USULUTÁN. Por conciencia o sin ella, las familias del municipio de Jucuarán, en el departamento de Usulután, saben que tienen que cuidar y ocupar el agua realmente para lo que la necesiten. Existen dos factores para ello: hay muy poca y el servicio es muy caro.
Desde hace cinco años, el servicio de agua domiciliar lo dejó de prestar la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Anda). Ahora la autónoma lleva agua en camiones cisternas, los cuales son insuficiente para más de 400 familias del casco urbano del municipio.
Esas pipas son llenadas en el municipio de El Tránsito, de San Miguel, explicó el alcalde de Jucuarán, Boanerge Carranza.
Los habitantes de ese municipio estuvieran pasando una situación más grave si la Asociación de Comunidades Unidas para la Administración del Sistema de Agua Potable de Jucuarán (Acuasaj) no les vendiera el servicio de agua potable.
Esta asociación gestionó hace más de seis años con una Organización No Gubernamental (ONG) la apertura de un pozo de agua potable para abastecer a las comunidades de Jucuarán que contaban con el servicio de la Anda porque le resultaba muy caro llevarles el sistema de cañerías.
Ahora el problema de los habitantes del casco urbano es que el servicio de agua que les vende Acuasaj es muy caro.
La asociación vende el metro cúbico de agua en $1.00, más $1.00 por el mantenimiento de los motores.
El costo resulta elevado si se compara con los precios de Anda, que además tiene el subsidio para los que consumen de cero a 40 metros cúbicos de agua potable.
“Estamos con un proyecto Acuasaj, ellos nos abastecen pero el costo es bastante alto. Nosotros con Anda antes pagábamos, por decir algo, $3.00 pero con este pagamos entre $30.00 y $ 35 .00, depende el consumo”, explicó Berta Alicia Sánchez, encargada de la Unidad de Atención Social de la alcaldía de Jucuarán.
Muchos pobladores que no tienen suficientes recursos económicos se limitan a consumir poca agua. Otros optan por comprarle al vecino un barril o los que necesiten, los cuales se los venden a $1.00.
En Jucuarán hay muchas familias que se abastecen de la red de la junta de agua, una de ellas es Estela de Orellana, quien expresó que el servicio se los prestan cada dos o tres días a la semana.
“Este mes el recibo nos vino de $30.00, a veces viene de $40.00 o de $42.00, es bien caro. Hay gente hasta $60.00 paga”, aseguró.
Para ella, otro de los problemas del abastecimiento que les da Acuasaj es que el agua llega con demasiado cloro y eso hace esperar que la consuman dos días después. Mientras el cloro se diluye, tienen que comprar agua envasada, lo que al mes les supone más de $12.00, aseguró.
El gerente de la comuna de Jucuarán, Isaías García, dijo que el servicio en el municipio es muy caro porque el agua que les envía la asociación lo hace por medio de tres bombeos y todo es hacia arriba.
“Todo el bombeo es por electricidad, por eso es muy cara”, expuso García.
El alcalde Carranza manifestó que el problema surgió hace cinco años “cuando la fuete superficial de agua se secó”, lamentó.
Casas con dos medidores para servicio de agua
Muchas familias, ante la falta de agua por parte de la Anda, tuvieron que emigrar al servicio que proporciona la Asociación de Comunidades Unidas para la Administración del Sistema de Agua Potable de Jucuarán (Acuasaj).
Cada familia que lo ha solicitado ha tenido que pagar la instalación de nueva cañería y el nuevo medidor de agua; lo cual ronda los $750 porque el interesado tiene que pagar trabajadores, comprar materiales, solicitar los permisos a Catastro de la alcaldía de Jucuarán, entre otros.
Walter Benítez, quien reside en Nueva York, Estados Unidos, pagó más de $700 por la instalación de su nuevo medidor.
“Muchas personas dejan de comprar otras cosas por comprar agua. Hay vecinos que les ayudan a pagar los recibos porque muchos son de escasos recursos”, dijo Berta Sánchez.
Los residentes de Jucuarán no tienen opción y mientras no exista un servicio diferente al que presta Acuasaj, seguirán pagando un elevado costo por el agua potable.
