Los atrasos en las entregas de los pedidos, la falta de materia prima, la posibilidad de caer en multas por incumplimiento de contratos y pérdida de productos, son algunos de los problemas que aún persisten pese a que ya transcurrieron 21 días de que las Aduanas de la región implementaran la Declaración Declaración Única Centroamericana (Duca).
Las primeras dos semanas, cientos de furgones estuvieron varados en los puestos fronterizos de Centroamérica con producto perecedero del cual mucho tuvo que botarse, así como otros productos que no llegaron el día pactado para su comercio.
Ese es el caso de la industria de zapatos Caricia Shoe Company que enviaba varios contenedores con zapatos a Guatemala y Honduras, para ser comercializados en el marco de la celebración del día de la madre y no logró llegar a tiempo.
“Esto es un gran problema. Hemos llegado a tener hasta 23 contenedores varados en frontera y esperamos que lo solucionen cuanto antes porque con la colección del Día de la Madre perdimos y ya se viene la colección Del Día del Padre y seguimos con problemas por este nuevo documento”, explicó Adolfo Egan, presidente de la compañía.
El empresario también explicó que con esa implementación y con el del nuevo sistema de las aduanas salvadoreñas todo se ha vuelto más engorroso. “Con todo esto se ha triplicado el trabajo”, manifestó Egan.
En una entrevista reciente la directora ejecutiva de la Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas (Camtex), Patricia de Figueroa, dijo que es preocupante porque pueden perderse incluso negocios debido a esta situación, ya que la región se está percibiendo menos competitiva.
La presidenta de la Comisión Intergremial para la Facilitación del Comercio (Cifacil), Carmen Aída de Meardi, ha señalado falta de voluntad, de capacidad y deficiencia en las autoridades para resolver este problema, ya que incluso el plan de contingencia que ha implementado la Secretaría Económica para la Facilitación del Comercio (Sieca) no ha funcionado exitosamente.
El plan de contingencia ya fue ampliado dos veces. Actualmente está programado hasta el 3 de junio, ya que los sistemas informáticos con la Duca no se han estabilizado.
“Está en juego las condiciones deplorables de los pilotos de los medios de transporte atrapados en las largas colas, las perdidas ya invaluables de las empresas, el incremento en sus costos, la mercadería perecedera dañada, el riesgo del desabastecimiento de materia prima y producto final en los mercados de exportación que tanto cuesta lograr y en la distribución local, la pérdida de barcos y de entregas a tiempo a los clientes, entre otros. Esto es otra realidad, la del territorio y desafortunadamente no hay sentido de urgencia”, recalcó De Meardi.
Por su parte, Raúl Alfaro, presidente de la Asociación de Transporte Internacional de Carga (Astic) señaló que fue un error la implementación del sistema de la Duca y que las autoridades no quieren reconocerlo.
Actualmente una de las medidas dentro de los planes de contingencia fue un acuerdo entre La Intendencia de Aduanas de Guatemala y la Dirección General de Aduanas de El Salvador para habilitar el paso del puente El Jobo, que conecta con Las Chinamas, por el lado de El Salvador y Valle Nuevo En Guatemala, para los medios de transporte que van vacíos.
$48 millones
$16 de exportación y $32 de importación, en el caso de El Salvador, son los montos que se movilizan y que están en juego.