La etiqueta de líder e invicto con la que Águila llegó a Chalatenango fue borrado por el equipo norteño, con una victoria 1-0, la primera que logran en este torneo.
Tarde gris en Chalatenango, húmeda por la lluvia que cayó unos minutos antes del partido, que refrescó el ambiente pero que ahuyentó a los aficionados, quienes llegaron en un número reducido al Gregorio Martínez.
Un par de pancartas y sin instrumentos musicales, permitieron escuchar los gritos con facilidad tanto dentro de la cancha, como en las gradas. Daba la sensación de ser un encuentro de pretemporada, aunque en la cancha era Chalatenango quien estaba más decidido en lograr los tres puntos.
Carlos Romero, DT de Águila, volvió a realizar algunas rotaciones dentro del equipo titular, para darle descanso a algunas piezas, entre ellos: Benji y Javier Lezcano, por quienes ingresaron Martín Mejía y Santos Guzmán, respectivamente.
Pero aunque las variantes eran mínimas, parecieron ser difíciles de acomodar para el esquema que planteó el entrenador, 4-4-1-1, con la doble contención y Joaquín Vergés flotando en el medio, sin recibir muchas pelotas.
Chalatenango, también con un 4-4-1-1, trasladó mucho su juego por los costados y confiando mucho en la velocidad de los laterales, Jairo Henríquez y Miguel Lemus.
El primer tiempo fue casi por completo de los norteños. Tuvieron dos para abrir el marcador. La primera fue negada por el poste, en dos ocasiones en la misma jugada, primero con un tiro de Irving Valdes y luego con el remate de Rodrigo Herrera (3’). Después, tras un tiro de esquina, Joel Ortega conectó la pelota de cabeza y Mejía se encontró con la pelota un par de pasos delante de la línea de gol (35’).
Muy inconformes, los migueleños dejaron la cancha en el medio tiempo hacia los camerinos. Carlos Romero fue el primero en caminar, cabizbajo, muy pensativo. Fue el último en regresar y dando la instrucción de que entrara Richard Menjívar, por Chigüila. El jugador de origen norteamericano, al igual que muchos jugadores, se mostró desubicado en la cancha pero cumpliendo a la hora de marcar.
En estos momentos reapareció la lluvia y se mantuvo constante durante el primer tiempo, haciendo más rápido el traslado de la pelota y complicado el control de la misma por parte de los jugadores, quienes varias veces se resbalaron.
Águila se mostró adormitado en la parte de complemento y eso fue aprovechado por los norteños que en una jugada de Herrera y Valdes terminó definida por Jairo Henríquez, con un toque suave a la salida de Mejía (51’).
Se escucharon más los lamentos de los emplumados, al ser mayoría en el estadio, que la celebración de los norteños, que se multiplicó cuando el portero Yonathan Guardado paró un penal a Joaquín Vergés, después de que Ronald Rodríguez recibiera falta en el área (65’).
Los minutos finales fueron de intensidad impuesta por los migueleños, después de que los norteños no pudieron asegurar la victoria, con remates dentro del área. Como pudo, Chalate aguantó el resultado y sonrieron con su primera victoria, a costa del campeón, que dejó muchas dudas en el sombrero.