Joan Manuel Serrat se presentará otra vez en nuestro país, el martes 12 de marzo. Siempre que viene de visita, el cantautor catalán destaca que El Salvador es un país “de grandes recuerdos y gente entrañable”.

En una de sus anteriores visitas, en 2011, Serrat también habló de fútbol. Y del “Mágico” González, de quien dijo, se recuerda muy bien. “El Mágico era estratosférico, era fantástico, era un superclase. En Cádiz todavía aparece en todas las conversaciones“, indicó en entrevista exclusiva con EDH.

Sobre El Salvador, también había dicho: “A El Salvador lo he visitado en varias ocasiones a lo largo de los últimos 40 años. Como decía, tengo recuerdos cariñosos de gente querida, gente muy cercana a lo que estamos haciendo. También recuerdos muy dolorosos con relación con los jesuitas y toda la gente que sufrió en el país y murió por El Salvador”, en otra entrevista.

A continuación, las pláticas completas con el fenomenal músico y cantante.

Serrat: “El Mágico era estratosférico”

El cantautor catalán habló en exclusiva con El Diario de Hoy del fútbol exquisito del Barcelona y del gran ídolo salvadoreño. Serrat presenta su espectáculo “Hijo de la luz y de la sombra”, como parte de una gira. Se hizo tiempo para hablar de fútbol.

(Entrevista con fecha original de publicación, domingo 27 de Febrero de 2011)

“Y cuando gana el Barça, cree que hay Dios y es azulgrana…”, canta Joaquín Sabina en “Mi primo el Nano” un homenaje en forma de canción a Joan Manuel Serrat. Todo una definición del cantautor catalán que el 5 de marzo llegará al país para presentar su espectáculo “Hijo de la luz y de la sombra”.
La música es su vida; el fútbol, su pasión y el Barcelona, su delirio. Por eso, Serrat acepta correrse a un costado de la rutina de promocionar su show musical para darle paso a otro tema, en el largo diálogo telefónico desde Guatemala. Ese tema que lo tiene atento en cualquier lugar donde lo lleve su extensa gira de casi un año, ese lugar de la charla que pasa de las canciones y los poemas a los jugadores, goles. Y también, a los colores que pueden esperarlo cuando llegue a El Salvador…

Aunque parezca curioso, en El Salvador hay muchos hinchas fanáticos del Barcelona…
¿Y por qué curioso? No me parece curioso. La gente ama las cosas bien hechas. Y el del Barcelona es un fútbol muy estimulante, muy alegre. Muy peleador y al mismo tiempo, muy técnico. El Barcelona ha conseguido aunar esta voracidad de recuperar la pelota con el buen gusto y la delicadeza de manejarla.

¿Ubica a este equipo entre los mejores de la historia?
No sé. Es el mejor equipo en estos momentos. Mesurar los equipos de fútbol a lo largo de la historia es difícil porque las circunstancias son distintas también, depende de lo que cada quien busque. Creo que jugar al fútbol es más difícil cada día porque la velocidad aumenta y al aumentar esto, tienen que subir al mismo tiempo muchas otras cosas en la cabeza y en los pies del futbolista.

Más allá de la Liga, donde están a siete puntos, se vienen partidos muy intensos, ¿cómo ve la revancha contra el Arsenal?
Lo veo con optimismo. Hay equipo como para poder superar estas dificultades. Pero hay que verlo con humildad y realismo… En el fútbol se gana y se pierde y hay que saber aceptar todas las circunstancias.

¿Y los futuros clásicos contra el Real Madrid?
El Madrid es un grandísimo equipo que ya lleva sufriendo muchas derrotas frente al Barcelona. Y esto cada vez lo estimula más … Algún día nos ganará el Madrid. Esperemos que tarde.

Usted dice que en el fútbol se gana y se pierde, pero el Barcelona está bastante acostumbrado a ganar…
Es un equipo al que no se le puede reprochar absolutamente nada. Es un equipo muy sacrificado que junta esa voracidad que tiene para recuperar el balón con esa delicadeza para conservarlo. Es un equipo que da muchas satisfacciones y del que un hincha se siente orgulloso.

Un Serrat auténtico alguna vez dijo que “en el mundo hay pocas cosas más que el fútbol, pero alguna hay”. Con ese concepto, el de disfrutar hablando de fútbol, continúa la plática.

Maradona dijo que si le daban a elegir, contrataría a José Mourinho antes que a Pep Guardiola ¿Qué opina?
Nada.

¿Nada?
… (Sólo risas…)

¿Messi o Cristiano? ¿Está de más hacer hoy esta pregunta?
Je, no tengo ninguna duda… Que Messi sea jugador del Fútbol Club Barcelona es absolutamente fundamental para que el Barcelona tenga la fuerza y el poder futbolístico que tiene. Y a nosotros nos alegra mucho que el chico haya venido a los 13 años, se haya criado y haya crecido en esta casa que ha dado tantos y tan buenos futbolistas en estos últimos años.

Su corazón azulgrana late a cada instante. Pero es hora de cambiar de tema. El telón de la charla lo pone el fútbol salvadoreño. En realidad, su máximo exponente histórico, hoy casi convertido en mito… hasta para el propio Serrat.

Y del fútbol de El Salvador, ¿qué conoce?
¡Al Mágico hombre!, como todo el mundo. (risas)

Cuénteme de él, ¿lo vio jugar?
Y, el Mágico era estratosférico, era fantástico, era un superclase. En Cádiz todavía aparece en todas las conversaciones. Siempre se le recuerda con cariño. Un personaje único que iba más allá del fútbol.

¿Le gustaría verlo en esta visita a El Salvador?
Quien sabe, ojalá pueda verlo. Por lo pronto, mándele un abrazo grande de mi parte. Él ya sabe que se le recuerda siempre con mucho cariño.

Lo que es seguro es que se va a cruzar con muchas camisetas de su Barça por las calles de San Salvador…
Me parece muy bien. Yo les enseñaré la mía también a todos los salvadoreños.

 

Joan Manuel Serrat: “El Salvador, un país de gente entrañable”

“De vez en cuando la vida toma conmigo un café”. Momentos inolvidables en frases, poemas, canciones. O en una simple charla telefónica. Joan Manuel Serrat saluda amablemente del otro lado de la línea con aquella voz inconfundible, tan lejana y tan cercana a la vez. La misma que engalana cientos de canciones, hoy casi himnos, cantados, silbados, tarareados por generaciones enteras.

Acaba de dar un concierto inolvidable la noche anterior en Guatemala y al otro día ya está listo para los requerimientos periodísticos, aquellos que llegan desde El Salvador, país que visitará el 5 de marzo, con su espectáculo “Hijo de la luz y de la sombra”, un homenaje hecho música a los poemas de Miguel Hernández. Enseguida -y tal como escribió de él alguna vez Sabina- “le tiembla el corazón en la garganta” a la hora del recuerdo gratificante del país: “Uh, El Salvador, tengo recuerdos muy cariñosos de gente muy entrañable… y también dolorosos”. Serrat puro.

Llegará al país en una gira que lleva casi un año empezó en abril del año pasado…
Sí, en España. Y que terminará 14 meses después en París, en junio. Una gira muy larga pero muy intensa y muy satisfactoria, llevando por el mundo este manojo de poemas de Miguel Hernández convertidos en canciones y especialmente el espectáculo, “Hijo de la luz y de la sombra”, que afortunadamente está recibiendo mucho cariño por todos los lugares y ha sido una satisfacción para nosotros.

En una carta abierta, usted escribió dos razones para volver a musicalizar la obra de Hernández: el centenario del nacimiento del poeta y la intemporalidad de su poesía.
No sé si solo dos. Hay tantas razones para retomar lo que es bueno. Fundamentalmente yo retomo los versos de Miguel Hernández porque tienen una absoluta validez, una poesía que no se queda en el tiempo, sino que atraviesa los tiempos y circunstancias para ser absolutamente válida en cualquier momento y lugar.

Guatemala, Costa Rica, Honduras, El Salvador ¿El espectáculo puede servir para acercar al público centroamericano a este poeta o para que se haga conocido?
A mí para lo que me ha servido es para escribir buenas canciones. Si además de esto, los textos de esta poesía estimulan a la gente a leer, a buscar más en los libros, pues también me parece fantástico. Pero no olvidemos nunca que mi letra principal es hacer canciones lo más buenas posibles.

Hace exactamente un año que apareció su disco “Hijo de la luz y de la sombra”. ¿Qué le ha generado todo este tiempo?
No sé con certeza la fecha, pero le agradezco el dato. A mí personalmente me dio la gran satisfacción de ver que un trabajo que ha sido difícil y que en principio tuvo serias dificultades para poder existir, ha sido muy compartido por la gente, muy aplaudido y muy premiado. En este último mes nos han dado el premio Ciudad de Barcelona al mejor espectáculo musical, hemos recibido el premio a una de las Metáforas y tres nominaciones para los Premios de la Música. O sea que realmente es un disco que está dando grandes satisfacciones cada día.

¿Cómo sintetizaría su sentimiento hacia Miguel Hernández?
Es uno de los poetas más musicales con los que uno se puede encontrar. El amaba la música y su poesía, tanto por su origen popular como por su sentimiento musical, hacen escribir con un lirismo especial y con unas construcciones que son fácilmente musicables. Hernández tiene una característica poética que lo hace diferente, diferente en el sentido que él tiene un universo propio y se maneja siempre con él. Y con la independencia de que su poesía crezca, estos elementos de origen que tiene, estos elementos que son de las palmeras, del barro, del sol, del viento, de la armonía, el mundo es el barro con el cual él va creando su poesía. Por eso, su poesía es tan extraordinariamente peculiar. Y solamente los grandes poetas tienen este don. No tienen que nutrirse de universos extraños, universos ajenos. Con el suyo, crean sus obras.

Todos los países y los lugares tienen su encanto, pero ¿le genera algo especial llegar a El Salvador?
A El Salvador lo he visitado en varias ocasiones a lo largo de los últimos 40 años. Como decía, tengo recuerdos cariñosos de gente querida, gente muy cercana a lo que estamos haciendo. También recuerdos muy dolorosos con relación con los jesuitas y toda la gente que sufrió en el país y murió por El Salvador.

¿Eso le hace vivir una sensación distinta cada vez que llega al país?
Evidentemente. Uno no puede prescindir de su propia vida. Ni debe ni puede. Ni quiero. Y será la primera vez que llego en una circunstancia como esta, con el Frente y la izquierda en el gobierno.

¿Y eso qué le genera?
A los que les tiene que generar algo especial es al pueblo salvadoreño, que tiene un gobierno con sus mismas preocupaciones.

¿Qué recuerdos tiene de El Salvador? Por ejemplo de sus comidas…
Je, los tamales, especialmente, me gustan mucho, de todo tipo. Espero poder disfrutarlos otra vez. También las pupusas, obvio.

¿Y sobre poetas, artistas?
Sí, sé que hay muy buenos poetas y sobre todo jóvenes, que interesan mucho. No sólo de El Salvador, sino de toda Centroamérica, porque en toda la región tienen muchos poetas que los unen. Hay como una tradición literaria centroamericana que gira desde los grandes ejemplos que han podido tener hasta lo que es la canción popular. La poesía y la canción popular tienen una gran cercanía. No doy nombres porque parecería que te quedas con uno y dejas a otros.

¿Qué significa Centroamérica para usted?
Es una parte de América que yo jamás he querido pasar por alto ni he querido prescindir de ella. Es un rincón del mundo que, salvo lo que puede ser una pequeña isla como Costa Rica, es un territorio que ha sufrido mucho los últimos años. Y es un territorio rico, lleno de gente estupenda, que merecería una proyección en la vida como la que ha estado buscando y por la que ha estado peleando siempre.

Cuénteme, por favor, cómo fue el concierto en Guatemala. ¿Se puede esperar algo parecido en El Salvador?
Cada concierto es distinto. Es distinto porque uno sube al escenario siempre con la intención de hacer el mejor concierto de su vida, sea cual sea el lugar que esté. Y hacia ahí lo diriges. Pero cada concierto sabe distinto. Me conformaría con que el concierto de El Salvador tenga nivel en todos los sentidos. Tanto de la gente como el nuestro. La gente es cariñosa, Guatemala compartió y fue cómplice en todo momento del concierto. Eso espero. Y también que nosotros tengamos una respuesta a la altura que la gente se merece.

En Madrid, los conciertos de este disco fueron exclusivos de la obra de Miguel Hernández, ¿en El Salvador también se escucharán las canciones clásicas de su repertorio?
Sí. Me pareció que era una lástima viajando a San Salvador tan poco como viajo, no pudieran participar también otras canciones que nos han unido durante mucho tiempo.