eliminar los criaderos de zancudos.
“Las actividades que han realizado son buenas, pero deben mantenerse constantemente. Debe haber actividades educativas para todo el año”, expresó Solano.
El médico lamentó que antes de salir, la gestión anterior no se preocupó por realizar actividades preventivas y de educación desde principios del año y ahora se están viendo las consecuencias.
“Las autoridades actuales no deben bajar la guardia”, dijo.
Comentó que en estas últimas semanas le ha tocado ver casos de familias completas con dengue que le hacen preguntarse qué se está haciendo desde los hogares para prevenir el dengue. “Es cuestión de educación, de cambio”.