La violencia doméstica no depende de la clase social, ni de la formación académica. Es un problema que incluso atraviesan las celebridades. Tal fue el caso de la actriz mexicana Kate del Castillo quien vivió un verdadero calvario junto al exfutbolista mexicano, Luis García.
Los rumores entorno al conflictivo matrimonio siempre rondaron a la pareja. Sin embargo jamás habían salido a la luz los oscuros detalles, hasta hace unos días que la propia actriz decidió romper el silencio y dar su testimonio en una íntima entrevista para el programa “Red Table Talk: The Estefans”.
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“Era muy gracioso, fascinante, encantador… pero luego lloraba hasta cansarse, me abrazaba y se ponía de rodillas diciendo ‘¡por favor, por favor’, perdóname, necesito ayuda"”, recordó la actriz .
La pareja de mexicanos contrajo nupcias en el 2001 y se divorciaron en el 2004. Sobre su relación Kate dijo “estaba tan enamorada y realmente traté de hacer todo para que las cosas funcionaran”.
Desafortunadamente Kate recordó “estábamos en nuestra luna de miel, y esperaba a que él se durmiera para poder salir y llorar. Yo no sabía qué hacer”.
La protagonista de “La reina del sur” rompió el silencia casi 14 años después de lo sucedido pues confesó que sentía miedo y vergüenza.
Su testimonio ha acaparado toda la atención mediática pues señaló que ella vivía con miedo. “Él era un hombre distinto. Yo literalmente tenía miedo (de García). Recuerdo estar dormida, bueno, fingir que estaba dormida, y escuchar las llaves y mi corazón comenzaba ¡bum, bum, bum!”.
El momento más impactante fue cuando reveló que García no solo la maltrataba psicológicamente diciéndole que era pésima actriz, entre otros insultos. Kate también confesó que en ocasiones la golpeaba, pateaba e incluso intentó estrangularla.
“Este hombre me rompió, yo pensé que tenía un autoestima fuerte, era actriz, vivía feliz con mis padres y de repente, él me destrozó en todas las maneras posibles, incluso en mi trabajo me decía que tenía que tomar clases de actuación, que era una pésima actriz, que fuera a la escuela”.
Muy consternada Kate reconoció que fue una relación en la que “estaba prácticamente secuestrada”.
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